El ajuste económico y previsional que ordenó el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, provocó una masiva renuncia de funcionarios de primera y segunda línea (la mayoría de La Cámpora) y dejó sin soporte político al mandatario provincial del Frente para la Victoria.

Los desmanes ocurridos el jueves pasado, le dieron la pauta a los militantes de la agrupación política creada por Máximo Kirchner que era hora de dejar al gobernador a su suerte. En tal sentido, Cristina decidiría su futuro, el cual no parece nada promisorio.

La sesión para aprobar el paquete de leyes ideado y redactado por la propia presidenta y su séquito más cercano fueron la más cabal muestra de que el kirchnerismo no paga lealtades, como dice. A Peralta le llegó su hora y ahí está La Cámpora para hacérselo saber.

En el 2007 —cuando esta agrupación recién asomaba cabeza con sus carteles contra TN, post conflicto agrario—la agrupación creada por Máximo Kirchner publicó una solicitada en medio de una fuerte interna política. Rumores de la renuncia de Peralta se replicaron en dos medios nacionales. Fue gesto suficiente para que los santacruceños se dieran cuenta que no existía tal posibilidad, y que todo se trataba de una campaña sucia gestionada desde Buenos Aires.

En julio de ese año, Peralta gestionó algunas reuniones con sectores sindicales petroleros cerrando acuerdos que dejó entusiasmado y esperanzado a ese bastardeado gremio. Lo cierto es que esa alianza no gustó nada al gobierno nacional, ya que dejaba al “digitador” de esa área, Julio De Vido, fuera de escena y ese habría sido el puntapié inicial de la ruptura de las relaciones entre Néstor y Peralta.

Según indicó el sitio OPI Santa Cruz, Peralta también mantuvo una larga reunión con los intendentes de la provincia, donde el gobernador les puso en claro que si no había unión y una estrategia en común, todas las municipalidades “sufrirían las consecuencias”. Posteriormente les pidió trabajar juntos advirtiéndoles que si no, “vendrían por ellos”.

La solicitada de La Cámpora, por ese entonces y sorpresivamente, eligió apoyar al gobernador:

“Desde La Cámpora hemos venido a sumarnos al proyecto que, desde años no muy lejanos, le han dado a Santa Cruz muchas de sus horas más felices. No es nuestra intención hacer un inventario de los innumerables logros alcanzados en esos tiempos porque muchos —la gran mayoría— están a la vista, cualquiera sea la dirección a la que dirijamos la mirada: casas, escuelas, hospitales, calles, espacios para la comunidad, para la recreación, para la cultura, para el deporte, no hace falta tampoco que llamemos la atención sobre lo qué ha ocurrido en la principal ciudad de nuestra provincia, gestionada por otro color político.

No es bloqueando sesiones de la cámara de Diputados la manera que Santa Cruz lograra cumplir los sueños que desde el 2003 se potenciaran con la llegada del compañero Néstor Kirchner a la conducción del país.

La concreción de esos objetivos solo podrán llevarse adelante con trabajo, tesón y poniendo a prueba nuestra capacidad para superar los problemas genuinos que la realidad demande y también los problemas creados y fogoneados por cierta dirigencia ‘iluminada’ que todavía cree en ese viejo axioma que tanto dolor trajera a nuestro país de ‘tanto peor, tanto mejor’, encerrándose en microclimas políticos que distan de la necesidad de una sociedad harta de la política del rumor y la critica malintencionada.

Es necesario, y no sólo por el resultado de las pasadas elecciones, seguir mejorando y superándonos. Sabemos compañero Gobernador que con una oposición que sólo provoca ruido para aparecer en los canales de Buenos Aires, se hace muy difícil.

Estamos convencidos, con absoluta humildad, que el compromiso, la solidaridad, el esfuerzo y el bien común por encima del reclamo sectorial son requisitos fundamentales para continuar el camino que reforzó nuestra identidad y nos hizo sentir el orgullo de ser santacruceños.

Somos hijos de esta tierra por nacimiento o por adopción y todos los días la elegimos, ayer, hoy y siempre.

Compañero Gobernador, sabemos que Ud. siente lo mismo y que con esas convicciones asumió el compromiso y el honor de conducir Santa Cruz. Cuente con nosotros.”

Pero cuatro años son una eternidad en la Argentina, a la provincia más rica del país ya no le fue tan fácil superarse, y en La Cámpora no parecen vivir sus años más felices. Llegó el momento de quitar el apoyo al gobernador de la primera provincia que comenzó a sentir más fuertemente la sintonía fina que la presidenta ordenó desde la Casa Rosada.

Luego de que Máximo tuviera una reunión con su agrupación, ayer viernes por la tarde, La Cámpora decidió sacar este sábado otra solicitada, pero esta vez, muy diferente a la del 2007. Irónicamente, en el diario de Lázaro Báez, el comunicado se encuentra en la página anterior de una carta firmada  por el FPV santacruceño apoyándolo incondicionalmente.

Si la de hace cuatro años se tituló “La Cámpora reafirma su compromiso político”. “Hacerse cargo”, es el más cabal ejemplo de que los pibes para la liberación están al completo servicio de la mandataria, y no del proyecto que otrora decían defender y que ahora se salió de cauce.

“Nos incorporamos a la política movilizados por el proyecto que nació aquí en Río Gallegos, cuando muchos de nosotros solo éramos chicos”, comienza la solicitada publicada hoy en la tapa de los diarios oficialistas, la cual hace un repaso de todos los logros alcanzados por el matrimonio K.

“En las elecciones de octubre, apoyamos a Daniel Peralta pese a las diferencias”, pero “una falta de gestión y modificación de un modelo de administración literalmente “evaporado”, hizo que la agrupación dejara de brindarle su apoyo.

Luego, acusan a Peralta de facilitar que se haya “destruido el sistema de salud pública, desquiciado la educación pública, y permitiendo que se someta al conjunto de la sociedad santacruceña a un clima de extorsión y violencia permanente como método para obtener no ya derechos, sino verdaderos privilegios como nunca antes se había visto”, aseguran, en clara referencia a los acuerdos salariales de los distintos gremios en paritarias.

“Decimos que pese a todo apoyamos, militamos y trabajamos para que Daniel Peralta vuelva a ser gobernador de nuestra provincia. La clara pertenencia del candidato de la oposición a los grupos que intentaron destituir al gobierno popular en el año 2008 y posteriormente, desde el parlamento durante los años 2009 y 2010, tratando de impedir la gobernabilidad, no nos dejaban lugar para la duda o la vacilación” afirma el comunicado.

Posteriormente, responsabilizan a la administración provincial, “no sólo a su máxima autoridad, sino también a los sectores gremiales que llevaron las cosas hasta límites inimaginables”.

Sin embargo descartan del conflicto al gobierno nacional, “sin cuyo apoyo, hubiésemos perdido el gobierno de la provincia” y reitera que Peralta y los gremios “son los responsables de la crisis de nuestra provincia y ellos deben proponer las soluciones a los problemas que ellos mismos crearon. Salvo que ellos sean en sí mismos el problema”.

“La Cámpora está dispuesta a colaborar como minoría parlamentaria, y que, en caso de no compartir las propuestas, las acciones o las políticas que se propongan no vamos a obstaculizar el funcionamiento institucional, no haremos lo que le hicieron a nuestro gobierno nacional porque creemos en el sistema democrático”.

Aclararon también que “el gobierno provincial cuenta con el número suficiente de diputados en la Cámara de la provincia para que las políticas que crean convenientes para superar la crisis se puedan llevar adelante” y acotaron que “quizás a algunos les duela nuestra juventud. O tal vez nuestro compromiso. O tal vez las dos cosas juntas, pero vamos a seguir planteando nuestra opinión cuando existan diferencias de cara a la sociedad”, indicaron.

Por último enumera a los ocho camporistas alejados del gobierno provincial, si bien no nombra a Mauricio Gómez Bull vicepresidente primero y tercera figura institucional de la línea sucesoria de poder.

Del total apoyo al alejamiento sistémico. La Cámpora viene demostrando no ser un grupo de soldados del modelo, sino solo de Cristina Kirchner y, eventualmente, de la figura de su extinto esposo, donde la autocrítica no existe y el “hacerse cargo” significa “hacete cargo”.

Eliana Toro
Twitter: @toroeliana