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El argentino que más se ha destacado por su lucha contra la liberalización de las drogas es, sin duda, Claudio Izaguirre presidente de la Asociación Antidrogas de la República Argentina. Largamente podría hablar en primera persona sobre la ayuda que este brinda a adictos a las drogas y sus familiares, siempre de manera gratuita y sin fines de lucro.
Sin embargo, esta columna no es para ensalzarlo —tengo mis diferencias con él, pero eso no evita que sea uno de mis mejores amigos— sino para advertir sobre una extraña movida que ha comenzado a darse a través de la red social de Facebook para defenestrarlo.
Hace tiempo venimos observando un muro que ha sido creado exclusivamente para hablar mal de él al que titularon “No a Claudio Izaguirre”, el cual agrupó a alrededor de 2.500 adeptos. En este espacio, el titular de la Asociación Antidrogas no tiene empacho en responder sin tapujos ni medias tintas con su socarrona ironía a los diversos ataques.
No es el único ataque: otro de los lugares más visitados por los enemigos del activista antidrogas es un muro denominado “No legalizo la marihuana ni otras drogas”. En este espacio de discusión abierto por nuestros vecinos de la República Oriental del Uruguay es visitado por Sebastián Basalo director de la revista promotora del consumo de drogas THC que bajo el seudónimo de “Flaco Buendia” intenta molestar a Izaguirre.
Otro personaje saliente que golpea furiosamente contra la imagen del presidente de la Asociación Antidrogas de la República Argentina es nada menos que el Dr. Luis Osler, abogado de la revista THC, asesor de la mesa K para la liberalización de drogas, asesor de Victoria Donda y Ricardo Gil Lavedra en el Congreso Nacional para idéntico fin y defensor entre otros del narcotraficante Marco Antonio Estrada González de nacionalidad peruana, originario del grupo terrorista Sendero Luminoso y responsable de la llegada a la Argentina de la letal droga conocida como paco.
La virulencia de los entredichos no solo demuestra lo antagónico de los grupos que discuten, sino en marcado encono que desata la imagen pública de Claudio Izaguirre, su defensa de la actual ley 23.737 y su actitud beligerante contra los promotores del consumo de drogas.
No hace mencionar que existe vasta cantidad de informes científicos que muestran claramente los daños que producen las drogas. Incluso muchos de ellos reflejan el detrimento mental que provoca el consumo de marihuana.
Christian Sanz
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