Tienen el mismo apellido pero son dos caras distintas de una misma moneda: la actual tragedia venezolana.

El General Vladimir Padrino López es Ministro de Defensa, titular de las criminales Fuerzas Armadas Nacionales Bolivarianas y una suerte de co-presidente ante la debacle casi total del primer mandatario Nicolás Maduro.

Por su parte, Leopoldo López, máximo referente de uno de los más importantes partidos de la Mesa de Unidad Democrática, es un mártir que lleva tres años y medio preso injustamente en un penal militar cercano a Caracas.

El alto oficial tiene a cargo la planificación para el mantenimiento del orden interno del país. Sus sangrientas acciones las reporta directamente al Presidente de la República.

Veamos apenas quince diferencias entre los dos López.

1) Padrino llegó a decirle esta semana a sus tropas: “No quiero ver un guardia nacional más cometiendo una atrocidad en la calle”. El pronunciamiento llegó después que sus subordinados asesinaran a más de ochenta compatriotas. Sus palabras son un reconocimiento de que dirige a una fuerza de fratricidas que termina con la vida de sus propios hermanos al reprimir sin piedad manifestaciones pacíficas con bombas lacrimógenas, perdigones y “metras”.

Mientras tanto, Leopoldo sigue aconsejando desde Ramo Verde a los suyos para que no concurran a las marchas con elementos que puedan sembrar la violencia. Por el contrario, los miembros de Voluntad Popular sólo van munidos de máscaras antigases y escudos para evitar ser ultimados o asfixiados.

2) Bajo el mando de Vladimir, Venezuela en lugar de combatir con todas sus fuerzas a los traficantes de drogas terminó por convertirse en un narcoestado que llegó al colmo de utilizar los hangares presidenciales para que los familiares del propio presidente Nicolás Maduro “exportaran” en aviones toneladas de cocaína con destino a los Estados Unidos.

Como contrapartida, Leopoldo fue uno de los primeros en advertir que el Cartel de los Soles (insignias que llevan los generales caribeños) es una organización criminal manejada por los más altos mandos de las Fuerzas Armadas Bolivarianas.

3) En una formación militar, ante el ex presidente nacido en Barinas, Padrino López señaló: “Se hacen presentes en la avenida Monumental de Los Próceres 10.890 patriotas, bolivarianos, socialistas, antiimperialistas, revolucionarios, adiestrados y equipados para asumir el sagrado deber de la defensa de la Nación”.

Leopoldo consideró que ese y otros tantos discursos similares donde Padrino dijo que sólo existe el camino de Chávez violaron el artículo 328 de la Constitución que declara a la Fuerza Armada Nacional como una institución al servicio de la nación y no de una parcialidad política determinada.

4) Padrino López tolera lo intolerable y permite la presencia de paramilitares oficialistas, llamados “colectivos”, que portan armas, disparan y han asesinado a decenas de opositores. Miraflores ha perdido el monopolio de la fuerza en manos del Estado ya que auspicia abiertamente a un grupo de “tonton macoutes” del Siglo XXI quienes aterran a los ciudadanos.

Leopoldo denunció dentro y fuera de su país que la impunidad en los tribunales bolivarianos alcanza al 98 ó 99 por ciento de los casos. Una cifra casi imposible de registrar en un país que se rija por criterios democráticos.

5) Padrino se ha mostrado completamente incapaz de frenar el contrabando fronterizo ya que sus tropas se han transformado en los nuevos “capos” de este fenómeno. Leopoldo aboga por la reapertura de las fronteras, especialmente con Colombia, para que retorne la normalidad a esas regiones y se retome la senda del comercio legal.

6) Vladimir miente descaradamente al asegurar que sus efectivos no utilizan armas de fuego para reprimir las protestas.

Sin embargo, cientos de videos tomados por vecinos y manifestantes muestran todo lo contrario. Los criminales a sueldo portan fusiles y pistolas para disolver concentraciones y perseguir a quienes intenten elevar su voz contra la dictadura de Maduro.

Desde su celda, Leopoldo pide que se hagan grabaciones con las víctimas y se pruebe que son los propios soldados venezolanos quienes laceran y asesinan a una población inerme.

7) Padrino López llevó sus delirantes creencias hasta el paroxismo al establecer que es legal procesar y juzgar a civiles en tribunales militares.

Leopoldo contestó que es abiertamente ilícito aplicar legislación castrense a ciudadanos comunes. El caso no resiste el más mínimo análisis

8) Padrino López defiende con cinismo la ilegal convocatoria a Asamblea Constituyente que hace desaparecer el voto universal y directo, consagrando un régimen indirecto y perverso propio de los países comunistas donde sólo pueden ejercer sus “derechos” los que estén alineados con la ideología oficial. Vladimir extorsiona a la población asegurando que si no hay nueva Carta Magna sobrevendría una guerra civil.

Leopoldo está, una vez más, en la vereda de enfrente y llama a boicotear un supuesto proceso electoral tramposo que sólo busca eternizar en el poder al oficialista PSUV, tal como ocurre en China, Cuba, Vietnam o Corea del Norte.

9) Vladimir lleva adelante purgas internas periódicas y sistemáticas para evitar que su propia tropa proteste contra las masacres que los uniformados están practicando contra su propia gente. Cada semana, encarcela a decenas de oficiales y suboficiales que ya no quieren ser partes de una carnicería generalizada. En las antípodas, Leopoldo muestra que la propia Constitución Nacional le indica a los subalternos desconocer órdenes ilegales. La ruptura de la cadena de mandos es una realidad que tardará poco en materializarse de manera estructural.

10) En lugar de mantener a los uniformados al margen de la política interna, como ocurre en cualquier país medianamente normal del mundo, Vladimir rompe con todos los protocolos establecidos por las naciones democráticas y al referirse a Hugo Chávez señala: “Fue un gigante que se convirtió en un líder nacional, regional y mundial”. Como si todo esto fuera poco, se encarga de desobedecer a diario y de insultar a los miembros de la Asamblea Nacional electos por el pueblo en diciembre de 2015.

Mientras tanto, Leopoldo promete que un futuro gobierno no chavista va a devolverle a las Fuerzas Armadas su perdido profesionalismo.

11) En un país donde más de las dos terceras partes de la población padece hambre, Padrino López se encarga de viajar a Rusia para adquirir sofisticados y costosos equipos antimotines para frenar el descontento callejero.

Leopoldo le exigió a España y otras potencias europeas que dejen de venderle armas al régimen chavista ya que las mismas no se utilizan para la defensa de ataques externos sino para acribillar al propio pueblo venezolano.

12) Los propios familiares de Padrino López emitieron una serie de comunicados donde aseguran que el General “es una vergüenza para el núcleo familiar”. Sus primos Minerva y Ernesto Padrino publicaron en Facebook su más completo repudio al desempeño del titular de las FANB.

Por el contrario, toda la familia López Mendoza acompaña a Leopoldo en su cruzada para cambiar un país que ha enloquecido casi por completo.

13) Los artistas venezolanos más reconocidos, como el cantante Miguel Ignacio Mendoza, “Nacho”, han tildado a Padrino López de “traidor, abusador, lacayo y un vendido".

Mientras tanto, no se cansan de exigir la liberación de López Mendoza artistas de la talla de Alejandro Sanz, Ricardo Montaner, los integrantes de Maná, Sting y el actor Jared Leto.

14) Padrino López atemoriza a la población al blandir el llamado Plan Estratégico Zamora que suspendería todas las garantías constitucionales ante un supuesto intento de invasión por parte de tropas extranjeras.

López Mendoza denunció que ante el desborde de las protestas sociales la solución del chavismo esconde una receta cubana: más represión y menos derechos para el común de la población.

15) Vladimir y sus generales manejan todos los rubros de asistencia alimenticia de la población. Su sistema ha sido tan “eficiente” que actualmente más del diez por ciento de los niños venezolanos presentan importantes grados de desnutrición, lo que los convertirá en ciudadanos de cuarta categoría cuando crezcan, ya que difícilmente podrán desarrollar sus capacidades intelectuales.

Leopoldo exigió detener el mecanismo por el cual los generales bolivarianos manejan de manera poco transparente cada rubro de las limosnas que el chavismo entrega a través de las bolsas CLAPS.

Resumiendo, Vladimir Padrino López no es más que una pieza de ajedrez que mueven a control remoto desde La Habana para continuar los Castro manejando como titiriteros al régimen de Caracas. Este siniestro personaje, que llegó a decir que en Venezuela hay “exceso de democracia”, más temprano que tarde tendrá que rendir cuentas en su propio país y en el exterior por sus crímenes de lesa humanidad.

Por el contrario, Leopoldo López Mendoza es el Nelson Mandela del Siglo XXI y muy probablemente tenga pronto el mismo rol que cumplió el líder sudafricano: está destinado a gobernar y pacificar definitivamente a su propio país.