Acceder al feed de los comentarios de este artículo
Recientemente, y luego de un par de años, volvió a ponerse de moda FaceApp, la aplicación de filtros que logró viralizar su filtro «edad» en las redes sociales, donde varios famosos empezaron a compartir cómo se verían con unos cuantos años más encima.
Dejando de lado las teorías conspiranoicas y luego de la vorágine, empezaron muchos a plantearse sobre cómo trata FaceApp los datos de los usuarios, y si son lícitas o no sus prácticas.
Al principio se puso sobre la mesa el supuesto problema de que FaceApp envía datos a Estados Unidos y Rusia más allá de que pueden utilizar tus fotografías para entrenar sus propios algoritmos de inteligencia artifical.
Lamentablemente, lo cierto es que si se revisan mínimamente los términos y condiciones de usuario y se comparan con los de las aplicaciones, los párrafos sobre cómo podemos llegar a renunciar a nuestra privacidad sin ser conscientes de ello son casi calcados.
Efectivamente, FaceApp tiene potestad (se la dan los propios usuarios al aceptar los términos) para enviar datos fuera del país, y usarlos para mejorar sus servicios
Tal y como se ve en la política de privacidad de FaceApp, los datos son almacenados en Estados Unidos, que es donde suele operar la compañía, y en todo aquel país donde esta pueda tener instalaciones. Lo mismo que sucede con Instagram, por ejemplo.
También generó preocupación sobre qué puede hacer y qué no puede hacer FaceApp con las fotografías de los usuarios. La respuesta es: FaceApp no hace nada que no hagan otras aplicaciones populares, en este caso, usar las fotografías para mejorar sus servicios y para posibles fines comerciales.
Justin Reynolds, de Activision, compartió en su perfil de Twitter uno de los puntos más polémicos de Faceapp: el párrafo en el que se especifica que, al usar la app, se proporciona una licencia perpetua, irrevocable, no exclusiva, mundial y libre de royalties que podrán utilizar para distribuir tus datos.
he says on Twitter pic.twitter.com/orOzZgjm0a
— Jake Feaver (@JakeFeaver) July 17, 2019
Pareciera tener sentido preocuparse ante tal aviso pero, otra vez, si miramos en los términos de Instagram o Twitter, nos encontramos con un párrafo muy similar.
«Cuando se usa una app, tus datos pasan a ser de la app, y la compañía puede usarlos a su voluntad, sin que tengas derecho alguno a una compensación. De hecho, en el caso de Instagram, afirman recoger datos extra cuando activas el reconocimiento facial. Esta práctica es legal, se recoge en la inmensa mayoría de términos y condiciones de uso, y no es nada nuevo. Simplemente, con FaceApp, ha vuelto a ponerse sobre la mesa», señala GenBeta.
En cuanto al resto de términos de FaceApp, nada nuevo: explican que recogen información del usuario, que sus servidores la graban de forma automática y que la utilizan para crear y mejorar sus contenidos y servicios. También, y al igual que otras apps, comparten tu información con terceros, afirmando que no venden tus datos sin tu consentimiento.
Hasta ahora, el tratamiento de los propios personales sigue siendo prácticamente el mismo: dato que se sube, dato que pertenece a la compañía propietaria de la app o servicio al que se haya subido.
No tengo en claro, se refiere solo a las fotos que se sacar con la app o incluyen alguna otra información ?
En mi opinión, con este asunto de la vunerabilidad de la privacidad de los usuarios, solo buscan desviar la atención acerca de las verdaderas intenciones de esta APP. La presente nota deja en claro que todas las APP funcionan más o menos igual respecto del tratamiento que le dan a la info de los usuarios. En mi opinión, esta aplicación está destinada a realizar acción psicológica solapada sobre los usuarios, para instalar en el incosciente las cuestiones de género. Si solo se tratara de ver como se vería una persona joven dentro de 50 años, entonces, para qué introducir, por ejemplo, filtros trans?!.. Evidentemente, no alcanza con la feroz campaña mediática y la agenda de género de toda la corporación política y educativa. No alcanza con la promoción de las drogas, el alcoholismo, la promiscuidad y la hipersexsualización de la niñez. Evidentemente, no les resulta tan fácil desnaturalizar la humanidad. Están sembrando caos mental por doquier. Esto es peor que las guerras porque así no se pueden contar los muertos. Sí el problema es la superpoblación mundial y el excedente de producción en razón de la tecnología, el desempleo masivo, realmente se vislumbra a futuro una sociedad mentalmente desquiciada con estos cambios de paradigma.
con este tipo de software se generan rostros de las "victimas" de los atentados de la cia, como el 911 por ej