En el conflicto entre el gobierno bonaerense y los cinco sindicatos docentes que integran del Frente Gremial, algunos no están contando la verdad.
    En el marco de una larga negociación que comenzó antes del receso de invierno y seis huelgas que siguen afectando a millones de alumnos, algunas voces oficiales prefieren opinar que, en el caso del magisterio bonaerense, "algunos dirigentes no son respetados ni seguidos por sus propias bases, que desconocen los acuerdos que firman y los presionan mayoritariamente a que hagan paros".
    Respecto al otro "bando" en cuestión, el del gobierno de Daniel Scioli, voceros sindicales ironizan acerca de que "los niveles superiores de mando desconocen y desautorizan resoluciones de sus propios funcionarios en la comisión técnica salarial", en relación a la propuesta que surgió de las partes de alcanzar un salario inicial de 1.450 pesos para el maestro que se inicia.
    Sobre esto último, cuando todo hacía creer que esta semana se sellaba el acuerdo y se normalizaba la actividad educativa en la Provincia, el director General de Educación, Mario Oporto, salió a aclarar muy tajante el miércoles pasado que "la propuesta partió de los propios docentes" y que el gobierno bonaerense "no podía aprobar algo que no había hecho", pero sí estaba entre sus facultades "hacer una contraoferta".
    Luego de esas declaraciones y la noticia de los docentes de retomar las medidas con una huelga de 48 horas el jueves y viernes últimos, las negociaciones volvieron a un punto muerto y la desazón sobre el incierto futuro del conflicto invadió a las familias bonaerenses. Respecto del fracaso de las negociaciones paritarias, Oporto explicó que ofrecieron a los docentes "llevar el inicial a 1.450 pesos que era lo que querían", y agregó que "lo que pasa es que los dirigentes de gremios docentes no pueden explicarle a sus afiliados que toda la administración va a cobrar el aumento y ellos no y, además, se le van a descontar los días de paro".
    El titular de Educación manifestó no saber "qué quieren" los docentes de la provincia.
    "Estaban pidiendo un sueldo inicial de 1.450 pesos, les hicimos una propuesta de un sueldo inicial de ese monto; pedían que el básico aumentara un 17 por ciento, les hicimos una propuesta de aumento del 17,5 por ciento, ninguna suma de las que ofrecemos evita a los jubilados, y todas son remunerativas", declaró.
    Lejos del "estupor" de Oporto, los dirigentes del magisterio bonaerense dieron sus explicaciones y aparentemente el nudo estaría en que la suba se alcanzaría con "blanquear" los 110 pesos que cobran actualmente fuera del básico y no de dinero fresco.
    La titular de la numerosa Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini, interpretó que "lamentablemente estábamos con una alta expectativa a raíz de haber encontrado a solicitud del gobierno esta tregua donde se generaron condiciones para rediscutir y reformular la propuesta y donde se analizó y se arribó a una reformulación integral que nosotros pusimos a consideración y que fue aceptada".
    "Pero al momento de refrendar en paritaria, la Provincia presentó otra que no había sido trabajada en la comisión técnica", agregó Petrocini.
    Para el líder del ceterista SUTEBA, Roberto Baradel, "el gobierno desconoció el acuerdo e hizo una nueva propuesta que no reconoce lo que se habló, intervinieron funcionarios de Economía que no tienen idea cómo se conforma el salario docente", advirtió respecto el posible desacuerdo entre funcionarios de Educación y de Hacienda de la Provincia sobre la mejora.
    Baradel explicó que "a 1450 pesos llegan los dos (propuestas)", pero aclaró que "la de la comisión técnica respeta la escala salarial docente y en la del gobierno, el maestro que recién se inicia tendría más aumento que uno que ya tiene años de antigüedad y eso no se puede permitir. Hay que respeta la antigüedad de docentes, a los maestros rurales y a los directores de escuelas", aseveró.
    El secretario General de la Unión Docentes Argentinos (UDA) bonaerense, Alfredo Conde, también integrante del Frente Gremial, aportó su visión del conflicto.
    "No existe un criterio lógico en la nueva propuesta que cambia los términos acordados la semana pasada, lo que lleva implícito un desprecio por la voluntad de los docentes bonaerenses que, aún contra sus intereses económicos y haciendo un gran sacrificio, votaron aceptar dicha oferta salarial", explicó.
    Continuó Conde: "Es incomprensible lo que dice el ministro (Oporto), no señala que los gremios no tomamos medidas la semana pasada y que se llegó a una propuesta el viernes con el y tras la consulta con los docentes nos dieron el aval".
    Empero dijo "luego fuimos a la paritaria y nos encontramos con otra propuesta".
    Desinteligencias, mentiras verdaderas, estrategias, cambios de rumbos... Lo cierto es que más allá de los días de mínima de clase, que es un derecho de todos los chicos, también es necesario pacificar las aulas bonaerenses con maestros reconocidos y jerarquizados.

Laura Hojman