Napoleón Bonaparte fue el primero en advertir sobre el
peligro amarillo. Los ingleses conquistaron China a través del opio, pero
fueron expulsados. Se quedaron con Hong Kong y también tuvieron que salir de
allí. En Asia hay una amplia gama de amarillos. En la Segunda Guerra Mundial
fue el amarillo de Tokio el que se unió a Alemania, Berlín, e Italia,
Roma. El amarillo siempre ha sido algo más que una luz en el semáforo de
alerta. Las rosas amarillas son fantásticas, una de mis favoritas. El banano es
la fruta amarilla que inunda los mercados más ricos del planeta. El otoño es
una bella estación amarilla. Gauguin y Van Gaugh, se divirtieron creando con el
amarillo. Yellow Submarine. La frase amarillos aprietos también denigra en
buena medida al color. Lo pone en conflicto y en la indefinición. ¿Qué es lo
amarillo del aprieto?
Un color ninguneado que nace de la paleta de la imaginación
indefinida. Es un color que se hace notar, desde luego, en la piel de 1.300
millones de chinos, 127 millones de japoneses, suma y sigue en el Asia, una
parte importante de la población mundial es de color amarillo. El almanaque
mundial 2004, donde cotejo algunos datos, tiene portada amarilla, veo mi
biblioteca, y destaca una edición de Alicia en el país de Las Maravillas en
amarillo, como una luciérnaga, y varios textos más. El Viaje a la Semilla, una
biografía sobre Gabriel García Márquez, de Dasso Saldívar, es un gran manchón
de tinta amarilla que rodea al autor de Cien Años de Soledad, dormitando frente
a su Remington, descalzo, en una mesita infantil, donde la máquina disputa el
espacio de los codos del soñador autor y unas cuartillas dispuestas a dejar la
página en blanco.
Pero el tema es otro, veo en mi correo de Yahoo, una franja
amarilla, es el estado de mi correspondencia, es amarilla la luz de mi pantalla.
El tema lo ha puesto de moda el pasado borgeano, sus amores de última hora, él
que veía todo amarillo, en tinieblas, se enamoró de una libera de 20 años,
llamada Vivían Aguilar y que trabajaba frente a su casa.
Fanny Uveda, su empleada de 30 años, de toda confianza y
conocedora de Borges, el que no aparece en los libros, hizo unas revelaciones
en unas memorias intituladas El Señor Borges, puesta en circulación
recientemente, sobre intimidades amatorias del autor de El Aleph y Ficciones y
un perfil alejado del mundo libresco.
Uveda, de 82 años, quien debió llevar una vida muy borgeano
con el Borges real y su madre, que manejaba los hilos de Georgi, recuerda en El
Señor Borges el poema Al Olvidar un sueño, dedicado a Viviana, y que María
Kodama, su antigua alumna no fue su último amor.
Esta afirmación la corrobora la estudiosa de Borges y amiga,
María Esther Vásquez. Viviana era alta y hermosa, muy especial, recuerda
Fanny, que fue expulsada del apartamento de Borges por María Kodama,
quien se casó con Borges en Paraguay poco antes de morir en Suiza.
Fanny ha puesto el dedo en la llaga con sus memorias y ha
vuelto a relucir el hecho que Borges habría sido llevado a Suiza contra su
voluntad por su viuda y heredera, María Kodama, de origen japonés y que le
acompañó por el mundo en sus conferencias en los últimos años de su vida..
En La Cifra, según Fanny, que Kodama editó dentro de las Obras Completas
de Borges, no incluyó el poema dedicado por Borges a la joven librera.
En el prólogo de La Cifra, 1981, el poeta argentino dice:
María Kodama. Cuántas mañanas, cuántos mares, cuántos jardines del Oriente
y del Occidente, cuánto Virgilio.
No le bastó a María Kodama quedarse con el santo, la seña
y la limosna. El Señor Borges, le dedica un capítulo a ella y subraya una
demoledora frase, que solía decir la madre de Borges, Leonor Acevedo: Esa piel
amarilla va a quedarse con todo.
La acusación más seria de Fanny contra Kodama es que ésta
habría cambiado el testamento de Borges, quien dejaba la mitad de sus
bienes a su fiel empleada.
El Señor Borges habla y recoge los traumas sexuales, las
dificultades borgeanas para relacionarse con las mujeres y se deja entrever que
era virgen. Toda página en blanco lo es.
Rolando Gabrielli