ALLANAMIENTOS Y LA CREACIÓN DE UNA NUEVA CGT
Ayer fue un día complicado para Camioneros, ya que el juez federal Claudio Bonadío ordenó el allanamiento a la obra social de este sindicato.
Bonadío tomó esta decisión por dos motivos fundamentales: primero por la denuncia que hizo la diputada nacional por la provincia de Buenos Aires de Cambiemos, Graciela Ocaña, contra Hugo Moyano y segundo por la petición del juez federal de Córdoba, Alejandro Sánchez Freites.
Según se desprende de la denuncia de Ocaña, existe un fraude en la obra social de Camioneros, ya que en realidad se encuentra desfinanciada con un déficit de 600 millones de pesos, aunque Bonadío tiene su propio número y asegura que la deuda real es de 1.800 millones de pesos, tres veces más que lo mencionado por la diputada.
El pedido de allanamiento que le hizo Freites a Bonadío no es casual, ya que el juez cordobés está al frente de una causa que complica a Moyano por la compra y la posterior venta de cuatro terrenos.
Mediate sus empresas, Moyano compró cuatro terrenos chicos en la provincia de Córdoba por un valor de 300 mil pesos, pero pocas semanas después los vendió por un valor de 6 millones de pesos, por tanto, se presume que el sindicalista infló el precio para blanquear dinero.
Pablo Moyano, anunció que su padre dejará el consejo directivo, tal como había prometido en marzo del 2016, hace dos años exactamente, es dable destacar que Hugo se encuentra bastante desgastado, cada vez pierde más apoyo y, en las últimas semanas, quedó muy mal visto a nivel social.
Mientras tanto, el resto de los miembros se reunirán hoy en el sindicato del gas para comenzar a hablar de una nueva CGT, donde, obviamente, no va a estar Moyano.
En esa misma línea, quienes siempre se mostraron del lado de Moyano, como por ejemplo Juan Carlos Schmid, se encuentran en medio de un problema, ya que no saben de qué lado quedarse, si romper con el resto del sindicalismo o no.
En este momento, tanto Moyano, como camioneros, así como también el sindicalismo, se encuentran en una posición difícil, hoy la Confederación General de Trabajo está casi inexistente y habrá que ver qué pasa con respecto a su nueva reapertura.
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