SEGÚN EXPLICÓ BLOOMBERG.COM
Por lo que se sabe, la crisis que afectó esta semana a la bolsa norteamericana, perjudicó de forma directa a quienes fueran los compradores del bono que había llegado a ser el favorito de Wall Street.
A fines del 2017 el bono había cerrado en 103 centavos de dólar, sin embargo, esta semana cayó bruscamente a 92 centavos de dólar, perdiendo 2.1 puntos porcentuales en los últimos días y 6 puntos en lo que va de este recién comenzado año.
De acuerdo con el índice que elaboró JP Morgan Chase, este bono posee el peor performance de los mercados emergentes.
Según Bloomberg.com, Argentina es un país que recibe golpes por varios lados simultáneamente: los inversionistas norteamericanos comienzan a buscar mercados que presenten menos riesgos, y la moneda nacional (Peso) descendió a un inusitado valor respecto al dólar, cumpliendo un nuevo record histórico, además de un agravante que refiere al temor de que el Banco Central se encuentre accionando bajo la presión del presidente Mauricio Macri.
Conforme se desprende de la nota de Bloomberg.com, esta situación es asazmente alarmante en una economía que precisa continuar colocando "deuda para financiar su déficit fiscal”.
El ministro de Finanzas, Luis Caputo, adelantó que la Argentina requiere una suma de 30 mil millones de dólares de financiamiento, del cual, el 40 por ciento, será pedido prestado al exterior.
Quien fuera un estratega de Quantum Finanzas, Fernando Baer, mencionó que a los clientes del equipo, les recomiendan “vender los bonos a largo plazo y comprar a más corto plazo”.
Álvaro Vicanco, quien fuera el jefe de estrategia de renta fija de América latina del Banco Francés en Nueva York, supo asegurar que se trata de una caída natural en el marco de un mercado volátil.
Vicanco también mencionó que “el bono a 100 años de Argentina es muy atractivo, no solo por su rendimiento, sino también porque el país disfruta de mejoras crediticias (…) pero es demasiado pronto para recomendar una compra. Los inversores esperan más para evaluar cuando se agota la venta”.
Argentina, después de la crisis conocida como “corralito” del año 2001, logró alcanzar un regreso formidable al mercado de los bonos, y más aún, luego de la idea del conocido bono a 100 años.
“Sin embargo, desde diciembre los inversores se encontraron frete a un Banco Central impredecible a cargo de Federico Sturzenegger, cambiando metas de inflación, con la moneda de peor performance mundial y un déficit fiscal por encima del 6%” se puede leer en el artículo mencionado.
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