Según el Índice de Salarios que publicó el Indec este miércoles, los sueldos subieron en promedio un 29,45%, mientras que los salarios del sector estatales apenas se incrementaron en un 9,6%, un porcentaje por debajo de las paritarias del sector público nacional que se acordaron en 24% el año pasado.
Ese número arroja unas cuantas curiosidades que están íntimamente relacionados con los cada vez más sospechosos y contradictorios números oficiales.
En un artículo publicado hoy en El Cronista —con la firma de Juan Cerruti, editor de Economía de ese matutino— se dice que el recorte del 13% a los empleados estatales y jubilados anunciado en 2001 por el entonces presidente, Fernando de la Rúa, parece haber vuelto, o bien se deslizó algún error en las estadísticas que proveyó ayer el Indec.
Y es que descontada la inflación, que según el índice combinado de siete provincias o el IPC de la consultora Buenos Aires City se ubican entre 21% y 23%, el poder adquisitivo de los trabajadores del sector público se redujo 13% a lo largo del año pasado (9% de incremento nominal menos 22% de aumento de precios).
“La cifra es similar al recorte de salarios anunciado por el gobierno de la Alianza, que era 13% en términos nominales pero con inflación de casi cero”, aclara Cerruti.
Desde ya resulta curioso el 9% de incremento salarial que el Indec estimó para los estatales, siendo que en el sector privado el incremento informado por el organismo en 2011 fue de 35,7%.
Lo llamativo, es que según los datos oficiales de la seguridad social, la masa salarial del sector público nacional aumentó en promedio 30% interanual en 2011. Y sin bien el dato incluye adicionales e incorporaciones a la planta del Estado, no explica la disparidad con el 9% del Indec.
Este domingo se cumplen cinco años desde la intervención de Guillermo Moreno al Indec y el desguace de un organismo que solía tener un envidiable rigor metodológico. Hoy, pocos sindicatos se basan en él para acordar salarios y en cada anuncio se desprenden curiosidades como la referida.
Se trata de elementos que Cristina suele utilizar para refrendar datos de un país en supuesto crecimiento constante y lejos de la terrible crisis de 2001.
Equipo de Economía de Tribuna de Periodistas