La presidenta Cristina Kirchner concretó ayer la convocatoria formal a la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso, que tendrá lugar hoy durante la Asamblea Legislativa. A través del Decreto 275/2012, publicado hoy en el Boletín Oficial, la jefa de Estado fijó la apertura de sesiones para mañana a las 11:00.
El decreto lleva la firma de la Presidenta y del jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina. Comenzará así el 130º período de sesiones ordinarias del Congreso, donde en el marco de la Asamblea Legislativa la Presidenta hará un balance de su gestión y brindará pautas sobre las políticas públicas que impulsará este año.
Será la quinta vez que la Presidenta, quien asumió el 10 de diciembre su segundo mandato al frente del Poder Ejecutivo, abra el período de sesiones ordinarias del Congreso. En sectores políticos y del empresariado se aguardaban con expectativa las definiciones de la jefa de Estado sobre el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas, al cumplirse este año tres décadas del conflicto bélico en el Atlántico Sur.
También se esperan definiciones de Cristina Kirchner sobre la política energética, en momentos en que distintos medios de prensa dieron cuenta de versiones sobre una mayor intervención del Gobierno sobre la petrolera YPF. Ayer, en una agitada y bajista rueda de negocios, las acciones de YPF se desplomaron en la Bolsa porteña cuando inversores y especuladores desarmaron posiciones compradas en los dorados días de enero último.
A raíz de los continuos rumores circulantes sobre una posible estatización de esa compañía petrolera propiedad del grupo español Repsol, los papeles de YPF cayeron 7,54 por ciento en el recinto de 25 de Mayo y Sarmiento. La caída en la cotización se constituyó en otro peldaño dentro de la escalera bajista que esta empresa viene registrando desde los roces generados entre sus ejecutivos y las autoridades del Gobierno argentino.
El último encontronazo se registró durante la pasada semana cuando el Director representante del Estado Nacional (acciones clase "A"), Roberto Baratta, ingresó en la sala de reuniones del Directorio de YPF acompañado de varias autoridades del Gobierno argentino.
Ese ingreso fue negado por el Presidente de la empresa a los acompañantes gubernamentales; pero no al Director del Estado y al Síndico Suplente, Gustavo Mazzoni, quienes decidieron retirarse formulando un planteo de nulidad respecto de la reunión del Directorio de YPF.
Asimismo, la Presidenta podría referirse mañana a los alcances de la intervención dictada sobre las ex líneas Sarmiento y Mitre, que opera la empresa TBA, luego del accidente ferroviario de la estación Once, que dejó 51 muertos y más de 700 heridos. En las últimas semanas cobró relevancia también en la agenda oficial la política del Gobierno hacia la minería, luego de que se registraran conflictos sociales en Catamarca y La Rioja por rechazos de distintos sectores a emprendimientos en ese rubro.
Luego de los conflictos, las provincias mineras del país se reunieron en el marco de una Organización Federal, a partir de la cual anunciaron que buscarán reformular su relación con el sector. No se descarta que la jefa de Estado haga referencia al tema, así como a la quita de subsidios a los servicios públicos que forman parte de lo que la mandataria denomina una "etapa de sintonía fina". En recientes discursos presidenciales también tuvo lugar su relación con los gremios, luego de que el titular de la CGT, Hugo Moyano, lanzara duras críticas a aspectos de su gestión.