Desde que ocurrió el lamentable episodio en República de
Cromagnon, que terminó con la vida de casi 200 personas, se busca por todos los
medios de encontrar un culpable.
Hasta ahora, aparentemente para la Ley, el único culpable es
Omar Chaban. Para los medios de prensa, que nada conocen sobre el tema, se culpa
a funcionarios, posibles socios de Chaban, etc.; pero nadie ha pensado en otro
gran culpable, "la sociedad".
¿No son acaso también culpables los que concurrieron a ese
lugar?. ¿No son también culpable quienes llevaron a sus hijos menores y los
dejaron en custodia en una guardería improvisada en un baño?. ¿No son también
culpables quienes a pesar de las reiteradas advertencias siguieron prendiendo
bengalas y otras clases de pirotecnia?, ¿ No es culpable la falta de cultura?.
Estos lugares es bien sabido, son un verdadero antro de
perdición, donde se hace continuamente apología del crimen, de la locura, de
la muerte, donde se consume grandes cantidades de drogas y alcohol, ante la
impasibilidad de las autoridades. ¿Quienes son entonces los verdaderos
culpables?. Creo que todos lo somos, la sociedad en general, los políticos, los
padres que permitimos el comportamiento rebelde de nuestros hijos, las
autoridades que saben del grado de corrupción que existe y asisten pasivamente
a ello, de la sociedad en general.
¿Que se debería hacer?.
Creo que la responsabilidad le corresponde a senadores,
diputados, concejales, políticos, dirigentes en general, autoridades que
conocen perfectamente el grado de corrupción que existe; ¿pero esto no
terminaría con el negocio de muchos?.
La falta de autocrítica de los argentinos, esta sociedad
enferma y de la que todos somos cómplices, es donde se debería buscar la
solución, pero solo buscamos un culpable, un chivo expiatorio y encontramos a
Chaban.
Las autoridades se dedicarán por un tiempo a efectuar
controles, labrar actas de infracción, clausurar locales; los padres recorrerán
locales efectuando tareas que no conocen ni les corresponde, como en el caso de
Blumberg, pero dentro de poco tiempo todo se olvidará y la suerte corrida en
República de Cromagnon se volverá a repetir.
Carlos Alberto Bralo
carlosbralo@infovia.com.ar