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Ficha técnica:
Título para Latinoamérica: El club de los desahuciados / El club de compradores de Dallas.
Título original: Dallas Buyers Club.
Dirección: Jean-Marc Vallée - Guión: Melisa Wallack, Craig Borten.
Género: Drama, Biográfico – Calificación: Apta para mayores 16 años.
Reparto: Matthew McConaughey, Jennifer Garner, Jared Leto, Dallas Roberts, Steve Zahn, Kevin Rankin, Griffin Dunne, Juliet Reeves, Michael O'Neill.
Producción: Robbie Brenner, Rachel Winter.
Montaje: Martin Pensa, Jean-Marc Vallée.
Productora: Focus Features / Truth Entertainment / Voltage Pictures / R² Films.
Distribuidora: Vértigo Films.
Fotografía: Yves Bélanger – Música: Varios.
País: EE.UU. – Año: 2013 – Duración: 117 min. Estreno Argentina: 27-02-14.
Un film para reflexionar sobre el rol de
Matthew McConaughey (Ron Woodroof), es un actor versátil. Su anterior trabajo de partenaire de Leonardo DiCaprio en El lobo de Wall Street (ver Tribuna:periodicotribuna.com.ar/15006-el-lobo-de-wall-street.htm),nos regaló las delicias de los parlamentos más jugados. El aquí y ahora, Dallas Buyers Club (2013), se enfrenta a nuevos horizontes de dramaturgia. Como adalid de causas perdidas, como nuevo paradigma en la cuestión del medicamento y el acceso de la población.
El guión de Melisa Wallack y Craig Borten, remiten a los hechos reales de la vida de Ron Woodroof: un texano cowboy, amante de los rodeos y los vicios al por mayor. De profesión electricista, pasaba sus días entre sustancias tóxicas, mujeres fáciles y desenfreno. Pero sus días dará un vuelco copernicano, al enterarse en 1986 su diagnóstico de SIDA (AIDS).
La Dra. Eve (Jennifer Garner) – su médico de cabecera- le pronosticó 30 días de sobrevivencia. Un Ron desesperado, muta de infectado a activista por derechos de los pacientes a elegir el tratamiento deseado. Toda una aventura.
En dicha empresa: “El club de compradores de Dallas” (funda un plan de medicina comunitaria, donde compra y vende medicamentos contra el SIDA), encuentra en el travesti Rayon (Jared Leto), su fiel ladero y el apoyo ante las adversidades. El rol de ciudadano doblemente discriminado (homosexual /travesti y portador de HIV), le valió también la estatuilla del Óscar (2014) por su labor de reparto.
La visión cortoplacista de la historia, nos lleva a trabajar sobre los sinsabores de una enfermedad enciernes y las secuelas sociales. El SIDA recorre el cine norteamericano como un espectro. Un malestar manifiesto en la cultura y el rol de las resistencias. Una resistencia que clama por el cambio en políticas de canales de distribución del medicamento. Woodroof cuestiona abiertamente a lo establecido: la sinergia FDA (Food and Drug Administration /Agencia de Administración de Alimentos y Medicamentos) y poder económicos de laboratorios. Industrias Avonex es su escollo, por ser el laboratorio hegemónico en la distribución del fármaco AZT (Retrovir, zidovudina).
El director Jean-Marc Vallée, introduce y condensa épica y dramaturgia. Primera apertura de plano es de lenguaje catafórico: la bandera americana flameando; un plano sobre plano donde se observa un cowboy teniendo sexo duro con dos señoritas, mientras observa la escena de un rodeo convencional. A contra plano - la gran noticia - la enfermedad del popular actor americano Rock Hudson: SIDA (1984).
Para reconstruir el drama, un repertorio de dispositivos de lenguaje se utilizan en el guión: “imágenes cristalizadas”: El almanaque. Es el mudo testigo del paso inexorable del tiempo. El uso del teléfono celular tipo “ladrillo” (recibe buenas y malas nuevas); el uso de la “autoridad científica”, cuando se muestra en plano detalle la revista científica The Lancet. Ron le muestra a su joven doctora Eve, artículos de divulgación sobre su enfermedad. Una mención especial para el papel del profesional “contra cultura” Dr. Vass (Griffin Dunne). Como encargado de apertura de caminos al activismo de Woodroof. Puso en discusión otras alternativas farmacológicas a la establecida oficialmente: DDC (zalcitabina - antiviral símil AZT, pero con menor toxicidad); Péptido T. y fluconazol (antibiótico fungicida). Y sí, ese “guapo, con estilo de texano ignorante y pobre” de Ron, le traerá algunos dolores de cabeza a la gigantesca corporación lobbista.
En el guión, “la construcción del villano” no se corporiza en un sujeto. Sí, en los poderes supragubernamentales que infestan a la sociedad toda. Los villanos se reparten cartel entre:
Aportan a la construcción de la crítica, el pensamiento vivo de los protagonistas. El discurso de los actores, para la confrontación de los hechos y la conceptualización. Jennifer Garner: “nadie habria podido interpretar a Ron de esa forma” / McConaughey: “conseguí su diario (el de Ron) a través de su familia. Supe como trataba el mundo. Cómo se relacionaba con la otra gente, y entendí cómo se veía a sí mismo”. La lógica de Woodroof resume toda su existencia: "tengo una vida, quiero que signifique algo….”
Al concluir, la narración es anafórica. Retoma la primera escena y aporta el clímax de una historia que significó, la esperanza de millones y el jaque a las corporaciones y factores de poder en los Estados de la Unión.
Matthew McConaughey: de antihéroe a activista por derechos de los pacientes a elegir el tratamiento de su enfermedad. Premio Óscar mejor actor protagónico.
Gustavo Contarelli
Puntaje del film: 5 Tribunas
Puntaje actor protagónico: Matthew McConaughey (Ron Woodroof), 5 Tribunas ¡Imponente!
Referencias:
5 Tribunas: excelente/imperdible
4 Tribunas: muy buena
3 Tribunas: correcta - buena
2 Tribunas: regular
1 Tribuna: mala/pésima