Ficha Técnica:

Título para Latinoamérica: La Patota.

Título original: La Patota.

Dirección: Santiago Mitre - Guión: Santiago Mitre y Mariano Llinás, sobre el guión original de Eduardo Borrás - Asistente de Dirección: Federico D'Auría.

Género: Drama - Apta para mayores de 16 años.

Reparto: Dolores Fonzi (Paulina), Esteban Lamothe (Alberto), Cristian Salguero (Ciro), Oscar Martínez (Fernando), Walter Casco (Mellizo), Verónica Llinás (Victoria), Andrea Quattrocchi (Vivi), Ezequiel Díaz (Rudy).

Producción: Ignacio Viale, Santiago Mitre, Axel Kuschevatzky, Daniel Rútolo.

Montaje: Delfina Castagnino - Sonido: Santiago Fumagalli - Dirección de Arte: Micaela Saiegh - Fotografía: Gustavo Biazzi - Música: Nicolás Varchawski - Vestuario: Carolina Sosa Loyola.

Distribuidora: Energía Entusiasta - País: Argentina, Brasil, Francia.

Año: 2015 - Duración: 102 min. - Estreno Argentina: 18/06/2015.

El film del director Santiago Mitre (El Estudiante, 2011), es una remake (nueva versión) de La Patota (1960, Daniel Tinayre). El siempre difícil arte de volver a representar un clásico, y más en nuestro medio (donde los archivos fílmicos - y su buena conservación - hacen mutis por el foro), es una tarea titánica y pocas veces exitosa. Esta no es la excepción de la norma.

Paulina (Dolores Fonzi) es una novel abogada con un futuro promisorio en Buenos Aires. No obstante, elige volver a su ciudad natal en el interior. Su padre Fernando (Oscar Martínez), es un respetado juez. Contrariando a su progenitor, decide dar clases como maestra en un pueblo rural. Su mundo bucólico de fantasía culmina, cuando tras un episodio de violencia de género, es abusada sexualmente por una patota de muchachos de extracción social baja.

La maestra arriba al pueblo con un propósito firme: buscar su identidad y realizarse como persona. A poco de transcurrido el metraje, su novio Alberto (Esteban Lamothe), le reprocha varias de sus actitudes. Paulina, tiene dos frentes abiertos de conflicto: con su padre, y con su novio. Los momentos más álgidos del relato, brillan con los parlamentos padre-hija, aunque nunca nada queda claro. Sólo reproches burgueses, y escasa conceptualización.

La historia respeta los contenidos mínimos / lógicos del cine: lo que he dado en llamar “los 15 minutos dorados del cine”, por los cuales se vislumbra la comprensión de los hechos y su similitud con la realidad. Si no hay registros de cohesión en ese tiempo, difícil podrá remontar el contenido del relato. Así, el plan de filmación del realizador de Los posibles (2013), es un rosario de grietas y sinsabores salvados por la claqueta y el corte.

 Las debilidades del guión son manifiestas: la voz over (del protagónico Fonzi) —donde juega con el campo y fuera de campo— no dramatiza, tensiona ni es propiciatoria. No condensa, todo lo contrario hay dispersión en la representación. La escena del reencuentro entre víctima y victimario Ciro (Cristian Salguero), no dramatiza los límites de la razón y la violencia. Termina en destrato al espectador. Otro ejemplo es la pretendida “patota”, que más que pandilla violenta y anómica, asusta menos que el lobo feroz de Caperucita Roja. Curiosamente, cierta crítica, parece haber omitido todas las incongruencias del guión y la narración.

En cuanto el lenguaje cinematográfico, insoportables clisés, aportan más a la confusión nacional, cuando en estos momentos hay demasiada sensibilidad en la cuestión de la violencia de género. El fisic du rol de “los patoteros” (símil a pueblos originarios excluidos, ágrafos, ignorantes, borrachos y malos), no intimidan, como tampoco son objeto de piedad por la platea. El escollo fundante para el cineasta Mitre, es sin duda la ausencia de investigación de campo para conocer los personajes y su función. La historia no es consistente.

Para Dolores Fonzi, su trabajo cumple, sin brillar Su partenaire Oscar Martínez, jerarquiza y redime la historia de esos agujeros negros donde a menudo visita. El trabajo social, el asistencialismo de esta época, es muy diferente a los de 1960. Hoy la tecnología de la información y el acceso al conocimiento —bien utilizados— habrían ayudado a la epopeya del protagónico. La narrativa se agota por falta de ideas.

La Patota de Tinayre, en otro escenario histórico, mediado por talentosos actores (Mirtha Legrand , José Cibrián, Luis Medina Castro, Walter Vidarte, Milagros de la Vega, Ignacio Quirós, Virginia Lago, Alberto Argibay), aportó más y abrió un debate lógico sobre la violencia de género. No así la remake de Mitre, que sólo trajo malestar, por la mediación y puesta en escena de un peligroso actor: la visón de la teoría del “garantismo extremo” en derecho, y el constructivismo-relativista del mundo, más peligroso que <volar en el avión de la pulposa vedette Vicky Xipolitakis>

Epílogo: la pretendida intención de provocación conceptual del protagónico, colisiona con la construcción de un verosímil naif. Una versión romántica de la vida, la sociedad y la pena criminal concluye en clisé. Las remakes poco trabajadas —y se nota—, termina con las buenas intenciones de resignificar historias. 

Oscar Martínez: lo más sólido de un guión con enormes fisuras. 
 

 Gustavo Contarelli
 

Puntaje del film: 2 Tribunas

Puntaje actor protagónico: Dolores Fonzi 4 Tribunas

Puntaje actor de reparto: Oscar Martínez 5 Tribunas

Referencias:

5 Tribunas: excelente /imperdible

4 Tribunas: muy buena

3 Tribunas: correcta / buena

2 Tribunas: regular

1 Tribunas: mala /pésima