Ficha Técnica / Artística:
Título original: La Omisión De La Familia Coleman.
Dramaturgia y Dirección: Claudio Tolcachir.
Género: Comedia Dramática – Clasificación: Teatro, Adulto.
Reparto: Cristina Maresca (Abuela), Miriam Odorico (Memé), Inda Lavalle (Verónica), Fernando Sala (Marito), Tamara Kiper (Gabi), Diego Faturos (Damián), Gonzalo Ruiz (Hernán), Jorge Castaño (Médico).
Producción: Teatro Timbre 4 / Maxime Seugé / Jonathan Zak.
Diseño de Luces: Ricardo Sica – Diseño Gráfico: Johanna Wolff.
Fotografía: Giampaolo Samá.
Teatro: Paseo La Plaza, Av. Corrientes 1660, CABA / Tel.: 6320-5350.
Días y horarios: Viernes 22.15 hs / Domingo 21.45 hs.
Costo localidades: $ 400 – Web: http://www.timbre4.com
Duración: 90 min. – Finalización: 17/07/2016.
Año producción original: 2005 – Duración: 90 min. – País: Argentina.
La Omisión De La Familia Coleman (2005), es una obra de teatro de estética y estructura “Coral”. El dramaturgo Claudio Tolcachir (Tercer Cuerpo, 2008 y El Viento En Un Violín, 2011), nos propone un viaje al interior de una familia disfuncional manifiesta, donde se fusionan: locura, abandono, tragedia, en género grotesco.
El espectáculo de marras se vende con el marketing del “Teatro Off”. Es una forma de producción expresada por pequeños formatos: montajes, presupuestos, cantidad de actores, texto o situación que se vincule a la proximidad entre el espectador y el productor de la obra. El “Arte Off”, se asocia con el Teatro Independiente en la formulación de sus productos culturales.
La historia es una fotografía de una familia atípica, por no llamarla “poco convencional”. Alejada de toda normativa urbana de las buenas costumbres, el grupo vive al límite de la ruptura, una disolución evidente pero secreta; conviviendo en una casa que los contiene, los encierra y fagocita. Cada miembro construye sus espacios y pactos. Una cohabitación insoportable tamizada desde el absurdo, donde todo es posible.
La “mater familia” Cristina Maresca (Abuela), es la jefa del clan tan peculiar. Mientras vive, mantiene la cohesión del grupo. Cuando deja de existir, la ruptura de los lazos sanguíneos es inevitable. Implosiona todas las tensiones. Es al mismo tiempo la facilitadora de los dispositivos del lenguaje, del manejo del espacio escénico, el trabajo sobre las emociones y abordaje de textos. Todo gira alrededor de su figura. No obstante, el recorrido visual del espectador avezado brinda todos los aplausos a Miriam Odorico (Memé) – la hija de la abuela – por la hiperactividad, la exposición y su rol del actor.
El director, recurre al uso de la prosa humorística, como soporte a la sinrazón humana presente y futura. El humor es una fuerza movilizadora de comunicación efectiva. La risa, la dosis miorrelajante que descomprime la trama y la endulza. Con parlamentos fuertes se aproxima al verosímil de la historia: el padre ausente, la enfermedad mental, el abandono en clave costumbrista citadina.
Con todo, La Omisión De La Familia Coleman vuelve al Paseo La Plaza - esta vez en la Sala Pablo Neruda -, para realizar funciones de viernes a domingos, en horario central, y celebrar la 12 temporada de actividad teatral ininterrumpida. Vista por 241.920 espectadores, lleva realizadas 305 funciones en el extranjero y participó en 50 festivales internacionales visitando 22 países.
No abundan las obras de este género en cartelera. El grotesco /sainete criollo, es una categoría en sí misma, como tal hay una relación con los objetos artísticos diferentes. Es un género mixto, en el cual los distintos elementos mantienen un equilibrio inestable entre lo risible y lo trágico, lo conceptualiza por la dialéctica de la contradicción. Es el arte de reflejar las costumbres de un grupo social, agregando a los elementos humorísticos un conflicto sentimental y una acción trágica. No es para cualquiera. Requiere de expertez de autor.
Los deméritos de la pieza hay que rastrearlos en el guión y la narración; los personajes guardan simetría pero no logran el clímax en los momentos fundantes. Hay dispersión y no condensación de los sentidos. EJ: colisiona la dramatización de la tragedia, es vacua; en la cancelación del relato hace mutis por el foro y la ausencia de rendezvous asedia. Sin metáfora que pinte la realidad y un paraíso de sensaciones indefinidas, no hay lugar de encuentro entre el autor y el espectador.
La Omisión De La Familia Coleman, un clásico del neo-grotesco porteño.
El abandono doméstico atravesado por la locura, el conflicto sentimental y la tragedia. Su prosa tiene pinceladas del sainete criollo.
Gustavo Contarelli
Puntaje de la obra de teatro: 3 Tribunas
Puntaje actor protagónico: Miriam Odorico (Memé) 5 Tribunas
Referencias:
5 Tribunas: excelente /imperdible
4 Tribunas: muy buena
3 Tribunas: correcta / buena
2 Tribunas: regular
1 Tribunas: mala /pésima