El debate por el aborto tiene aún mucha tela para cortar. Ahora, en las últimas horas, se agregó una nueva polémica, en forma de papelón.
Todo se remonta al 9 de junio pasado, cuando el diputado Daniel Lipovetzky, que promueve la legalización del aborto, informó que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se había pronunciado en favor de la despenalización; era compatible con Convención y señalaba que “el embrión no es persona”.
Sin embargo, el documento, con membrete de la CIDH y el formato habitual de la CIDH, resultó ser falso.
Según reveló el periodista Mariano Obarrio, la Cancillería informó que la embajada ante la OEA, que dirige Paula Bertol, dijo que la consulta “fue contestada por una funcionaria menor y no está avalado por la Comisión. No tiene firma y es un recorte de fallos. No fue enviado por los siete comisionados de la CIDH ni por el Secretario Ejecutivo, el brasileño Paulo Abrao”.
La misma dependencia añadió: “Está firmada por la jefa de gabinete de la secretaría de la CIDH y no es adecuado el proceso a través del cual se pidió la información ni a través de la cual se expresó la CIDH”.
La obtención de este pretendido aval al proyecto por parte de un organismo internacional fue blandida por Lipovetzky y todo el bloque abortista como un trofeo a tan pocos días de la votación. Y sirvió para intentar convencer a algunos indecisos, en medio de un lobby infernal, donde descollan desde el actor Pablo Echarri hasta los radicales Ricardo Gil Lavedra o Ernesto Sanz.
¡Je,je! Es como la denuncia tomada por el Chuzo Gonzalez Quintana de los encapuchados que "DECIAN" que Santiago Maldonado había sido secuestrado y torturado.. No extrañaría que Verbitsky hubiese estado detrás de este nuevo "pescado podrido". FAlta que Lipovetsky diga como Hebe y Carlotto al momento de pedirle disculpas a Begoglio; "FUIMOS MAL INFORMADAS"
Desgraciadamente ya lo exhibió y no hay forma de contrarrestarlo, porque este chuzo tiene todo a su favor hasta la prensa bien pensante. Comenzamos a liquidar las futuras generaciones que es lo que pidió el FMI, hay que terminar con los pobres no con la pobreza.