En el medio de la causa que desataron los cuadernos de coimas de Oscar Centeno, por estas horas, la expresidenta Cristina Fernández aparece como la principal implicada y señalada como la cabeza de una banda que extorsionaba a empresarios dedicados a la construcción.
Los lujos de El Calafate o su exclusivo departamento ubicado en Recoleta llegarían a su fin en caso de ingresar en el penal de Ezeiza, donde no hay aire acondicionado en verano y el calor de diciembre a marzo puede ser insoportable.
Anoche, el PPT, Jorge Lanata visitó el penal de Complejo Penitenciario Federal IV de Mujeres, ubicado en Ezeiza, y recorrió lo que podría convertirse en el nuevo domicilio de la exmandataria en caso de que sea encontrada culpable de corrupción por la Justicia.
En caso de quedar detenida, Cristina ingresaría en el programa IRIC (Intervención para la Reducción de los Índices de Corrupción), una unidad en la que entran solamente 9 internos y que está destinada a personas con alto poder adquisitivo por temor a que ello podría corromper a su entorno.