Imprevistamente, ante las cámaras televisivas el Salón Blanco fue protagonista de un suceso inusual. Finalizaba un acto cuya figura cantante era Julio de Vido el jueves al mediodía, cuando sin mediar nada se vio al presidente Néstor Kirchner pasar por detrás del mismo mientras hacía uso de la palabra, seguido por su edecán. Quienes en ese momento estaban sintonizando Telefé Noticias no salían de su asombro, como tampoco lo hicieron sus conductores y el resto de los periodistas acreditados en la Casa Rosada. Se ensayó desde el oficialismo una explicación banal, cuando se supo que el motivo de esa aparente huida fue un llamado urgente de Oscar Parrilli desde Olivos. Ante la requisitoria de la prensa, se dijo que Kirchner había olvidado un evento de carácter privado y por eso, tuvo que tomar el helicóptero rumbo a la Quinta. Como estas no satisfacían a nadie y como lógica contrapartida, generaban enorme expectativa, afirmaron sin convicción que retornaría a sus actividades protocolares a las 18 hrs. Y luego, hubo un pesado silencio de radio. Asemejando la ausencia de información proveniente de La Habana referida a la salud de Fidel Castro, algunos medios independientes dejaron entrever que esa insólita actitud más tenía que ver al estado de salud malogrado del presidente argentino. También como en la sitiada isla caribeña, esto constituye un casi secreto de estado que es guardado celosamente por el entorno pingüinero.
    Se entiende que como en Cuba no rige precisamente ni el estado de derecho ni la libertad de prensa, sobre todo producto del constante asedio estadounidense, en Argentina el kirchnerismo mete bajo siete llaves toda referencia a la condición clínica del actual inquilino de Balcarce 50.
    A pesar de su pretensiosa alegoría de establecer un país en serio, jamás el kirchnerismo dejó de lado el recelo hacia la prensa pasando del intento o la compra lisa y llana, a la censura implícita.
    El día anterior, miércoles por la noche, en el programa de cable A dos voces el veterano dirigente radical Raúl Alfonsín manifestó su deseo de que Roberto Lavagna sea candidato de su partido para las elecciones de octubre de 2007. Quien fuera el primer mandatario de la restauración democrática expresó que el ex ministro era la alternativa ideal para superar “este populismo nuevo que no resuelve problemas. Lavagna es un progresista respetado que tiene un pensamiento muy claro”. Asimismo, aventuró que podría llamar para esos comicios a una concertación de partidos con la exclusión, claro está, del PRO de Macri y López Murphy.
    Pero también el ex presidente Carlos Menem intenta convencer al tecnócrata con rostro humano para sumarlo a sus filas, lo que hizo que algunos analistas creyeran posible una alianza entre ambos ex presidentes.
    Finalmente, para colmo de males, en la madrugada del citado jueves los superpoderes vieron su aprobación en diputados. A contrapelo de la situación nacional, con casi 8000.000 de chicos por debajo de la línea de pobreza, con una constante y sonante desocupación, indexación encubierta de alquileres, inseguridad galopante y demás yerbas, el jefe de Gabinete Alberto Fernández tiene ahora vía libre para hacer uso y abuso indiscrecional de los fondos del Estado. Ante ese nuevo avance autoritario, la democracia retrocede otros cien lugares hacia el comienzo de un juego de nunca acabar.


Agujerito sin fin

    Avanza el kirchnerismo firme frente a los desorientados e improvisados movimientos de la (no) oposición, que aún no entiende -o no sabe- cómo tejer una red de alianzas para enfrentar al colosal monstruo el próximo año.
    Se alegra Kirchner, pues todo lo proyectado se va dando como anillo al dedo desde el momento en que su esposa Cristina y su adláter, el Chino Zanini, comenzaran a dibujar lo que sería la atcual operación "Clamor", largamente anticipada por este medio. De esta manera se viene allanando el camino para que en el 2007 la Casa Rosada sea ocupada nuevamente por Néstor K o alguno de sus allegados más directos.
    Desde hace algunas semanas comenzó a correr el rumor de que Mario Das Neves, gobernador de Chubut, sería el bendecido para ocupar el sillón presidencial, probablemente como devolución del favor de "cajonear" la causa "Conarpesa" que involucra fuertemente a Kirchner. 
    Esto fue reflejado por Tribuna de periodistas hace algunas semanas y provocó el pertinente comentario de uan importante fuente de información. Veamos: "Aunque lo presentaron como un disparate político, comentaristas nacionales especularon ayer con la deserción del matrimonio presidencial y la bendición del Gobernador chubutense para el principal cargo político de la Nación.
    En los laboratorios donde el 'dasnevismo' genera ensayos políticos tampoco se pierde tiempo. Fuentes irreprochables aseguran que la Casa Rosada es el destino que obsesiona al Gobernador y no descartan que haya posibilidades de alcanzarlo 'antes de lo que muchos creen', deslizó un hombre del gobierno.
    Quienes presumen de manejar buena información de Fontana 50 dicen que se piensa en el adelantamiento de las elecciones provinciales para observar la evolución nacional con una carta de triunfo en el bolsillo. 
    El dasnevismo siente que Kirchner ha mirado al Gobernador chubutense como una alternativa para sucederlo ahora o después; aunque la ansiedad los traicione y sueñen en secreto con ingresar a la Rosada en el próximo turno. 
    Por ejemplo, el auspicio de Kirchner a la 'concertación chubutense' que fuera en principio medido como una señal, es ahora considerado una referencia política crucial. ¿Por qué esa valoración? Ocurre que el acto de la concertación dasnevista lo presidió Kirchner en la Casa Rosada; mientras que la reunión organizada en Mar del Plata por la agrupación Compromiso K será encabezada por Carlos Zannini.
    Si bien todas las fuentes oficialistas coinciden en que finalmente Néstor Kirchner será el candidato presidencial, todos se dedican con entusiasmo a las especulaciones electorales. Dicen, por ejemplo, que está en marcha la organización de una cumbre que reunirá al presidente Kirchner y a los gobernadores Das Neves y Cobos. 'Esto será la semana venidera y de ese trío saldrá la dupla que integrará la formula del Frente para la Victoria', conjeturan con cierta lógica, hay que admitirlo".
    Y hablando de reelección, en un gesto de asombrosa ambición política, Felipe Solá pelea con uñas y dientes para lograr acceder a un tercer mandato como gobernador de la Provincia de Buenos Aires. No se entiende por qué tanta insistencia por parte de este oscuro mandatario. Nadie puede creer que Solá quiera seguir en este cargo por amor a la gente y algunos recuerdan aún su paso por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca, desde donde gestionó la venta irregular de millonarios permisos de pesca a empresas depredadoras de recursos nacionales.
    Olvidando este pequeño detalle, el kirchnerismo ha dado su aval al bonaerense, con ayuda del kirchnerista Carlos Kunkel, quien "operó" fuertemente para que esto sucediera. Hay quienes se acuerdan de los "negocios" hechos por Kunkel en el partido de Florencio Varela hace años y la protección recibida por parte de Solá. Son los mismos que suelen decir que "favor con favor se paga".
    Uno de los pocos que se opone fuertemente a esta candidatura es el incombustible Aníbal Fernández, quien aspira a ser el candidato natural de la gobernación de la provincia más poblada del país. Allegados al ministro aseguran que está más que enojado por el respaldo del oficialismo a Solá.
    Mientras tanto, desde el Gobierno no saben cómo sacarse de encima al jefe de la cartera de Interior, quien no cesa de meterse en problemas y complica incesantemente los proyectos de su jefe, Néstor K. Como botón de muestra, puede mencionarse la relación que Fernández posee con el lider de la banda Callejeros, Pato Fontanet y las versiones -siempre surgidas desde el propio seno del gobierno- de que estaría ayudando a organizar los recitales clandestinos que este grupo viene efectuando.


Concluyendo

    Mientras los grandes medios dedican gran parte de su espacio a especular sobre la salud de Fidel Castro, ciertos políticos denuncian que son espiados, algunos medios son "comprados" por el gobierno, no pocos periodistas son censurados y la oposición es cooptada.
    De esta manera no se habla de la delicada situación económica que vive el país, con una economía sostenida con alfileres, sin un plan económico definido aún, con un sistema impositivo regresivo y una política integral de subsidios que cada día es más insostenible.
    Este es el estado de cosas que vive hoy la Argentina. Una verdadera burbuja que siempre está a punto de estallar. ¿Cuánto más puede sostenerse todo esto?

Christian Sanz y Fernando Paolella