Carlos Caserio fue montonero, hoy es senador Nacional del Frente de Todos y viene currando en el Estado desde los años 80.
Bien podría ayudar, en medio del pedido del presidente de la Nación de aportar solidariamente en medio de la pandemia del coronavirus. Sin embargo, no lo hará.
Sin embargo, en su momento, entrevistado por canal TN dijo que está en contra de rebajarse el salario o hacer cualquier tipo de cesión de sus privilegios (ver al pie).
“Yo trabajo para venir acá, no me regalan el sueldo. Hablar del esfuerzo de la clase política es no entender al Estado. La clase política no es la que hace esfuerzo, dicta normas y gobierna del modo que le parece más adecuado”, dijo el legislador.
Lo bueno es que dejó un buen “sincericidio” al pasar: “La clase política no es un elemento fundacional o productivo del país”. Es bueno que lo diga, porque los K no son los únicos que buscan mantener sus privilegios, sino también la oposición.