Las continuas suspensiones de producción en las fábricas en Tierra del Fuego y, sumado a ello, las mayores complicaciones de compañías que se dedicaban a importar con marca propia redujeron drásticamente los inventarios.
Sin embargo, tal cual cuenta Iprop, el golpe de gracia lo dieron las sucesivas medidas sobre el mercado cambiario, tendientes a evitar que se "fuguen" los dólares y, por efecto colateral, que ingresen insumos indispensables para la actividad.
Estas trabas no sólo dilatan los trámites sino que muchas veces estos pasan a foja cero. Así, empresarios del sector refunfuñan en voz baja y dan cuenta de la crítica situación que atraviesan, que los deja en pausa hasta que se aquieten las aguas del maremoto cambiario.
El el momento en que los argentinos más necesitan teléfonos y, sobre todo, computadoras, los clientes se quejan: no hay computadoras y las pocas que se ofrecen están carísimas.
No hay notebooks
Un ejecutivo top-level de un fabricante de computadoras resume las causas que han llevado a esta escasez en tres puntos:
-El aumento del dólar, que generó un descalce entre oferta y demanda.
-La mayor dificultad en la provisión de piezas necesarias para el ensamble.
-La industrias se ven más imposibilitadas para operar en buenas condiciones.
"Andá a cualquier supermercado o cadena de electro: si conseguís una notebook de gama baja, te la pago yo", desafió a ese sitio un ejecutivo de larga trayectoria en venta de equipos informáticos.
Al navegar los sitios web, el usuario se encuentra con datos que lo desorientan aún más. Es que en el caso de PC de gama baja, en su mayoría de industria nacional, no hay stock.
Los precios de las del segmento medio se incrementaron hasta 30%. Y, aun así, resultan difíciles de conseguir.
Para las más sofisticadas, las cotizaciones se duplicaron en apenas un mes y ninguna hoy baja de los $120.000.
Sumado a todo lo anterior, el Gobierno volvió a incluir a electrónica y electrodomésticos (y sus componentes) entre los rubros comprendidos en las licencias no automáticas (LNA).
Lo hizo para proteger la industria nacional, luego de que Mauricio Macri liberara la importación de notebook. Es decir, el ingreso de estos artículos requiere de autorización previa.
En este marco, muchos importadores que proveían a la industria, se están dedicando a otra cosa.