A finales del año pasado, la Oficina Anticorrupción (OA) presentó la evaluación del Plan Nacional Anticorrupción (PNA) 2019-2023 y los lineamientos para el diseño de la Estrategia Nacional de Integridad. En 2019 sólo se cumplieron 29 de 83 iniciativas que correspondían a este periodo y 54 aún están pendientes o en ejecución.
Creado en abril de 2019 por el decreto 258/2019, el PNA constaba de 260 propuestas en materia de transparencia, integridad y lucha contra la corrupción. En la evaluación, desde la OA observaron “limitaciones” en la planificación estratégica y en el enfoque preventivo, propuestas desarticuladas sin un diseño integral y estratégico, iniciativas sin metas y difíciles de medir, y plazos de ejecución mal estipulados, entre otras falencias.
El diagnóstico se realizó en conjunto con la Subsecretaría de Fortalecimiento Institucional de la Secretaría de Gestión y Empleo Público de la Jefatura de Gabinete de Ministros, con el objetivo de repensar de forma estratégica una adecuación para el mismo. “Pasamos de una recopilación de iniciativas, a una Estrategia Nacional de Integridad, que incluye el Plan pero es más amplia y lo trasciende. Nuestro trabajo apunta a medidas que sean transformadoras de verdad y medibles”, expresó Luis Villanueva subsecretario de Integridad y Transparencia de la OA, en comunicación con El Auditor.info.
A futuro, desde la Oficina Anticorrupción planean trabajar en tres aspectos, por un lado en el Colegio Asesor, recientemente ampliado; por otro, en una estrategia preventiva y, finalmente, en una plataforma digital de seguimiento por parte de la ciudadanía. “No alcanza con que haya organizaciones que trabajen en el tema, necesitamos un verdadero acceso de la ciudadanía a la posibilidad de ver cómo avanza el plan, la integridad y la transparencia. Queremos utilizar la tecnología para democratizar la información”, señaló el funcionario.
La plataforma digital permitirá el control social y el monitoreo de la Estrategia Nacional de Integridad desde su diseño, formulación, implementación y evaluación. Para Villanueva, “la construcción de una cultura de la integridad está vinculada a mejorar la calidad democrática, con la participación ciudadana en todas las instancias del desarrollo de las políticas públicas”.
Otro de los ejes fundamentales es el Consejo Asesor: “buscamos que se conforme un Consejo Asesor que sea realmente plural y que refleje la composición social del país. Por eso, se amplió y ahora hay representantes de trabajadores, universidades, organizaciones federales y con perspectiva de género. Eso hace que sea una representación plural de las distintas percepciones, políticas y de las diferentes ideas que hay sobre cómo enfrentar la corrupción dentro de la sociedad”, destacó el subsecretario.
En cuanto al enfoque preventivo, Villanueva sostuvo que la corrupción tiene dos maneras de entenderse “una es sancionarla, hacer hincapié en la persecución y en la sanción de los delitos, y la otra es la prevención. Nosotros queremos enfocarnos en que los casos de corrupción no lleguen a darse, por eso tenemos que hacer lo posible para que los organismos tengan las herramientas para controlar la corrupción y que los hechos, no sucedan”.
“La gestión pública tiene que ser íntegra. Es necesario establecer instancias en las cuales exista la posibilidad de controlar a las autoridades, para eso estamos estableciendo una Red de Áreas de transparencia para cada ministerio o cada oficina pública tenga un espacio especializado que trabaje en estas temáticas. El control tiene que estar cerca, porque sino se llega tarde”, concluyó Villanueva.
El mejor plan antiKorrupción es achicar el estado hasta eliminarlo por completo.
La primera desinformación e el título. Nos avisa que nos va a explicar cómo funciona y resulta que en dos años lo único que se puede decir es que no funciona, o lo único que "funciona" es el gasto incurrido pero sin resultados. La segunda desinformación es la imagen que ilustra la nota, que sugiere que el que provoca la corrupción siempre es el privado y nunca el funcionario. Lo que sigue no es mejor, la propuesta no es determinar las causas y situaciones de la corrupción ni permitir que la ciudadanía pueda constatar su evidencia en tiempo real. La idea es que haya un plan separado de la administración, y que la ciudadanía tenga acceso a ese plan, o al relato de su evolución, y nunca a la información pública que puede ser evidencia de corrupción. Eso ya está muy definido en todas las normas de calidad ISO9000. Una política de calidad no se impone con un comité ni con un observatorio, ni con un asesoramiento, ni con una autopsia. Si la calidad no está en el centro del proceso, no hay forma de mejorar la calidad. La principal forma de evitar la corrupción es el control de gestión. Al que hay que controlar es al funcionario, en tiempo y forma. Porque la principal causa de la corrupción es la inacción o el incumplimiento abiertamente discrecional del funcionario que espera un incentivo. Ahí surge la necesidad de "hacerse amigo de un amigo" del funcionario para ser tratado en igualdad de condiciones.
La otra forma evidente y mucho más brutal de corrupción es la discriminación o la descalificación por cuestiones ideológicas. Una de las amenazas más directas y explícitas es la adhesión oficial a la religión de la perspectiva de género, y a la teoría crítica en general, con toda su teología, inquisición, rituales y sacramentos.
Son unos genios, van a ser más cuidadosos en ser corruptos, así nadie se entera, bah, a los que ven o leen C5N, Crónica o Pasquín 12, les pueden violar a las hijas, dejarlos sin empleo o hacerlos comer polenta a diario que los van a seguir votando .............
Esto sólo puede ocurrir en un país en joda, como el nuestro.