Después que la Justicia condenó a tres años de prisión a la banda de “motochorros VIP”, formada por Dante Casermeiro, hijo de la conductora televisiva Federica Pais y Octavio Laje, hijo de un ex diplomático, el tema fue olvidado pese al revuelo mediático.
La sentencia fue acordada durante un juicio abreviado llevado adelante por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 5 de San Isidro, en el que ambos fueron encontrados culpables de tres robos en diferentes barrios de la zona norte de la provincia de Buenos Aires.
Dante, de 20 años de edad, junto a su cómplice, tuvieron tratamiento privilegiado durante el proceso. El hijo de la conductora pagó una fianza de 150 mil pesos para salir de su detención. Sin embargo, el tema no quedó ahí. Tras recibir la condena, en su red de Instagram publicó mensajes desafiantes y una canción contra la policía, lo cuál en sí mismo no violaba ninguna norma de sus condiciones para cumplir la condicional.
Durante la pena, se acordó que no puede consumir drogas y alcohol, y debe seguir un tratamiento por su adicción. Ahora redobló la apuesta: reapareció en su red social, publicó imágenes de plantas de marihuana y fotos en las que consume esta droga y en diversas situaciones alcohol.
Hechos normales dentro de alguna parte de la juventud, que tampoco revisten gravedad depende su hábito. Aunque en este caso existía una imposición judicial, que si no se acataba ponía en riesgo los beneficios obtenidos. Lo cual demuestra el nulo control de los aparatos del Estado para la re – inserción de los delincuentes y el riesgo potencial que vuelvan a hacer daño a la sociedad.