Los que nos dejó la semana a nivel nacional nos permite analizar la intensidad que marcaron las noticias, los momentos, que sucedieron a un ritmo desenfrenado e intenso, donde la capacidad de asombro y las sorpresas avanzan, más allá que a nivel internacional la guerra y ataque despiadado de Rusia al pueblo Ucraniano sigue avanzando y arrasando con lo todo lo que encuentra a su paso.

Para destacar, se visibiliza la gran preocupación del gobierno, el gran tema es el acuerdo con el FMI, crucial y esencial para Alberto Fernández, que esperaba la sesión del jueves pasado de la Cámara de Senadores para que diera su aprobación.

Recalcar que debió enfrentarse con Cámara de Senadores, donde la Vicepresidenta –Cristina Fernández -, no dejó de mostrar su enojo, sus caprichos y malestar con el gobierno nacional, con Alberto Fernández y esa actitud de soberbia que la caracteriza, y donde la grieta avanza, entre los dos. Se agudizó de manera contundente, evidente y por más explicaciones “de todo está bien” no sirve, no es real y es otra ocultación de lo que ocurre entre ambos.

Mientras tanto, nos sacudía el informe del INDEC, respecto a la inflación del mes de Febrero y el nivel general del índice de precios al consumidor que registró un alza de 4,7 % y una variación interanual de 52,3%, ya que él rubro nivel nacional que sacude en el bolsillo de todos los argentinos era el de los alimentos que fue  (7,5%), donde le sigue Transporte de 4,9% y equipamiento y mantenimiento del hogar del 4,4%

Por su lado seguían los dimes y diretes y se daba a conocer la situación en virtud de la cual, la vicepresidenta no atendía o no contestaba los llamados y mensajes del presidente, que los enunciaba y hacía evidentes la portavoz del gobierno –Gabriela Cerruti-.

Pero al otro día y con total tranquilidad y como si nada pasará, salía Cerruti a explicar y decir: “que no es que no se hablan o no se contestan los mensajes. Ese día, en esa situación puntual, no le respondió, porque le estaban apedreando el despacho”, explicaciones infantiles, incongruentes, que demuestran la inseguridad de relatos y afirmaciones que causan indignación por la ausencia de seriedad y respeto hacia todos los ciudadanos/as que no pueden creer el show bizarro que arman.

En el medio de todo esto, se reunía el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil determinan determinó que el aumento será dosificado en cuatro partes y abril será el mes de mayor incremento salarial y negociaron con el gobierno una suba del 45% de la remuneración básica que puede percibir un trabajador, incremento que será dosificado, durante el mes de abril el sueldo aumentará un 18%, en junio un 10% y en diciembre un 7% alcanzado la cifra de los $ 47850.

Se difundía también por el INDEC, - que tuvo un protagonismo por sus informes-la valorización de la canasta básica alimentaria, que se incrementó en febrero un 9% y para no ser indigente una familia de cuatro personas necesito $ 37.414 en el mes y para no ser pobre o quedar en la línea de la pobreza necesitó $83.807

Ínterin, el Ministerio de Salud de la Nación, brindó recomendaciones ante la circulación temprana del virus de influenza e informar que a partir de este viernes y del lunes 21” comenzarán na recibir la vacuna antigripal a los fines de iniciar la distribución en todo el país, para iniciar” la vacunación de personas mayores de 65 años, niñas/os de 6 a 24 meses de edad, y quienes tengan entre 2 y 64 años y presenten factores de riesgo”.

Desde el miércoles pasado, arrancó el Censo Digital en cuanto a la posibilidad de completar el cuestionario que se encuentra en la web y desde el INDEC, su titular Marco Lavagna expreso –“que cerca de 200 mil personas habían completado dicho cuestionario digital”, y que debían registrarse para obtener un comprobante que se debía entregar el 18 de mayo para el censista que concurra a los hogares. www.censo.gob.ar

Finalmente, - como esperaba el presidente-, el jueves pasado, el Senado y tras una sesión de “casi diez horas” con discursos de legisladores para el olvido, respaldó el acuerdo con el FMI para refinanciar la deuda de más de 44 millones y que salió con 56 votos a favor, 13 en contra y 3 abstenciones.

La gran sorpresa que Juntos por el Cambio- la oposición apoyo la iniciativa de casi todo su bloque, el apoyo vino de quién menos lo esperaba esta vez.

Y nuevamente como la frutilla del postre, el Canciller de la Argentina Santiago Cafiero y su discurso en el Expo Dubái en inglés que generó tantas críticas por su pronunciación, improvisación e inseguridad al realizar su discurso en inglés, se enfrentó con el periodista Jorge Lanata llamándolo en inglés “dickhead” en declaraciones en un programa de radio donde la periodista María O’Donnell, a pesar de festejar estas expresiones, después salió a despegarse y decir “que estaba en contra de estas declaraciones”

A ello se sumó, el Colegio de Traductores Públicos de la CABA, expresaron “su preocupación por el nivel en el habla del idioma mostrado por el funcionario en Dubái y porque consideraban que el canciller debía recurrir a un traductor o interprete profesional que garantice que el funcionario en cuestión sea entendió y porque la Argentina, tiene traductores e intérpretes de excelencia”.

Otra vez se presenta la falta de respeto, el exceso de importancia y de poder, de decir y hacer lo que sea porque nada afecta o complica, mientras tanto la situación y realidad de los argentinos es crucial y los divismos de estos funcionarios están firmes al pie del cañón.

El viernes fue el día “D” esperado anunciado por el presidente que había expresado que “el viernes vamos a empezar otra guerra”.

Esto generó que todos los medios y la oposición cargarán las tintas contra estos términos, situaciones de risas, de menes y el estupor de lo que nos esperaba en esta guerra que era contra la inflación y algo más, que no sabíamos o desconocíamos de esta guerra.

Desde ya cuando se consultaba a los allegados del gobierno, todos se mostraban absortos y no sabían a qué se refería y que diría en concreto, pero llegó el día y su discurso – el viernes pasado –

Este discurso no implicó nada, estaba vacío de contenido, diciendo más de lo mismo, que ya sabemos y conocemos, hablando de la pandemia, del día histórico con la aprobación del Senado en el acuerdo con el FMI, y así sucesivamente, pero las medidas no estaban.

Así, las cosas y como si nada más faltará, solo dejó que “el gobierno oficializó la suba de las retenciones para la harina y el aceite de soja y la creación de un Fondo estabilización para el trigo, lo que provocó un gran malestar en el campo”.

Dejó el discurso de Fernández, más dudas que certezas y otra vez se presenta en general un panorama incierto, porque cuando dice que se viene la guerra contra la inflación, se olvida que esta “inflación” llego hace un largo tiempo, se quedó, se ancló para quedarse.

Desconoce el presidente la realidad, porque en momentos complicados y justos cuando daban a conocer el índice de inflación sigue haciéndose el gracioso. Se presenta de sorpresa en lugares como en Tortuguitas, Provincia de Buenos Aires, para festejar a un grupo de jubiladas partidarias, en un natatorio en el cual, tenían una clase de “aquagym” aplaudiendo al compás de la música la coreografía pidiendo “no me tiren al agua”, cuyo video se mostró en su cuenta social de twitter.

Otra vez el presidente “barrilete”, que es remontado y va a donde lo lleve el viento, con rumbo desconocido y liviano, que debe ser ejemplo para la nación de seguridad y respeto.

Recuerde Sr. Lo que dijo Theodore Rooselvet: “Mantén tus ojos en las estrellas y tus pies en las tierra”.