Brasil elegirá presidente el próximo 2 de octubre: Jair Messias Bolsonaro terminará su mandato el 31 de diciembre y pelea por la reelección por otros 4 años más, y Luiz Inácio Lula da Silva quiere recuperar el sillón que ya ocupó de 2003 a 2010. El cambio o la continuidad de gobierno en este país -que tiene 213 millones de habitantes, es la 12ª economía más grande del mundo y es el quinto de mayor superficie geográfica– impacta en la Argentina y en la región.

En esta nota te contamos cómo es la relación comercial entre Brasil y la Argentina, qué le exportamos y qué importamos de este país y cómo es la balanza comercial. Además, con especialistas, analizamos qué futuro podría tener la relación comercial a partir del resultado electoral en el país vecino.

¿Por qué Brasil es importante para la Argentina?

Como se explicó en esta nota, Brasil es el país que más productos argentinos importa, desde hace al menos 3 décadas. El vértice de esa relación fue en 2011, cuando Brasil importó US$ 17.318 millones, un 24% de las exportaciones argentinas. Triplicó ese año la cuota de mercado de los importadores chinos, que habían quedado segundos. En 2021, el vecino sudaméricano importó US$ 11.760 millones, casi el doble que China.

Un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) destacó, además, que “más del 80% de lo exportado por la Argentina al Mercosur lo compra Brasil”, que “absorbe el 35% de nuestras exportaciones industriales y es un mercado crucial para muchos productos agropecuarios nacionales beneficiados por el Arancel Externo Común (AEC)”.

Pero, ¿cómo está la balanza comercial con Brasil?

La balanza comercial es la diferencia entre lo que compramos al exterior y lo que le vendemos. De acuerdo con los datos del Intercambio Comercial Argentino (ICA) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), ese saldo fue positivo para la Argentina respecto de Brasil sólo en 11 años en las últimas 3 décadas. Es decir que a Brasil le compramos más de lo que le vendemos.

De esos 11 años de saldo positivo para la Argentina, 7 corresponden a los gobiernos de Carlos Menem (PJ); 2 pertenecen a los 2 años de gobierno de Fernando de la Rúa (Alianza); 1 (2002), al de Eduado Duhalde (PJ), y el restante (2019), al de Mauricio Macri (Cambiemos).

Durante los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner (Frente para la Victoria) la Argentina nunca se anotó un año de balance comercial positivo con Brasil. Tampoco en 2020 ni en 2021, los 2 primeros años de gobierno de Alberto Fernández (Frente de Todos).

El peor saldo comercial con Brasil de los últimos 31 años, sin embargo, se registró en el gobierno de Macri, en 2017, con -US$ 8.662 millones.

¿Qué es lo que más le compramos a Brasil?

De acuerdo con los datos del INDEC, en 2022 lo que más importamos de Brasil son los automóviles, por US$ 406 millones; siguen los aglomerados de hierro (US$ 354 millones); los autos de motor más chico (US$ 345 millones); el fuel oil (US$ 320 millones) y los tractores (US$ 149 millones).

¿Y lo que más le vendemos?

En 2022, lo que más le exportamos a Brasil son los vehículos para transporte de mercancías, por US$ 1.115 millones; trigo y morcajo (N. de la R.: mezcla de trigo y centeno), excluidos trigo duro y para siembra (US$ 972 millones); los autos (US$ 597 millones), otros vehículos (US$ 494 millones) y otras manufacturas de plástico y caucho (US$ 243 millones).

¿Qué provincias son las que más exportan a Brasil?

Las exportaciones argentinas a Brasil provienen, en su mayoría, de la Provincia de Buenos Aires, con el 54,16%. Le siguen Córdoba, con el 13,49% de participación sobre el total exportado al país vecino; Santa Fe, con el 10,39%; Mendoza, con el 2,98%; Entre Ríos, con el 1,69%, y Tucumán, con el 1,59%.

La relación comercial con Brasil tiene un mayor peso en algunos distritos. Julieta Zelicovich, doctora en Relaciones Internacionales, profesora de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) e investigadora del Conicet, dijo a Chequeado: “A Brasil se les exportan desde autos hasta cereales, frutas y hortalizas. El impacto es distinto según cada región: para Neuquén, Brasil capta casi la mitad de las exportaciones. Río Negro y Mendoza son otros ejemplos de economías regionales donde las exportaciones a Brasil son muy importantes; con lo cual hay un universo de bienes muy variado”.

Marcelo Elizondo, analista económico internacional, presidente de la Cámara de Comercio Internacional (International Chamber of Commerce, ICC) y director de la consultora DNI, dijo a Chequeado que “a la Argentina le conviene lo que haga la Argentina”, más allá de quién gane en Brasil. Sostuvo que, “en el caso de que gane el PT (Partido de los Trabajadores), no vamos a tener un presidente proteccionista”. Y agregó: “Bolsonaro es aperturista pero Lula también va a ser relativamente aperturista, porque la apertura económica es un consenso bastante generalizado en Brasil”.

Elizondo subrayó que la decisión electoral puede impactar con más contundencia sobre el Mercosur porque, según dijo, “Bolsonaro desprecia al Mercosur, porque lo ve como un proyecto proteccionista, con un AEC alto, que ampara la falta de competitividad”, a diferencia de Lula, que ve al Mercosur como el ámbito para incorporar a la región a sus proyectos de internacionalización.

Por su parte, Zelicovich dijo que “lo que le conviene a la Argentina es un gobierno de Brasil que le tenga paciencia al desorden de su política macroeconómica”, que “apueste por la cooperación regional, que privilegie la estabilidad del Mercosur y la mirada de largo plazo; que no recurra a las barreras no arancelarias que hoy afectan al comercio bilateral y que en vez de una lógica de ‘ojo por ojo’, ante irregularidades del lado argentino, se siente a negociar y buscar una salida conjunta”.

Y agregó: “No estoy segura de si un gobierno de Lula tendrá esa paciencia estratégica que necesita la Argentina ni que el Lula 2023 sea el mismo Lula de 2003 a 2010. La propuesta electoral de Lula tiene puntos más fuertes hacia un Mercosur más cooperativo que la de Bolsonaro. Pero no significa que Lula vaya, por ejemplo, contra la reducción del AEC”.