Fernanda Pérez, integra el universo de la literatura que transporta a distintos géneros literarios atrapantes, únicos e intransferibles; oriunda de la provincia de Córdoba con una importante trayectoria profesional.

Es periodista, escritora, docente, gestora cultural. Durante e 20 años fue redactora y editora del suplemento cultural del diario La Mañana de Córdoba.

Coordina la plataforma digital Babilonia Literaria, dicta talleres y charlas vinculados con la literatura y la cultura en diferentes espacios y ciclos que fusionan literatura con otras disciplinas artísticas. Curadora en 2019 de la Feria del Libro y el Conocimiento de Córdoba.

Autora de las novelas históricas Las maldecidas, El Sacramento, Los paraísos perdidos, La piel no olvida, Cómo escribir una historia de amor, de edición exclusiva en formato digital. Publicó las novelas contemporáneas Una mujer con alas y Nunca te olvidé. Integra las antologías Ay, amor , Ay, pasión y Ay, pecados, publicadas por el sello P&J.

Sus novelas históricas, contemporáneas son apasionantes y visualizan mundos en los cuales se presentan los sentimientos, las emociones, el amor, desamor, realidades que no pasan desapercibidas.

Su última novela “Una mujer con alas. Solo el amor nos permite volar. Editorial El Ateneo.

En tal contexto dialogamos con Fernanda Pérez para conocer sobre ese universo literario que escribe, se expresa, comunica en cada una de sus publicaciones.

DP- ¿Cómo nace su vocación y/o pasión por el mundo de la literatura?

FP- Me encanta todo lo que tiene que ver con el arte y de modo particular encontré mi modo de comunicarme artísticamente a través de la escritura. Dentro del oficio periodístico siempre me dedique al periodismo gráfico o sea a escribir, con lo cual la escritura ha sido una parte fundante de mi vida.

-Casi no hay día en el que no escriba algo, ficción, no ficción, una crónica, una entrevista. “La escritura atraviesa mi vida es el modo en el que yo me vinculo, me conecto, me expreso, hago mi catarsis con lo cual fue un proceso natural algo que me acompaño desde muy chica siempre escribí tanto en la infancia como en la adolescencia y como se escribe en los diarios personales. Y ahí había poesías, textos y cuentos”.

-Después está el salto que uno pueda hacer en publicar y es cuando uno ya se expone a la mirada de otros. Es lo que un poco “te pone en el rol de escritor o escritora y tiene que ver con esto de soltar el texto. Que este texto gire y empiece a llegar a otras personas que no te conocen, seguramente no te conocen pero pueden conectar con esto que quisiste contar y es un desafío”.

-Eso me llevó un poco a partir de una experiencia en un taller literario y de un largo proceso en el que me volqué a trabajar en una novela , mi primera novela, Las Maldecidas, cuya edición en el décimo aniversario se publicó el año pasado por la Editorial Sumas de Letras. Fue un proceso que me llevo seis años de trabajo por la investigación y el compromiso. Yo no tenía muy claro en un principio si se iba publicar o no y que iba hacer con ese material.

-Después me di cuenta que había pasado tanto tiempo metida adentro de esa novela que sentí la necesidad de publicarla.

-Publicar no es un camino fácil para quien comienza. En realidad unca es un camino fácil, mucho menos publicar el primer libro. Sin embargo, las cosas se fueron dando de manera natural y en ese momento publiqué con un sello de Córdoba, El Emporio. Creo que esa novela generó algo en la comunidad lectora tan fuerte que impulso el resto de mi carrera literaria.

TDP- En todos sus libros ¿Está presente el amor, pasión, compromiso social y personajes de mujeres que trascienden?

FP- El amor es una fuerza tan poderosa que un buen amor puede sanar las heridas más profundas y un mal amor puede generar heridas más profundas aún. Siempre me interesa como creamos, construimos, nos vinculamos desde el amor. A veces sobre falsas y erróneas ideas del amor que pueden ser muy letales. De hecho -vemos casos -que tienen que ver con femicidios o violencia de género y aparece el concepto del amor, un amor enfermo que lastima en cuanto a la relación de pareja.

-También, puede aparecer en otras relaciones, en otros vínculos. En el vínculo padres e hijos y es un terreno que siempre me gusta explorar o a veces también como entendemos ese amor, tal vez uno como o padres cree que está haciendo algo desde el amor, desde el amor más genuino. Sin embargo, a veces en los hijos no impacta de la misma manera y siempre es un terreno interesante “explorar sobre el amor y los vínculos”.

Es un mundo interesante y está muy asociado a nuestro universo emocional, afectivo y por ende, es una materia prima valiosa para la literatura.

-Con respecto al compromiso social y las mujeres que trascienden tal vez un poco transfiero a mis personajes cosas que tienen que ver conmigo. Creo que la literatura no solo está para entretener, sino también está para contar cosas que ocurren, que pasan y en eso me interesa a mí ese tipo de literatura. Me encanta a poner la mirada en personajes -como en el caso- de Una Mujer con Alas, que son tres mujeres que están en un ámbito que son trabajadoras sociales. Les toca convivir en un mundo complejo, con las burocracias y con muchas otras cosas.

- Me interesa ahondar sobre eso y no es casual que aparezcan las mujeres en todo aquello que son voluntariados, en el universo del trabajo social, y está muy presente la figura de la mujer. Cuando uno va a los merenderos, a los comedores y demás son mujeres las que están activando esta ayuda solidaria de otro.

-Entonces, desde ese lugar me parece muy interesante lo que ocurre con las mujeres y me gusta mostrar sobre las mujeres una red de cuidados, de contención y de afecto.

-Tengo novelas contemporáneas e históricas y en la novela históricas, me parece que aún es más fuerte, porque muchas veces hablo de contextos y territorios muy complejos especialmente en el siglo XIX y XX. Y ahí realmente está la fuerza de mujeres que se sostienen, que se apoyan, se cuidan. Es muy valioso y me gusta reflejar eso.

TDP-En una Mujer con Alas, ¿Decidió plantear historias, relatos de 3 mujeres en las que se encuentra presente y comparten de alguna manera la rutina, amor, cambios, soledad, desafíos, desarraigo?

FP- En “Una Mujer con alas” las protagonistas son Leticia, Carolina y Lola. Me interesaba poner a tres mujeres en tres etapas de la vida bastante diferentes, porque comparten un ámbito laboral y en ese ámbito laboral construyen una amistad laboral.

- Todas las mujeres hemos trabajado junto a otras mujeres en el ámbito laboral . Seguramente experimentamos esto de llegar con mucha carga del afuera, a veces la familia, a veces el amor, a veces los hijos, a veces los padres y un poco hacemos catarsis en el trabajo de esto que traemos. Así se va generando un vínculo. Las 3 tienen la particularidad que están en un momento de su vida buscando un cambio, una mutación.

-“Es un poco como cambiar de piel”.

- En el caso de Leticia es “una mujer de 55 y tantos como se ella se presenta ” y cuyos hijos se están yendo de casa, siente ese vacío, soledad y no sabe cómo volver a reconectarse con ella y con su propio deseo. Obviament, con su pareja y con un matrimonio que lleva muchos años y algo ha pasado en ese camino del matrimonio.

- Carolina es una mujer soltera independiente que tiene a su cargo a sus padres mayores y que a su vez tiene una relación clandestina y que empieza a plantearse casi a los 40 años el tema de la maternidad.

-Lola que sufre el desarraigo y debe dejar su familia y lugar de origen para acompañar a su novio e irse a vivir con él. Aquí aparece la convivencia, lo que uno extraña, aparecen las diferencias culturales entre ellos y surgen un montón de interrogantes, y encima aparece una persona que viene a poner su vida patas para arriba.

TDP- En base a lo expresado en la respuesta anterior, ¿Estas historias se encuentran unidas por algún motivo en particular y de allí surgen cambios?

FP- Pese a que son 3 relatos que tienen momentos e historias distintas, están unidos. Un poco porque algo está pasando, algo tiene que cambiar en mi vida y me parece que tiene mucho que ver con el deseo, lo que deseamos y es algo que nos cuesta mucho. Creo que todos en algún momento hemos sentido cierta insatisfacción ya sea sobre algún momento, sobre alguna situación, sobre un trabajo, sobre una relación o sobre una situación cotidiana.

-Es sorprendente lo que nos cuesta cambiar eso. La novela en este caso, indaga sobre esas cuestiones y porque nos cuesta tanto indagar, ir por lo que queremos, por lo que deseamos y por lo que amamos.

TDP- La plataforma Digital Babilonia Literaria, ¿Implica una forma de expresión para rescatar la literatura, el arte, la lectura y participación del universo literario?

FP-Babilonia Literaria “…Es una plataforma que me rescató a mí…” Empecé con esta plataforma en el año 2015. En el año 2016 empezamos con una compañera que venía de la gestión editorial, Camila López Nail. Lo pensamos como un blog que estaba a medio camino entre lo que se producía en páginas de lectores /as y lo que producían los medios tradicionales.

-En ese momento llevaba casi 20 años trabajando en el suplemento cultural de un diario y al año siguiente en el 2016 ese diario en el que llevaba 20 años como profesional especializada en cultura, tenía una página literaria y era editora cierra, quiebra y me quedó sin trabajo ,sin indemnización y un poco perdida.

-Ahí Camila se va de la plataforma y quedó pérdida con la plataforma y lo que voy hacer. Así se suma una colega mía que estaba en la misma situación que yo y con la que veníamos trabajando en el suplemento de cultura y espectáculos, Flor Vercellone, que es mi socia hasta el día de hoy. Empezamos a ponerle una energía particular. En ese contexto tan difícil y momento tenía casi 40 años y había pasado casi la mitad de mi vida profesional, porque había comenzado a trabajar a los 20, 21 años.

- Si bien tenía otros trabajos, otras cosas, pusimos mucha energía. Babilonia nos salvó, nos permitió seguir ejerciendo el periodismo y aprender un montón de cosas que no sabíamos y hoy es una plataforma.

- En ese momento todavía tenía este perfil de ser solo un medio de comunicación especializado en literatura, ampliamos el rango a cultura y con una mirada puesta en lo local.

- Luego empezamos a diseñar todo lo que tenía que ver con la gestión cultural. La comunidad lectora quería que nos reuniéramos en talleres literarios, clubes de lectura, meriendas, actividades con autores. Luego abrimos el servicio de autores y editoriales y es un área que hoy está funcionando increíblemente.

- Entonces,” Babilonia nos salvó a Flor y a mí” y dijimos: “Le metemos a esto con todas las dificultades que implica llevar un proyecto independiente, cultural y es un espacio que amamos y queremos y en Córdoba ya nos conocen “.

https://babilonialiteraria.com.ar/nosotros/https://babilonialiteraria.com.ar/nosotros/

TDP- El nombre de la plataforma ¿responde a un motivo determinado?

FP- Llamamos a la plataforma Babilonia Literaria pensando en un libro de poemas de José Luis de Tejeda, el primer poeta del Virreinato del Río de la Plata, nacido en Córdoba y es el peregrino de Babilonia. Nos llamamos las Babilónicas para diferenciarnos y somos conocidas así. Trabajamos mucho en estos 8 años ya que hemos construido una marca fuerte, reconocida, valiosa y siempre tiene algo para aportar.

-Nos encantan los libros, las historias, acompañar a autores/as. Nos encanta el mundo de las lectoras /es y esa fascinación que a veces se genera en torno a los libros y es algo que nos encanta y disfrutamos mucho llevar adelante todas las áreas de la plataforma.

TDP- ¿Quién ha sido o es su referente y/o personas que han dejado huellas, inspiración, senderos en su camino profesional?

FP- “Creo que esta pregunta sería injusta si dijera una persona”.

-Hay muchas personas que me inspiran a distintas cosas. En lo que tiene que ver con lo periodístico siempre nombró a mi padre, que era periodista y escribía cosas preciosas desde la ficción. Mi papá Luis, que falleció hace casi 3 años, me trasmitió un amor especial por el periodismo, por el compromiso social, por la literatura, y es quién me traía los libros. Yo era una niña que sufría asma desde pequeña.

- Como era una época muy distinta y no había nebulizadores en los hogares, “si venía el frio te quedabas en casa para que no te agarrara un ataque de asma, si venía la humedad te quedabas en casa también y así pasaba mucho tiempo adentro de la casa. Los libros que llegaban en ese período eran la compañía que llegaba de manos de papá”.

-Claramente es un universo donde lo veía escribir sus poemas, sus relatos, lo veía leer y con esa pasión por el periodismo.” Fue la figura que más influenció en toda mi carrera como periodística y como escritora”.

-También he contado siempre con el estímulo de mi esposo , de mi compañero, Marcelo, que cada vez que he tenido temor a publicar o dudaba sobre un libro, siempre lee los manuscritos , me hace las devoluciones y está alentándome para seguir escribiendo, para que produzca.

-“Para mí eso es importante”.

-Después muchas personas, algunos jefes que he tenido a lo largo de mi vida profesional, docentes que he tenido en algunos talleres literarios ya que van dejando como una pequeña huella que marcan también, algunos autores que respeto y admiro mucho.

-“Todo eso va forjando lo que uno es”.

“Escribir es la manera más profunda de leer la vida”. Francisco Umbral. Novelista, columnista, poeta, periodista, biógrafo y ensayista español.