Miserable: Desdichado, infeliz. Avariento, tacaño. Perverso, Lastimoso, lamentable, mezquino, exiguo. Raúl: Te describe perfectamente.
Estimado: Yo entiendo que la gente recorta su realidad de acuerdo a sus intereses en juego o a su capacidad de soportarla o de convivir con ella. También puedo aceptar que un narcisista abusador y manipulador como vos, busque quedar como “Don Quijote”, pero todos sabemos que la cuestión tuya y del ex Intendente pasó por otro lado.
Vos tuviste diferencias económicas y comerciales profundas con el anterior Jefe Comunal (esperemos que con éste no te pase lo mismo). O acaso te olvidaste que durante el primer año de gestión de Villordo fuiste un hombre con línea directa (compartiste varias comidas privadas) y que tu hijo (Román) iba a la cancha con el Jefe Comunal a gritar los goles de Quilmes. Aunque alguna vez fueron a la cancha de River (¿?).Esto último, tu propia esposa Inés solía decirlo a sus amigas más cercanas y a los docentes de la escuela del Encuentro.
En ese marco, llegaste a exigirle al poder de turno que los medios de prensa más pequeños no recibieran publicidad oficial, hiciste lobby a favor de Schiavo para que fuera presidente del HCD, difundías los resultados de los partidos de truco que Villordo jugaba con sus funcionarios, participaste de la emboscada a uno de los ex jueces de Faltas, involucraste a un concejal en el escándalo de los registros para tapar otro caso policial que involucraba a un colaborador del Ejecutivo de ese entonces (caso Rubio), entre otras cosas.
Después, las cosas se mezclaron con los intereses políticos de otros grupos (optaste por defender los intereses de dirigentes que vienen haciendo “pingües” negocios en la ciudad en los últimos 16 años ¿Son socios?) y competencias personales que te hicieron imposible “comercialmente” convivir. Y con el financiamiento de la Provincia asegurado, lo enfrentaste.
Algunas de tus diatribas y planteos sobre la libertad, la democracia, y otras yerbas, me hacen acordar a una frase que utilizaba mi abuela que vino de España: “Con un Mercedes Benz en la puerta es fácil ser comunista”.
Raúl, todos los que alguna vez pasamos por la Comunidad del Encuentro sabíamos que el edificio de Olavarría y Alvear iba a pertenecer a la Escuela. Tengo aún los bonos contribución (lo debía haber pagado por años) que entregó Esteban que lo decía textualmente.
Todos los que pasamos por la Comunidad del Encuentro, también sabemos que la construcción mencionada no se ajustaba a las normas legales. Vos y tus colaboradores lo reconocieron en varias reuniones que se hicieron en las verdaderas instalaciones de la iglesia del Encuentro, ubicada sobre la calle Olavarría (justo enfrente de la escuela).
También quienes pasamos por la Comunidad del Encuentro y nos saturamos de tus abusos y manejos arbitrarios, hemos aprendido que la misma gente que al principio te incluía y contenía, después te excluye y te segrega (hay honrosas excepciones, por supuesto) por obediencia “debida”.
Pensar que el diario PERSPECTIVA SUR fue un proyecto “evangelístico” y después se transformó en “tu negocio”. También pasó lo mismo con parte de las instalaciones del Diario, que fue comprado con los diezmos de la Iglesia.
En fin… Has querido, querés y seguirás queriendo ejercer un derecho que no tenés: callar al que tiene más capacidad de libre pensamiento que vos; juzgar; y condenar.
No obstante, y volviendo al tema en cuestión, no olvides que vos saliste a combatir políticamente a las construcciones “fuera de la ley” cuando eras responsable de una (Alvear y Olavarría, no cumplía y no cumple con las reglamentaciones vigentes a pesar del fallo).
Que hoy la Justicia quilmeña te haya servido como mecanismo para “blanquear” la construcción, no convalida tu locura de haber denunciado un hecho de “discriminación religiosa”, por tal motivo, ningún Pastor de Quilmes ni del país acompañó tus reclamos.
Raúl ya te conocemos todos.
José Haro
joseharo@joseharo.com
Creo que alguien tenia que ponerle el cascabel al pastor, bien Jose totalmente de acuerdo