San Miguel de Tucumán, miércoles 26 de marzo de 2008
Señor Director:
De tanto ajustar el Gobierno dio una vuelta mas de tuerca y rompió el eje de la maquina generadora de Riquezas, este "golpe definitivo " dejó a los productores del Campo sin aire y sin futuro.
En el intento de subir brutalmente las retenciones a la soja, puso en riesgo todo el andamiaje en el que se basó la recuperación económica del país, no solo se "timbearon " la cuestión fiscal y la balanza comercial a mediano plazo, sino que frenó abruptamente las inversiones del sector.
Tal vez aprovechando la desunion del sector, que no encontraba un patron gremial que agrupe a la gran maza de pequeños y medianos productores, creyeron que la fiesta debía continuar y metieron un nuevo manijazo a las retenciones, se cayó el andamio de la paciencia y se pudrió todo, si, asi de crudo.
Desde el 2002 cuando vino la crisis, la cosecha estaba creciendo a razón de 4 millones de toneladas por año. Frente a la estampida del dólar (el famoso "overshooting"), el agro digirió que había que poner una parte de la producción. Primero le pidieron un 10%, que enseguida pasó al 20%.
Se fue saliendo de la crisis. La reactivación comenzó por el campo, con los productores comprando sembradoras, camionetas y agregando tecnologia de última generacion. La emergencia pasó, pero las retenciones siguieron. La necesidad de divisas fue superada ampliamente, pero se instaló la inflación. Para cuidar el índice, se aumentaron las retenciones a la carne, a los lácteos, y hasta se llegó a cerrar la exportación de ambos. Se castigó con dureza al trigo,los mazasos aun se podian absorber y disimular de alguna manera,pero la creciente voracidad de un Gobierno que se embriagaba de agrodólares no mostraba sus límites y dieron el manijazo final " el aumento de las retenciones al 44% con escala movil y techo fijo,estó no solo destruye la pocas expectativas de rentabilidad del Campo, sino que logra lo que no pudieron sus competidores EE.UU y Brasil,frustrar el potencial tecnologico e innovador del que hacía gala el Agro Argentino, ,justo en el momento de mayor expansion del mercado mundial .
En contrapartida el campo aprovechó en estos últimos años la expansión capitalista que le ofreciá precios nunca vistos, supo desarrollar una extraordinaria revolución tecnológica, conviertiendose en la vidriera del agro mundial. Si el Gobierno hubiera aceptado estas reglas de juego, Argentina habría sobresalido por delante de muchos países, consecuencia del crecimiento sin par de sus exportaciones y con la atracción de inversores argentinos y foraneos, capaz de hacerle atravesar la frontera entre el subdesarrollo y el desarrollo.Transitando en esta dirección, el Estado podría haber recaudado sumas extraordinarias en el largo plazo para volcarlas en el resto de la sociedad aún no competitiva.
Pero lamentablemente el Gobierno sólo vio en el campo, más que una revolución económica y social de extraordinaria potencialidad, una excelente ocasión para financiar su propio proyecto en dirección de una economía cerrada al mundo y totalmente controlada por él gracias a las retenciones,todo esto logró alterar la vida del campo ,ademas de intentar vanamente de enfrentarlo con el pueblo,quien dió muestras de madurez ,con el sonido de cacerolas y sartenes salió a respaldar a quiene son los verdaderos productores de alimentos en todas las plazas de la geografia argentina.
Este grave escenario, exige una mesa de diálogo entre la Sra Cristina Fernandez de Kirchner y el conjunto con todos los factores que hacen a la franja agraria,de no suceder este evento a la brevedad,solo queda un paso a transitar, La Justicia, ambito donde se puede plantear la inconstitucionalidad de la norma, ya que se trata de un impuesto que no fue creado por una ley del Congreso Nacional, como lo establece la Constitución.
Frente a ese panorama, "los productores podrían interponer un amparo porque se estaría violando el derecho de propiedad(segun el Constitucionalista Daniel Sabsay).
Quien agrega :"La Corte Suprema estableció, en diferentes fallos, que para que un impuesto no sea confiscatorio, la alícuota no debe ser superior al 33% y aquí se supera ampliamente este margen ,sucede que en la última modificación a las retenciones, el Gobierno fijó alícuotas móviles para las retenciones, que hoy están en torno al 43% para la soja y el 39% para el girasol.
La no confiscación es una de las pautas de constitucionalidad que debe cumplir cualquier impuesto, que en este caso muestra a las claras el incumplimiento de la normativa.
Otros Constitucionalistas tambien se expresaron al respecto:el Dr. Gregorio Badeni, titular de Derecho Constitucional de la UBA, quien dijo a Clarín Rural que las retenciones son "inconstitucionales porque el Poder ejecutivo no puede legislar sobre impuesto federales tal como son los derechos de exportación".
Las retenciones no se ajustan al principio de igualdad que deben tener los impuestos. "En este caso, recaen los mismos porcentajes para los grandes productores como para los pequeños y está claro que tienen diferente capacidad contributiva", explica Sabsay.
Que quede en claro, los Argentinos necesitamos "diálogo",reflexion por parte de todos y expresiones de futuro compartido, lo que hoy no muestran las expresiones de la Sra. Presidenta.
Julio Argentino Gomez
julioargentino@arnet.com.ar