Desde el momento de la consagración de Javier Milei como presidente y la irrupción de su fuerza en el ámbito parlamentario se sabía que todos los ojos iban a estar puestos (y así seguirá) sobre el Congreso de la Nación: un oficialismo con marcada minoría en ambas cámaras frente al desafío de construir mayorías tema a tema. Y vaya si le tocó a La Libertad Avanza tener un agitado debut, del que finalmente salió -en el primer semestre- con el objetivo logrado de sancionar dos leyes para el Gobierno. No fue, claro, sin un camino sinuoso, en el que hubo concesiones a los pedidos de la oposición dialoguista y en el que se activaron las costumbres más tradicionales de la cuestionada “casta” por parte del líder libertario. Afuera declaraciones críticas, puertas adentro, negociaciones.
Sin respiro, el Parlamento vivió uno de sus veranos más intensos. “No hay vacaciones”, repetían más de una vez desde las cumbres oficialistas al hacer énfasis en la urgencia que tenía la recién asumida gestión. Sin embargo, el trámite llevó mucho más de lo deseado. Y es que si hablamos de la primera mitad del 2024, ésta estuvo marcada sin duda por la famosa Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, inicialmente conocida como “ley ómnibus”.
El recorrido de la famosa norma, parida luego de seis meses, atravesó el trabajo -sobre todo- de la Cámara de Diputados, donde 6 de las 8 sesiones que hubo en el primer semestre, la tuvieron en el temario. De esas 8 sesiones, 4 fueron extraordinarias y 4 especiales. Por su parte, el Senado llevó a cabo 5 sesiones: 1 ordinaria y 4 especiales, de éstas una fue informativa. En total, hubo así de enero a julio 13 sesiones entre ambas cámaras.
Diputados: un recorrido por la actividad en el recinto, atravesado por la Ley Bases
El bautismo de LLA en la Cámara baja fue el 31 de enero, cuando se inició una saga de sesiones para tratar la Ley de Bases. El proyecto original, enviado el 27 de diciembre de 2023, se trataba de un mamotreto de 664 artículos que fue perdiendo numerosos capítulos en el camino. Incluso, a esa sesión se llegó con un dictamen de 386 artículos, y en el arranque se anunció que se retiraban más de 100. Con una larguísima lista de oradores, Martín Menem adoptó la modalidad de pasar a un cuarto intermedio llegada la noche. Darle transparencia al debate y que “la gente lo pueda escuchar”, fue el argumento. Un ideal que no se repitió, claro, cuando llegó el momento final de la ley más adelante y se volvió al formato habitual “de corrido”. Así, se sucedieron las sesiones del 31 de enero, 1ro. de febrero y 2 de febrero, con un intenso calor en las afueras, no sólo por la sensación térmica sino por las protestas en contra de la ley, que tuvieron a manifestantes y fuerzas de seguridad como protagonistas. En la tarde del viernes 2, el oficialismo consiguió aprobar en general la ley con 144 votos a favor, 109 en contra y 0 abstenciones.
El debate en particular se retomó el 6 de febrero. Al cabo de tres horas, y luego de votaciones fallidas en varios incisos del capítulo reforma del Estado, el proyecto volvió a comisión. Desde ese día no hubo sesión hasta el 29 de abril, cuando se discutió nuevamente la reversionada Ley de Bases.
No obstante, durante ese lapso de tiempo ocurrió la Asamblea Legislativa del 1ro. de marzo y hubo dos intentos de la oposición para abrir el recinto y debatir otros temas, aunque no tuvieron quórum. El primero fue el 13 de marzo, impulsado por Hacemos Coalición Federal para tratar la movilidad jubilatoria. El segundo caso fue el 24 de abril, en una sesión pedida por Unión por la Patria para discutir sobre financiamiento universitario, Fondo Nacional de Incentivo Docente y jubilaciones.
El 29 de abril se realizó la sesión en la que se discutió hasta el día siguiente la nueva Ley de Bases y el proyecto de Medidas Fiscales Paliativas y Relevantes, más conocido como Paquete Fiscal. Ambos lograron la media sanción y fueron girados al Senado, tras un debate de 29 horas, uno de los más extensos de la historia.
Con la intención de darle un giro a la agenda, la Unión Cívica Radical pidió una sesión el 21 de mayo por los temas de financiamiento universitario y FONID. Ante el anuncio del Gobierno, sobre el incremento en partidas para gastos de funcionamiento de las casas de altos estudios, la realización de la sesión pasó por momentos de dudas. Sin embargo, los radicales dejaron sus internas y bajaron a la reunión que ellos mismos habían pedido. Con aval de UP, la izquierda y otros bloques, se aprobó un emplazamiento a las comisiones de Educación y de Presupuesto y Hacienda para que dictaminen sobre ambos temas.
Tras un consenso entre la oposición más dura y la dialoguista, el 4 de junio se debatió en sesión el proyecto de ley que establece una fórmula de movilidad jubilatoria y recomposición del 8,1% para los haberes de la clase pasiva. La iniciativa tuvo 160 votos positivos, 72 negativos y 8 abstenciones, alcanzando así dos tercios de los votos de los presentes. Por esta media sanción fue que Milei llamó más de una vez “degenerados fiscales” a los legisladores, y también los culpó de la suba del dólar y el riesgo país.
La última sesión en Diputados fue el 27 de junio, cuando en las primeras horas del 28 se sancionaron finalmente la Ley de Bases (147 votos a favor, 107 en contra y 2 abstenciones) y el Paquete Fiscal, aceptándose los cambios de la cámara revisora en el primer caso; mientras que en el segundo, el oficialismo con apoyo de los dialoguistas logró reincorporar cuestiones clave, como la restitución del impuesto a las Ganancias y los cambios en Bienes Personales.
El Senado, con polémica por las dietas y el paso de Posse
Sin contar la sesión preparatoria del 23 de febrero, la Cámara alta tuvo en la primera parte del año 5 sesiones. Aunque intentó postergar al máximo su tratamiento, la vicepresidenta Victoria Villarruel no pudo frenar en el arranque del período ordinario la discusión sobre el mega DNU 70/23, de desregulación de la economía, lo que le valió la molestia desde Casa Rosada, expresada en duro comunicado. El 14 de marzo, el decreto presidencial -que intervino en más de 300 leyes- fue rechazado con 42 votos negativos, 25 afirmativos y 4 abstenciones. Además, en esa jornada se convirtió en ley la reforma de la normativa vinculada a prevención y represión del lavado de activos, y un conjunto de acuerdos internacionales. Pese al impulso del momento, la oposición nunca logró los votos en la Cámara de Diputados para rechazar también el DNU y dejarlo así anulado.
El 18 de abril se realizó una sesión de muy corta duración, pero alto impacto: sin mencionar el tema del expediente incorporado sobre tablas, los senadores aprobaron a mano alzada un aumento de más del doble en sus dietas. El temario de la sesión ordinaria consistía en seis pliegos de embajadores, acuerdos internacionales y una ley para establecer el 31 de octubre de cada año como el Día de las Iglesias Evangélicas.
Doce días antes de irse del Gobierno, Nicolás Posse asistió el 15 de mayo al Senado para brindar el primer informe de gestión. Hasta ahora fue la única vez que un jefe de Gabinete se hizo presente durante el gobierno libertario. Guillermo Francos, hoy en ese cargo, todavía no debutó en sesión informativa.
En un arranque en el que tomaron estado parlamentario los pliegos de los candidatos a la Corte Suprema de Justicia, Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, el Senado celebró el 12 de junio la sesión para aprobar la Ley de Bases y el Paquete Fiscal. En el primer caso, la norma tuvo modificaciones y se dejaron afuera tres privatizaciones (las de Aerolíneas Argentinas, Correo Argentino y RTA), además del capítulo previsional. La votación resultó con un empate 36 a 36 y definió a favor Villarruel. En el caso del Paquete Fiscal, no hubo igualdad de votos, aunque fue aprobada por una diferencia de 37 a 35, pero en la votación en particular se rechazaron los capítulos sobre impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, que luego fueron reincorporados en Diputados.
La última sesión del primer tramo del año en la Cámara alta, antes de entrar al receso invernal, fue la del pasado 4 de julio. Sin éxito, UP intentó el tratamiento del proyecto sobre movilidad jubilatoria. En la jornada se avalaron un paquete de ascensos militares y diplomáticos; se convirtió en ley la declaración del 18 de julio como Día de Duelo Nacional, en conmemoración a las víctimas del atentado a la AMIA; y se aprobó en general un proyecto que endurece penas por el delito de compra y venta de niños -tema en agenda a raíz del caso Loan Danilo Peña-, pero luego fue devuelto a comisión por diferencias en el articulado.
La cargada agenda que viene
En los pasillos del Congreso, el segundo semestre se avecina igual o más intenso que el primero. Y los temas que tiene en mente el oficialismo -ya figuran varios- demandarán de tiempo, un tiempo que a su vez se verá interrumpido cuando ingrese el Presupuesto 2025, la llamada “ley de leyes”, que será el primero en la gestión de Milei y se trata siempre de un proyecto que insume larga discusión. El Poder Ejecutivo ya mandó un adelanto, aunque con pocos números. Cuestiones todavía sin resolución, como el presupuesto universitario y el FONID (la UCR pateó una sesión que había pedido en julio para agosto), sin dudas tomarán relevancia a la hora de debatir el plan de gastos y recursos, al igual que los subsidios al transporte del interior, entre otros varios aspectos, del que nuevo tomarán relevancia los gobernadores.
Por lo pronto, la primera fecha que tiene Diputados para volver a abrir el recinto es el próximo 7 de agosto, día en que se solicitó una sesión para tratar la entrada de tropas extranjeras al territorio nacional; la declaración como “Brigada Heroica” en homenaje y reconocimiento al personal que participó en la Gesta de Malvinas; acuerdos internacionales y dos proyectos del llamado “paquete Bullrich”: la regularización de la tenencia de armas y prórroga del Programa de Entrega Voluntaria y la ampliación del Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a los delitos contra la integridad sexual, para que abarque a todos los delitos.
De los proyectos impulsados desde la cartera de Seguridad también se encuentra la ley antimafias, contra el crimen organizado; una ley sobre resguardo del orden público (protesta social); y otro proyecto en materia de reincidencia, reiterancia, concurso de delitos y unificación de condenas.
Todavía no ingresaron al Parlamento, pero otras iniciativas vinculadas a lo penal fueron anunciadas por el Gobierno: nuevo régimen penal juvenil, con la baja de la edad de imputabilidad de los 16 a los 13 años, y juicio en ausencia.
Por su parte, el flamante ministro de Desregulación y Transformación el Estado, Federico Sturzenegger, ya anunció la llamada “ley de hojarascas”, tendiente a derogar un centenar de leyes que “representan riesgos a la libertad económica, trabas, o son simplemente obsoletas (como las que regulan las carreras de palomas, obligan a trámites imposibles, o promueven la contaminación)”, expresó en cuenta de X. El funcionario ya mantuvo contactos con diputados de la oposición dialoguista sobre esta iniciativa. Además, en entrevistas periodísticas, aseguró que buscará avanzar con capítulos de la Ley de Bases original que quedaron afuera, como los referidos a justicia o educación. Sobre este último ítem destacó que en la Cámara baja ya se haya dictaminado sobre declarar a la educación como servicio esencial, algo que contenía la ley ómnibus.
Es regla que las discusiones electorales se den en años pares, pero éstas nunca resultan sencillas y la consciencia que tenga La Libertad Avanza sobre su condición de minoría será determinante a la hora de ambicionar de más o ceder. Sobre todo porque para proyectos de esta índole se requieren de mayorías absolutas (129 votos en Diputados y 37 en el Senado).
El Gobierno, en cabeza de Francos, planea una reforma electoral, que contenga entre sus puntos algunos temas que quedaron fuera de la Ley de Bases, como la eliminación de las elecciones Primarias, Obligatorias, Simultáneas y Obligatorias (PASO), con otros que son parte de las llamadas “leyes anticasta” que el presidente anunció al abrir el año parlamentario, tales como la eliminación del financiamiento de los partidos políticos con fondos públicos o la prohibición para que condenados en segunda instancia por delitos de corrupción sean candidatos en elecciones. Éste último, más conocido como “Ficha limpia” comenzará su tratamiento en comisiones el 6 de agosto, y es el que más anuencia reúne. Tanto en el caso de las PASO como del financiamiento de los partidos, hay posturas en contra y resistencia dentro de los bloques dialoguistas. La tarea no será fácil. Otra idea que circuló desde Casa Rosada fue la de incluir la baja de la edad para votar.
Mientras tanto, en el Senado duerme el proyecto de boleta única de papel, que LLA tuvo intenciones de tratar en sesiones extraordinarias, más no alcanzó a reunir los 37 votos (en el poroteo hay 36). Las negociaciones para avanzar con la iniciativa que tiene media sanción desde mayo de 2022 podrían reactivarse, a partir de aceptar modificaciones y que vuelva a Diputados. La mayor resistencia está en la rionegrina Mónica Silva, quien presentó su propia propuesta.
Además, la Cámara alta tiene por delante la resolución sobre el proyecto de movilidad jubilatoria, que el oficialismo logró estirar su discusión en comisiones y estaría dispuesto a introducir cambios para frenar el veto anticipado por Milei. Otra tema de los representantes de las provincias serán los pliegos de los candidatos a la Corte, todavía sin fecha de audiencia pública en la Comisión de Acuerdos.