Desde antes de la campaña electoral, Javier Milei, Manuel Adorni y el resto del círculo de La Libertad Avanza repetían hasta el hartazgo que una mejor Argentina era imposible “con los mismos de siempre”, al mismo tiempo que potenciaban el discurso anti-casta como uno de los grandes ejes del liberalismo.
Sin embargo, aquella premisa no llegó a cumplirse siquiera antes del año de gestión. Porque la designación de familiares en el Estado, tan criticada por el -hoy- Gobierno, fue moneda corriente desde que Milei se sentó en el Sillón de Rivadavia.
A punto tal llegó esta situación que, en las últimas horas, el caso de Manuel Adorni se transformó en el paradigma de la casta. “Se armó una pyme en Casa Rosada”, titularon algunos medios como El Destape Web, haciendo referencia a la gran cantidad de designaciones que impulsó el vocero presidencial.
Para comprender la magnitud de la acusación, basta con repasar algunos datos. Adorni está a cargo de la Subsecretaría de Vocería y Comunicación del Gobierno, pero además dirige siete direcciones nacionales, 14 direcciones simples y 16 coordinaciones.
La “pyme” de Manuel Adorni
El vocero presidencial designó a más de 100 personas desde que comenzó el gobierno de La Libertad Avanza. Y si ese número no causa sorpresa, hay algunos datos que son aún más determinantes.
Es que gran parte de la familia Adorni pasó a trabajar en el Estado. Su hermano, su madre y hasta su tía se sumaron a las filas del Gobierno, aún cuando el propio vocero criticó en varias oportunidades este tipo de designaciones.
Si desgranamos los costos de estas designaciones, nos encontramos con un número monstruoso: 300 millones de pesos mensuales.
Para llegar a este número, hay que analizar los 101 contratos nuevos, de los que hay 29 asesores pero también hay directores y coordinadores. “Sus” contratados tienen un recurso mensual de $132.500.000 sin contar adicionales, pero si la cuenta incluye horas extras y otros gastos, alcanzamos el doble de la cifra. Esto se traduce, además, en 3600 millones de pesos anuales para el Estado.
¿Qué tiene a cargo el vocero?
Según recoge El Destape, Adorni maneja siete direcciones generales: Transmisiones Presidenciales; Actividades Presidenciales; Vocería y Comunicación Directa; Comunicación Digital de la Presidencia de la Nación; Planeamiento y Seguimiento; Contenidos Audiovisuales e Imagen Institucional de Gobierno; y Publicidad Oficial.
A eso hay que sumarle catorce direcciones simples: Producción y Difusión de Actos de Gobierno; Realización Audiovisual de la Presidencia de la Nación; Innovación y Nuevas Tecnologías; Comunicación de la Vocería; Operativa de Comunicación Digital de Presidencia de la Nación; Campañas; Información Pública y Enlace; Creativa; Redacción; Comunicación e Imagen Institucional; Producción Audiovisual; Planificación de Medios; Planificación Digital; y Supervisión Operativa.
Si esta cantidad de departamentos suena imponente, el desgranado de todo lo que está bajo el control de Karina Milei es aún más exorbitante.
Los Adorni, ¿una familia de empleados estatales?
Lo cierto es que actualmente, la familia Adorni puede considerarse una familia de empleados estatales. Además de Manuel, vocero presidencial, hay varios casos más para analizar.
Francisco, hermano de Manuel, forma parte del Ministerio de Defensa y fue ascendido el pasado 26 de marzo. Su función es auditar los procedimientos internos de la subsecretaría, con un sueldo de 3 millones de pesos.
Sin embargo, su hermano no es el único. Su madre y su tía formaron parte de la Cámara de Diputados bonaerenses durante varios años, según una investigación que llevó adelante diario Clarín.
Se trata de Silvia y Susana Pais. Silvia, su madre, se jubiló en 2020 pero formó parte de la Legislatura provincial durante varios años. Susana, por su parte, forma parte de la Cámara baja bonaerense como empleada de planta permanente; y además trabaja en el despacho de la diputada provincial Marcela Basualdo.
Clarín señaló en aquella oportunidad que “ambas hermanas, según las fuentes consultadas, trabajaron durante años con legisladores del variopinto armado del peronismo provincial. Antiguos moradores del histórico palacio ubicado en 7 y 53 de la capital provincial, en tanto, las califican como ‘empleadas históricas'”.
En su momento, Adorni fue contactado por el medio bonaerense para aclarar la situación y aseguró que su madre solo trabajó cuatro años, mientras que decidió no responder respecto a su tía.