Javier Milei cumple este martes un año de Gobierno en Argentina y su terapia de choque para reactivar la economía del país, su famosa motosierra, ya está dando resultados porque la inflación está controlada y el déficit público ha desaparecido. Sin embargo, aunque las cuentas están cuadradas, las bondades de la ‘receta Milei’ no acaban de llegar al ciudadano de a pie porque los salarios o el desempleo siguen siendo asignaturas pendientes.
Pero con sus pros y sus contras, los argentinos aprueban la gestión de Milei o, al menos, eso dicen las encuestas. Según la consultora Opina Argentina, el presidente cuenta con un 53% de aprobación después de un año de gobierno y en los mismos parámetros se mueven encuestas realizadas en el último mes por otras consultoras como Aresco, Giacobbe o la Universidad de San Andrés.
La inflación más baja en tres años
Si de algo no se puede acusar a Milei es de haber ocultado la realidad a los argentinos, pues el presidente ya advirtió de que su inyección anarcocapitalista sentaría las bases para la recuperación económica a medio y largo plazo, pero provocaría un empeoramiento de la situación a corto plazo. Y lo cierto es que tras subir al poder, la inflación alcanzó en Argentina un pico del 25,5% en diciembre de 2023, pero rápidamente comenzó a descender hasta alcanzar el 2,7% el pasado mes de octubre, el dato más bajo en los últimos tres años.
Sin embargo, los críticos de Milei recalcan que la inflación interanual se situó en octubre en el 193%, con un aumento del 107% en lo que va de año, lo que mantiene los precios por las nubes. “Hay que romper el relato. El gobierno de Milei en once meses ha acumulado la misma inflación que en los primeros 55 meses del gobierno de Cristina Fernández. En Argentina resulta más caro comprar el diario, un litro de leche, una lata de atún o ir al cine que en países como España”, afirma el economista Alfredo Serrano Mancilla, que fue asesor de Nicolás Maduro en Venezuela y dirige el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG).
Superávit fiscal a costa de reducir prestaciones sociales
La obsesión de Milei era cuadrar las cuentas del Estado y lo ha conseguido al pasar de un déficit primario del 2,9% del PIB en diciembre de 2023, a un superávit del 1,8% el pasado octubre (diferencia entre ingresos y gastos corrientes del Estado). Teniendo en cuenta el pago de intereses de la deuda, el resultado financiero ha pasado en diez meses de un -6,1% a un +0,5% del PIB.
El fact-checking argentino Chequeado indica, eso sí, que ese superávit se ha logrado principalmente a costa de reducir las prestaciones sociales porque un 36,2% del ahorro generado en 2024 se corresponde a recortes en esas partidas, principalmente en jubilaciones y otras pensiones y asignaciones familiares.
“Las medidas que adoptamos fueron difíciles e implicaron el esfuerzo de todos los argentinos. Somos conscientes del gran sacrificio que ha hecho el pueblo argentino, pero ya comenzamos a ver resultados tangibles. En estos doce meses hemos demostrado que un cambio de rumbo en Argentina es posible“, declaró hace dos semanas el jefe de gabinete del gobierno argentino, Guillermo Francos.
Ese ‘sacrificio’ también lo impuso Milei en la administración del Estado, reduciendo a la mitad del número de ministerios y cerrando numerosos organismos oficiales, plantó el medio 20minutos.
Reducción del riesgo país
Tras un año de gobierno, Milei ha logrado que el riesgo país de Argentina haya pasado de 1.923 a 760 puntos básicos, una drástica reducción que ha permitido la llegada de más inversores extranjeros y también facilita la financiación del Estado en los mercados internacionales.
Recesión, pero brotes verdes en el horizonte
El PIB de Argentina se contrajo un 3,4% en el primer semestre del año, golpeado, en parte, por las medidas de austeridad impuestas por el gobierno de Milei, que redujo considerablemente la actividad del sector público. Sin embargo, los analistas consideran que la economía ya ha tocado fondo y ha comenzado a recuperarse en el segundo semestre del año. Un informe de BBVA Research prevé que la economía caerá un 4% este 2024, pero contempla una recuperación del 6% para 2025.
Aumenta la tasa de pobreza
Según el Instituto Nacional de Estadística de Argentina (INDEC), la tasa de pobreza aumentó en el primer semestre del año hasta el 52,9% de la población, afectando ya a casi 25 millones de personas, mientras que antes de la victoria de Milei se situaba en el 41,7%. La eliminación de subsidios y prestaciones sociales, así como la reducción de la actividad en el sector público, han golpeado a amplios sectores de la población.
No obstante, un análisis de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA) refleja que la tasa de pobreza aumentó al 54,8% en el primer trimestre de 2024, pero bajó al 51% en el segundo trimestre y la estimación es que siga reduciéndose.
El paro se mantiene estable
La tasa de paro en Argentina apenas bajó una décima en el segundo trimestre del año para situarse en el 7,6%, pero sigue 1,4 puntos porcentuales por encima de la registrada en el mismo periodo de 2023, cuando era del 6,2%.
Los asalariados, especialmente en el sector público o dependientes del mismo, han sido los más afectados por los ajustes del gobierno, mientras que los autónomos han resistido mejor. Según datos oficiales, desde el inicio de la presidencia de Milei hasta el pasado agosto se perdieron 242.000 empleos asalariados formales, mientras los trabajadores por cuenta propia registrados se incrementaron en 194.000.
En cualquier caso, las cifras de desempleo se mantienen muy lejos del máximo histórico del 24,1% registrado en el segundo trimestre de 2002, tras el colapso económico de 2001.
Los salarios aún no se han recuperado
Los datos del INDEC muestran que los salarios de los trabajadores todavía se encuentran por debajo de los niveles previos a la llegada al poder de Milei: el pasado septiembre eran un 6,8% inferiores a los de noviembre de 2023 (teniendo en cuenta el efecto de la inflación). Eso sí, el hundimiento de los salarios se produjo principalmente al inicio del mandato de Milei porque desde marzo se han ido recuperando progresivamente, con un incremento del 9,8% desde entonces respecto a la media de diciembre (+12% en el sector privados y +5,6% en el público).
Al hilo de lo anterior, el consumo de los hogares cayó un 8,2% en el primer semestre porque el poder adquisitivo de las familias argentinas se ha reducido notablemente. El INDEC también refleja que las ventas de los supermercados se encontraban el pasado mes de septiembre un 10% por debajo de los niveles de noviembre de 2023.