Seguir de cerca la evolución de la
economía brasileña, acelerar los planes de refinanciación de la deuda para
asegurar los pagos de 2009, permitir un incremento suave del dólar (a un rango
de $ 3,30-$ 3,40 a fin de año) y ajustar el gasto vía menores subsidios y
ajustes tarifarios. Estas fueron las principales líneas que se acordaron ayer en
el encuentro que el denominado Comité de Crisis mantuvo en la Casa Rosada
para seguir el impacto en la Argentina de la dura turbulencia internacional.
Pero hubo más: se avanzó con el mecanismo que será
implementado para la repatriación de capitales y se acordó reflotar el Pacto del
Bicentenario, que quedó en la nebulosa tras el conflicto con el campo.
Una alternativa en estudio sobre la repatriación es poner en
marcha un fideicomiso en el que habría que depositar el dinero que ingrese del
exterior. Una parte de los fondos debería utilizarse para inversiones
productivas (ya sea del sector privado u obra pública), pero un porcentaje no
mayor a 30% podría destinarse a la compra de instrumentos financieros. Se trata,
de todas formas, de borradores que aún precisan ser pulidos.
La sorpresa fue la presencia a distancia del ex presidente
Néstor Kirchner que, según se reveló, estuvo vía telefónica durante las casi dos
horas del encuentro. Cual ministro de Economía bis, reiteró el mensaje que había
dejado anteayer al hablar en público: «Tenemos que reforzar los superávit
gemelos y no asustarnos por la caída de los bonos», sintetizó. En la reunión, en
la que no estuvo presente Cristina de Kirchner, participaron el ministro de
Economía, Carlos Fernández; el jefe de Gabinete, Sergio Massa; el presidente del
Banco Central (BCRA), Martín Redrado; el titular de la ANSeS, Amado Boudou; el
secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino; el titular de la AFIP, Claudio Moroni;
y el presidente de la Comisión Nacional de Valores (CNV), Eduardo Hecker.
Allí se consensuó que en cada oportunidad que se presente,
los funcionarios deberán enfatizar la fortaleza de la Argentina y la importancia
de los superávit gemelos para enfrentar la crisis. «No podemos estar todos los
días histéricos por la caída de la soja, que ahora está en baja pero mañana
puede subir. Además, son valores que en promedio siguen por encima de los
niveles que hubo hasta 2007», explicó a este diario uno de los participantes del
encuentro.
Alineamiento
Fernández, Lorenzino y Redrado se alinearán detrás de este
discurso durante los días que pasen en Washington a partir del viernes, donde
participarán de la Asamblea Anual del FMI. Allí procurarán transmitir un mensaje
de tranquilidad para los inversores. Lo más importante será tranquilizarlos
respecto a la comodidad de la Argentina para hacer frente a los vencimientos de
deuda en 2009, sobre todo si se cierra el canje con los «holdouts» y el
refinanciamiento de Préstamos Garantizados. Estos fueron los puntos centrales
del encuentro:
La fuerte devaluación del real en Brasil (el dólar subió más
de 40% en dos meses) es un peligro claro que enfrenta la economía argentina.
Sobre todo porque al entrar en recesión Estados Unidos y Europa, muchos
fabricantes querrán colocar su producción en la Argentina, desplazando a las
industrias locales. El gobierno no dudará en establecer medidas para protegerse,
considerando que el rojo comercial con el país vecino ya supera los u$s 4.000
millones anuales.
La caída de los títulos públicos y consiguiente suba del
riesgo-país no es, en este contexto, responsabilidad del gobierno, por lo que es
poco lo que se puede hacer, salvo transmitir mensajes de tranquilidad a los
inversores. Mañana los bancos que organizan la refinanciación de la deuda en
default presentarán la propuesta ante la SEC, un paso clave para ir
avanzando en la transacción.
En cuanto al dólar, Redrado se ocupó de dar a conocer la
estrategia durante la conferencia organizada por la Amcham (cámara de comercio
argentino-norteamericano). El Central procurará que la suba de la divisa
continúe siendo «administrada», o sea lo más leve posible, en medio de fuertes
devaluaciones de los países vecinos (en particular Brasil, pero también
Uruguay y Chile).
Pablo Wende
Ámbito Financiero