La suerte del dólar en la Argentina está
atada al real en Brasil. Si allá sube, acá también. Los grandes operadores saben
que el gobierno argentino no quiere que el tipo de cambio pierda terreno frente
al real. Ayer, el dólar se calmó y cerró a $ 3,24, porque en ese momento en
Brasil bajaba 3%, a 2,20 reales. Después del cierre del mercado cambiario
argentino, en San Pablo subió a 2,27, y eso puede inducir a un alza hoy. Resta
ver lo que harán los bancos centrales. En las últimas horas hubo constante
comunicación de Martín Redrado con sus pares de Brasil, México y Chile. Hay
una acción coordinada entre los países de la región para evitar bruscas
oscilaciones del tipo de cambio que terminen alimentando una corrida cambiaria.
Pero todo se monitorea diariamente. Las reservas no son ilimitadas, y hay que
utilizar con cuidado el poder de fuego disponible. Brasil tiene u$s 210 mil
millones y sus habitantes no son adictos a cubrirse con la moneda de Estados
Unidos. En la Argentina, ayer, el Central vendió u$s 120 millones para mantener
la divisa en $ 3,24. En el mercado negro, sin necesidad de presentar documentos
ni respetar límites de compras, se vendió a $ 3,31. El dólar tiene un sendero
alcista que será muy gradual, pero la pendiente de ese recorrido estará dada por
los acontecimientos que lleguen desde Nueva York.
Lo que viene
El dólar al público en las casas de cambio se mantuvo aquí
estable a $ 3,24. Quizá haya sido lo único que no cambió de un día para otro en
el tembladeral financiero.
El precio del dólar se mantuvo en $ 3,24 para la venta en las
casas de cambio y es la única buena noticia que pudo dar ayer la economía. Para
mantenerlo en ese nivel, el Banco Central tuvo que vender u$s 120 millones.
En la menor volatilidad del dólar tuvo que ver lo que pasó en
Brasil con el real. Hoy las dos monedas están relacionadas como nunca. El dólar
en Brasil a las 15, cuando cierra el mercado local, había bajado 3,25% y cerró a
2,20 reales, gracias a la intervención oficial.
Esa calma mejoró la actitud de los grandes inversores que
miran el nivel de aquella divisa porque saben que el gobierno local no quiere
perder terreno. Si el real se devalúa, el peso también se devaluará. La
presión de empresarios y CGT, en ese sentido, es muy fuerte.
Los que no miran al real son los pequeños y medianos
ahorristas. Ellos se cubren con dólares. Por eso el monto de negocios en el MEC,
el mercado de los corredores de cambio que abastece a una parte de la plaza
minorista, negoció uno de los volúmenes más altos del año: u$s 293 millones.
Marginal
Los que iban al mercado marginal de la mano de los
«arbolitos» o se presentaban en alguna «cueva» pagaban al dólar a $ 3,31. En el
Forex-MAE, el principal mercado mayorista, donde negocian los bancos, los
negocios tuvieron menos tensión que el día anterior. De hecho, sus operaciones
bajaron a u$s 424 millones, contra más de u$s 600 millones del miércoles.
El dólar mayorista abrió a $ 3,2210. Una hora después, valía
$ 3,2270 y a las 14.30 tocó el máximo de $ 3,2330 para calmarse y terminar el
día a $ 3,2310.
Pero después de las 15, cuando cerró el mercado local, el
dólar en Brasil siguió operandoy de 2,20 reales subió a 2,27, el mismo nivel que
el día anterior. Brasil tiene u$s 200 mil millones de reservas, una cantidad
suficiente para cuidar su moneda. Además, los brasileños no son adictos a
cubrirse con dólares. Los que están más activos en este mercado son los
fondos de inversión, que quieren salir de todas las posiciones en bonos y
acciones que abrieron en ese país y llevarse los dólares.
En el OCT-MAE, el mercado de futuros, se negoció 30% menos
que el miércoles. Las operaciones sumaron u$s 204 millones, con una activa
participación del Central, que vendió u$s 130 millones en los distintos fines de
mes. A pesar de la intervención subieron casi todas las posiciones, a excepción
de fin de noviembre, que bajó 0,06% para cerrar a $ 3,2630.
Fin de octubre vale ahora $ 3,2375 (+0,23%) y fin de año, $
3,2960 (+0,33%). Los plazos más lejanos fueron los que más subieron. El dólar al
31 de agosto de 2009 vale $ 3,4704 (+1,11%) y fin de setiembre, $ 3,4926
(+1,22%). En el exterior, esta posición cotizó a $ 4,22, subió 3,22% comparado
con el día anterior.
El dólar hoy puede tener otra suba en la apertura, siguiendo
la evolución del real. Todo lo que pase en la plaza local tendrá que ver con lo
que haga Brasil, y esto es una ayuda. Los presidentes de los dos bancos
centrales hablan diariamente para coordinar estrategias.
Brasil, el principal cliente de la Argentina (compra 80% de
los autos que se fabrican en el país), puede convertirse en el gran vendedor con
este tipo de cambio más alto. Con una industria eficiente y un mercado interno
encogido por la crisis, tiene un arma temible en el nuevo valor del real para
inundar a la Argentina con sus productos. La industria textil, de
electrodomésticos y la automotriz serían las que más padecerían esta situación.
Redacción de Tribuna
Fuente: Ámbito Financiero