En virtud de la campaña que lleva adelante el Gobierno porteño para reducir el índice de accidentes en la vía pública, el jueves pasado el ministro de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo Montenegro, entregó los primeros 20 cascos a motociclistas que realizaron el curso de seguridad vial.
    Informó que, gracias a las campañas de concientización y los operativos de prevención, "en el primer trimestre de este año hubo una importante reducción en los accidentes de tránsito de motociclistas y consecuentemente de víctimas fatales con respecto al mismo período del año anterior".
    Tales declaraciones fueron efectuadas dentro del marco" del primer canje gratuito de cascos obsoletos o dañados por nuevos que se ajustan a las normativas internacionales de seguridad para motociclistas". Así es como, en primera instancia, el Gobierno porteño permutará 800 cascos. Explicó el ministro Montenegro que, para acceder a los cascos en forma gratuita, los beneficiarios deben realizar un curso de seguridad vial especialmente diseñado para motocicilistas y dictado por profesionales en la materia.
    El curso dura dos horas y finaliza con la entrega de una guía de consejos útiles de autocuidado en la vía pública, más un casco nuevo, homologado y provisto por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires contra entrega del viejo —dañado o no— reglamentario. Respecto a la iniciativa, destacó finalmente que la misma es impulsada por el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires en forma complementaria con la campaña "Es un segundo, usa casco o te quitamos la moto". Por otra parte, el objetivo "es que todos colaboremos para mejorar la seguridad vial y reducir los índices de accidentes".
    Los motociclistas deben tomar conciencia y el Gobierno brindar seguridad. Para acceder al canje, los beneficiarios deberán acreditar su trabajo con la presentación de la licencia correspondiente, un certificado de cobertura de categoría comercial y un recibo de sueldo.
    La Dirección de Seguridad Vial, enviará una carta a las familias de cada uno de los inscriptos, con el siguiente texto :“Si usted tiene un amigo, un familiar, un empleado un conocido que use moto o ciclomotor: Por favor, ayúdenos a cuidarlo y dígale 'usá casco'.
    Recuérdele que: Todos los días hay motociclistas heridos, a veces muertos. El casco reduce mucho la gravedad de las lesiones. También salva vidas. Para eso, tiene que ser de buena calidad y estar bien puesto. En el codo no sirve, como vincha tampoco. Si está desatado, puede salirse durante una caída.
    La seguridad no depende sólo de cómo maneja cada uno. Los errores de los demás también influyen. Hay que usarlo aun yendo despacio. Mientras la persona está sentada en la moto, se puede caer. Aún estando detenida. Hay que ponerse el casco y atarlo ANTES de subir. Para sacárselo, primero hay que bajarse.
    No pretenda que el motociclista se lo agradezca ahora, a muchos no les gustan los consejos. Pero es probable que algún día entienda su preocupación. Ministerio de Justicia y Seguridad GCBA”.

Graciela Catalán Álvarez