Parecería ser que en época de campaña todo
vale, especialmente, mentir más de lo que nos tiene acostumbrado el oficialismo.
Es evidente que el Gobierno está en problemas, y como lo
viene haciendo desde que asumieron, y contrariamente a lo que dice la
publicidad oficial, “nosotros hacemos”, lo único que hacen es hablar, mentir,
hablar, y mentir. Tanto es lo que miente el oficialismo, que daría toda la
sensación de que estamos gobernados por autistas.
Pero vayamos a hechos —o mejor dicho a frases— concretas de
logros que existen sólo en el imaginario kirchnerista: “En la Argentina no
hay crisis ganadera”. Esta frase la dijo el Secretario de Agricultura,
Carlos Cheppi, quien aseguró este martes que la ganadería en el país exhibe
crecimiento y negó que haya crisis en el sector. Pero además afirmó que “es una
gran mentira decir que el sector esté estancado, le han quitado 14 millones de
hectáreas para dedicarlas a la agricultura y tenemos la misma cantidad de
animales”.
Es lamentable que un funcionario diga semejante burrada,
cuando en realidad, ocurre todo lo contrario.
Tal es así que, al mismo tiempo, a través de un comunicado,
Carbap denunció una alarmante pérdida de empleos en el campo a lo largo
de los distintos eslabones de la cadena agroindustrial y estimó que es “como
consecuencia de las desacertadas políticas económicas llevadas adelante por el
gobierno nacional a través de su modelo antiproductivo y antiexportador el cual
viene provocando crecientes niveles de recesión y desempleo, profundizado en el
interior del país”.
Pero evidentemente parece ser que el Secretario de
Agricultura tampoco está enterado de que por primera vez, desde 1890, el país
dejaría de exportar trigo, bajó la producción de la carne, la venta de
maquinaria agrícola se desplomó el 70 por ciento en lo que va del año y se
cerraron, en poco más de un año, alrededor de 6.000 tambos.
Pero no sólo eso, puesto que La Serenísima, la
principal industria láctea del país que controla Mastellone Hnos. SA,
confirmó que abrió una negociación con la multinacional Danone, ya que
posee una deuda de 230 millones de dólares, al mismo tiempo que el gobierno
nacional adeudaría a la compañía láctea el pago de subsidios por un monto de 90
millones de pesos por acuerdos de precios vencidos.
De todas maneras, la supuesta abogada Cristina Fernández,
quien hace las veces de Presidente de la Nación, en uno de esos actos a los que
nos tienen acostumbrados, esta vez en la colocación de la tapa al recipiente de
presión del reactor de la Central Nuclear Atucha II dijo que, a pesar de la
crisis financiera internacional “estamos llevándola muy bien”.
Francamente, parecería que la señora Cristina estaría
gobernando otro país, y que tampoco se enteró del rotundo fracaso de todos los
planes anticrisis que lanzó a fines del año pasado.
Siguiendo con esta secuencia de mentiras oficialistas, que
pretenden hacernos creer que estamos en el país de las maravillas —así como
durante el gobierno de Carlos Menem nos querían hacer creer que estábamos en el
primer mundo—, el abanderado de los mentirosos, Guillermo Moreno, apareció
diciendo que, a pesar de la crisis, y contrariamente a lo que ocurre en otros
países, si bien se redujo el ingreso de turistas a nuestro país debido a la
crisis internacional, curiosamente, aumentaron los viajes de argentinos al
exterior. Eso sí, este fenómeno, curiosamente se dio en el mes de abril, mes
que coincidió con semana santa. Por eso abril es el único mes donde se
registra un incremento respecto al mismo mes del año anterior. Pero claro, eso
no se dice, sino, no se podría engañar a la población.
Por supuesto y, como no podía ser de otra manera, el primer
puesto es para nuestro "presidente de facto", Néstor Kirchner, quien parece
estar en campaña también en otro país, tal vez, el mismo país imaginario que
supuestamente gobierna Cristina, ya que inventa, literalmente, fantasmas, y
repite, sistemáticamente, frases tales como: “Si no ganamos nosotros nos espera
el caos”, “Somos nosotros o la derecha”, “Los otros pretenden llevarnos al
pasado”, “Pretenden volver a instalar el modelo neoliberal”.
Pero como, ni Néstor, ni ningún integrante del Frente para
la Victoria se animan a debatir absolutamente con nadie, —y mucho menos se
animan a dar entrevistas a periodistas y/o medios que no responden a sus
intereses—, es una verdadera lástima que nadie le pueda avisar que absolutamente
ningún candidato propuso volver al caos, ese caos que ellos mismos pregonan y
profesan.
Ningún candidato dijo representar a la derecha, y
justamente quien más se asemeja a la derecha fascista y autoritaria es este
gobierno.
Ningún candidato propuso, en ningún momento, volver al
pasado, como lo hace NK permanentemente.
Y por último, absolutamente ningún candidato propuso en
ningún momento instalar el modelo “neoliberal”, el mismo del cual formó parte el
ex mandatario en los denostados 90. Ese modelo que dirigía Domingo Cavallo del
cual NK era su alumno preferido y que le permitió recibir por parte de Carlos
Menem —de la “entrega” de YPF— las regalías que luego se convirtieron en los ya
emblemáticos fondos desaparecidos de Santa Cruz.
Por todas estas cosas, que no son conjeturas y mucho menos
apreciaciones personales o subjetivas, sino datos y hechos concretos, parecería
ser que Néstor Kirchner es un perfecto autista o, decididamente, está gobernando
otro país.
Pablo Dócimo