Lamentable, triste. La Nación del 30/01/10, publicó que en el partido de Patagones, como consecuencia de la sequía crónica, son constantes las nubes de tierra que convierten el día en noche. También se publicó que el Gobernador en ejercicio, estaba esquiando en los Alpes, “sin nubes de tierra ni problemas que haya dejado sin solución”. Esas condiciones casi inhóspitas no son de ahora, pero los distintos gobiernos provinciales, incluyendo el actual y los políticos de siempre, ni siquiera han comentado proyectos para solucionar el problema.
No pueden argumentar que ello es ineluctable, la solución es la forestación, como los israelíes transformaron su desierto y sin ir tan lejos lo hizo Gesell en el partido que lleva su nombre. Estas son las obras de infraestructura y no las demagógicas que buscan votos en el gran Buenos Aires. Las condiciones históricas que dieron origen a los límites provinciales, no eran las de la Argentina de hoy, es hora de ir pensando en divisiones regionales, sino seguiremos con los funcionarios y políticos concentrados en el conurbano bonaerense, ignorando problemas como los de Patagones.