Acreditación, validación, integración y transnacionalización de los estudios superiores y universitarios, demandan estar cada vez más presentes en las mesas de los funcionarios educativos.
La Argentina firmó en los últimos tres años acuerdos de reconocimiento de titulaciones universitarias con Chile y Brasil, pero aún resta mucho camino por andar entre los países de latinoamericanos, del Caribe, España y Portugal, a fin de facilitar la movilidad e inserción laboral de los argentinos y extranjeros.
Como ejemplo de esta complejidad que rige hasta hoy, tras muchas reuniones celebradas del Mercosur educativo, basta con observar la infinidad de trámites, certificaciones, exámenes y equivalencias que son requeridas en la Argentina a un egresado para homologar su titulo e insertarse en el sistema productivo.
Padecimientos similares sufren profesionales de nuestra Nación a la hora de querer ingresar en sociedades extranjeras.
Problemática expuesta
Esta problemática sentó días pasados en Buenos Aires, a los titulares del área Educación Superior de Argentina, América Latina y España y Portugal en un seminario organizado por el Consejo Interuniversitario Iberoamericano (CUI), y a algunos legisladores de la región, entre otros a la argentina Blanca Osuna, y que apuntó a elaborar un "acta marco" de validación de títulos y convenios bilaterales".
La idea es que se trate en la Cumbre de Ministros de Educación de Iberoamérica, que sesionará en Buenos Aires y sus conclusiones llevarlas a la Cumbre de presidentes y Jefes de Estado que sesionará en diciembre, en Mar del Plata.
El secretario de Políticas Universitarias nacional, Alberto Dibbern, adelantó a DYN que en diciembre "se firmarán convenios marco con España, México, Colombia y Chile para carreras que estén acreditadas por agencias nacionales", de esos países.
En la Argentina la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU), es el organismo o agencia que avala o rechaza la calidad de las carreras que se dictan o se crean, y en ese sentido Dibbern destacó que aquí hubo "una fuerte inversión en la acreditación de los estándares y en las condiciones en que dictan las carreras".
Por ese proceso ya pasaron en el país las carreras de Medicina, todas las Ingenierías, Agronomía, Farmacia y Bioquímica, Veterinaria y Arquitectura", también por evaluadores externos a la CONEAU.
El director del Instituto de Educación Superior para América Latina (IESALC), de UNESCO, el brasileño José Renato Carvalho diferenció: "Equivalencia no es igualdad de contenidos, sino que es el reconocimiento de un valor formativo similar".
"En esa línea —dijo— se plantean nuevas alternativas para finalizar los procesos iniciados bajo el principio de la cooperación e integración académica regional".
El camino a la "internacionalización" de la educación superior iberoamericana es un largo camino a recorrer, en el que habrá que sortear debilidades y fortalezas entre naciones y carreras, retos y oportunidades.
Entre ellas, los funcionarios apuntaron a "encauzar ordenadamente" la movilidad laboral, a la que vincularon "íntimamente" con el reconocimiento de títulos. Ello dijeron permitirá incrementar la productividad y la competitividad y será "un factor de crecimiento colectivo".
Laura Hojman
DyN