Recrudeció la guerra que desde 2008 vienen librando, con distintos períodos de intensidad, el Gobierno y el Grupo Clarín.
En los últimos días, la Justicia difundió fallos sobre controversias entre ambas partes: algunos fueron favorables a Clarín (el de Papel Prensa SA) y otros al oficialismo (el de la licencia de Fibertel y el de la grilla del cable).
En tanto, una protesta de ex delegados de la imprenta AGR (de Clarín) fue presentada por el diario como una ofensiva del Gobierno y del sindicato de Camioneros contra el holding. Para ello publicó fotos del canciller Héctor Timerman dialogando con los trabajadores en conflicto.
También hubo alusiones críticas desde el oficialismo. El propio matutino consignó ayer las críticas lanzadas por la presidenta Cristina Fernández, por la ministra de Seguridad, Nilda Garré (que en su conferencia de prensa mostró la tapa del matutino), y por el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.
Clarín, de todas formas, no se amilana. Su editor general, Ricardo Kirschbaum, firmó el domingo una columna, a propósito del conflicto en AGR, en la que vertió muy duras críticas al accionar oficial.
En un reportaje con el diario Perfil, Héctor Magnetto anunció que recurrirá a la Justicia para intentar impedir que se apliquen “un montón de artículos”.
En tanto, Marcelo Bonelli publicó información sobre la saga del “espionaje” por parte del ministro Amado Boudou. La segunda nota coincidió con el lanzamiento del titular de Hacienda a la jefatura de Gobierno porteño. Para completar el regreso de las hostilidades, Boudou anunció su postulación con fuertes críticas a Clarín.
Fuente: DsD
Redacción de Tribuna de Periodistas