Hugo Moyano intenta despegarse de la titularidad de la firma de recolección de residuos Covelia en las últimas semanas, luego de que la justicia suiza requiriera, vía exhorto, datos concretos sobre este tema en el marco de un expediente que investiga lavado de dinero.
Tribuna de Periodistas ha mostrado los vínculos de Moyano con esa empresa en más de una oportunidad y ha puesto el foco sobre la presión que aliados al Camionero han efectuado para que los municipios contrataran sus servicios.
Ahora, ha aparecido una nueva pista en la provincia de Córdoba de acuerdo a una nota publicada hoy por diario Clarín. Allí, se asegura que la empresa municipal Córdoba Recicla Sociedad del Estado (CRESE) “fue creada para que la maneje el gremio de los camioneros como denuncia el juecista Juan Pablo Quinteros.”
Este último le contó a Clarín que “Giacomino cada vez que regresaba de Buenos Aires decía aturdido: “Néstor (Kirchner) y De Vido me dicen que el tema de la basura lo arregle con la empresa de Moyano . Después nos enteramos que la empresa era Covelia”.
Pero Covelia no pudo entrar porque se cayó la nueva licitación. En octubre de 2008 se dio la última prórroga del contrato por 90 días a Cliba —del Grupo Roggio— por lo cual, los 1.100 empleados debían ser indemnizados por 37 millones de pesos, como reclamaba el Sindicato Único de Recolectores de Basura de Córdoba (SURBAC), que nacionalmente responde a la Federación de Camioneros de Moyano.
“Entonces Cliba le exigió a Giacomino que le pague 72 millones de pesos que acumulaba de deuda, pero que el municipio no podía afrentar”, asegura Clarín.
“Ahí vino Moyano y a través de una cesión de crédito de Cliba a la Federación de Camioneros, por 44 millones de pesos, paga las indemnizaciones de los empleados, quienes fueron incorporados a la empresa municipal CRESE, que les reconoció la antigüedad. Luego Moyano hace un convenio con la Municipalidad de Córdoba para el pago de este préstamo y su gremio embolsó en seis meses 6 millones de pesos de interés, un verdadero atropello”, disparó Quinteros.
El escándalo recién empieza y promete llevarse consigo a varios referentes de la política, como el intendente de Córdoba, el kirchnerista Daniel Giacomino, quien permitió que este negociado ocurriera en esa provincia.
También puede salpicar aún más alto, ojo a los desprevenidos.