La relación entre el gobierno de Cristina Fernández y los industriales de la UIA alcanzó el punto más alto de sintonía esta noche, en el marco de la celebración del Día de la Industria realizado en Tecnópolis.

 "Es la primera vez que cuando me toca hablar tras un discurso no tengo nada que responder", elogió la Presidenta al titular de la UIA, José Ignacio de Mendiguren, quien minutos antes se había deshecho en aprobaciones hacia los "logros del modelo" que Cristina encabeza.

 El sector empresario se mostró así más que entusiasta ante una Presidenta que fue acompañada por todo su gabinete el gran evento de la industria.

 El rotundo triunfo en las elecciones primarias logrado por Cristina, con más del 50 por ciento de los votos, pareció terminar de alinear los planetas en un mundo empresario que espera un Estado que continúe aportando fondos para financiamiento barato e inversión.

 En varias de las mesas servidas en el megapredio de Villa Martelli se pudo ver no sólo a industriales, sino también a dirigentes empresarios enfrentados con el gobierno, como el titular de la Sociedad Rural, Hugo Biolcati, quien asistió como gentileza por pertenecer al Grupo de los 6, que también integran la UIA, la Cámara de la Construcción y la Bolsa, entre otras entidades.

 "Tenemos que ser lo suficientemente inteligentes para no arruinar lo que hemos construido", les recordó Cristina a los muchos empresarios reunidos por primera vez en mucho tiempo bajo el mismo techo.

 Tan contenta estaba la Presidenta que hasta se permitió apelar a un recurso futbolero, al señalar que el crecimiento debe ser "paso a paso", como alguna vez dijo el técnico Mostaza Merlo.

 Y el sector privado pareció decidido a recoger el guante, pensando tal vez en que la elección del 23 de octubre será, como todo indica, finalmente un trámite.

José Calero
NA