Dicen los pocos que la frecuentan que la indicación no fue explícita, pero que bajó con claridad a los jugadores, a tal punto que todos entendieron lo mismo. La Presidenta, de ella se trata, ya trazó su estrategia para los próximos años en territorio bonaerense.
Según comentó a Noticias Argentinas uno de esos “jugadores”, Cristina dividió al oficialismo de la provincia de Buenos Aires en dos grupos de tres "players".
En el primero de ellos ubicó a Daniel Scioli, Florencio Randazzo y al recientemente "recuperado" Felipe Solá.
En el segundo equipo puso al cristinismo más puro y le agregó un toque bonaerense. A la cabeza de este grupo aparece el ministro-candidato Amado Boudou, en compañía de Gabriel Mariotto y de Julián Domínguez, hoy ministro pero con futuro en la Cámara de Diputados desde el 10 de diciembre.
La estrategia presidencial ya se está comenzando a notar en los viajes que hacen los "jugadores": Boudou siempre aparece junto a Diego Bossio —titular de Anses— y en muchas ocasiones junto a Domínguez y a Mariotto, pero casi nunca con Scioli y menos con Randazzo, el ministro del Interior.
Pese a que algunos de estos "jugadores" se toman en serio esta incipiente contienda interna, la presidenta no tendría por el momento la intención de "dividir para reinar", sino la de tener a mano dos alternativas que le permitan tener margen a la hora de tomar una decisión de trascendencia.
Ya se sabe que el gobernador Scioli aspira a la Presidencia para 2015 y que Cristina prepara a Boudou posiblemente para la provincia de Buenos Aires. Pero como el devenir de la política nunca está asegurado y menos a tanto tiempo de distancia, la Presidenta ya marcó la cancha del "partido bonaerense".
(Fuente NA)
Redacción de Tribuna de Periodistas