Una melena rubia activó las alarmas en la Casa Rosada el viernes por la tarde. Pero no se trataba de ninguna mujer, sino de un hombre.
Era el ex futbolista Claudio Paul Caniggia, que cruzó raudamente el Patio de las Palmeras de la sede de Gobierno e ingresó al despacho del secretario Legal y Técnico, Carlos Zannini, donde permaneció durante más de una hora.
Las elucubraciones apuntaron al problema que su mujer Mariana Nannis tuvo con la AFIP hace un par de semanas con el ingreso de divisas desde el exterior.
"Vine con mi amigo Fabián Fancioni para arreglar unas actividades deportivas en Córdoba", se limitó a comentar Caniggia sobre su sorpresiva visita.
La presencia del ex jugador alteró la normal vida en la Casa de Gobierno, ya que empleados de las oficinas cercanos se acercaron a la entrada de ese despacho para tratar de sacarse una foto con el ex delantero de Boca, River y la Selección nacional.
Fancioni es un diputado nacional por la provincia de Córdoba, que está bien catalogado por la presidenta Cristina Kirchner.
El pasado de Despouy
Muchos políticos tienen un pasado poco conocido, pero nadie hubiera dicho que, con su estilo sobrio y discreto, el titular de la Auditoría General de la Nación, Leandro Despouy, haya sido... "¡modelo en Francia!
"En mis primeros tres años de exilio en Francia trabajé cómo modelo publicitario posando para las revistas especializadas de moda para se hicieran los diseños. Pasé por todas las marcas", reveló Despouy.
El dirigente radical, oriundo de San Luis y exiliado en Francia entre 1975 y 1983, durante el terrorismo de Estado, agregó que en París se movía en el ambiente de la revista Elle hasta que consiguió trabajo en la Unesco. "El sistema de la moda no es tan snob como se presenta", sorprendió el funcionario.
El destrato de Larroque
El líder de la agrupación kirchnerista La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque, prefiere no hablar con los periodistas, menos que menos si trabajan en algún medio crítico al Gobierno. Eso dejó en claro al participar en Jujuy del lanzamiento de "Unidos y Organizados" junto a la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala.
Durante una charla con periodistas de varios medios, Larroque notó que allí había un corresponsal de un matutino porteño enfrentado a la Casa Rosada, por lo que le pidió "amablemente" que se retirara: "Sus jefes son golpistas y cuando accedí a hablarles, no tuve buenas experiencias", justificó.
Pero la salida del periodista fue reprochada por sus colegas y, además, intervino un diputado provincial conocido de ambos que logró que el dirigente de la agrupación juvenil reflexionara: poco después, Larroque buscó al trabajador de prensa expulsado y con un abrazo le pidió disculpas.
Agencia NA y Redacción de TDP
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