El correo electrónico llegó a la bandeja de mails de Tribuna de Periodistas más de veinte veces en los últimos tres días. Allí se habla de una curiosa trama, donde, “según Información de Inteligencia militar argentina”, el viernes 9 de noviembre habría arribado “al Puerto de Buenos Aires un Barco de PVDSA Petrolero Venezolano cargado con armas para la Insurgencia kirchnerista”.

Según el mensaje, “el presidente venezolano Hugo Chávez envió a las Milicias Insurgentes Terroristas de Kirchner (sic) siete containers con 50.000 Rifles AK47, 10.000 Granadas y 10.000 cohetes anti-tanque que desembarcaron en el Puerto de Buenos Aires pasando libremente el Control de Aduana y fueron llevados en camiones presumiblemente a un refugio Estancia del Campo Argentino de Benavidez, propiedad de un servidor público kirchnerista”.

Más adelante, el mismo mail alerta que se trata de información de inteligencia militar que "llevará al presidente venezolano Hugo Chávez y la presidenta Argentina Cristina Kirchner a compadecer Judicialmente ante La Corte Suprema Argentina y Tribunales Internacionales bajo Cargos Código Penal y Constitución Nacional incluyéndose leyes internacionales de tráfico de armas, sedisión (sic), terrorismo, traición a la patria y acto de guerra hacia la República Argentina".

Tan explosiva declaración se sustenta en que supuestamente miembros de inteligencia militar harían a futuro "la denuncia correspondiente en La Corte Suprema Nacional", luego de haber fotografiado "el desembarco y efectuó el seguimiento del destino de los siete containers de armas de guerra".

Más allá de lo poco creíble que suena tan disparatada trama, hay errores de todo tipo, tanto a nivel conceptual como a nivel ortográfico. A su vez, las pocas precisiones que podrían ser aportadas, brillan por su ausencia. Por ejemplo, ¿quién es el funcionario que tiene campos en Benavidez donde se habrían llevado esas armas? ¿Sabrán los que difunden ese mail que la "Estancia del Campo Argentino" de Benavidez que aparece en la trama es un lugar que no existe? ¿Por qué no hay fotos de las armas, si supuestamente existen?

Lo único real que se menciona allí es el arribo de un barco petrolero, que efectivamente traía combustible, no armas. La llegada de ese tipo de naves es algo que ocurre todo el tiempo, no solo lo hace PDVSA sino también otras empresas del mismo rubro.

Todos los chequeos que llevó adelante TDP arrojaron resultados negativos. No existe disparate más grande que el que circula en estas horas por Internet. Hay fuentes de información que directamente se mofaron de este periodista por la mera consulta.

No hacía falta la verificación periodística, aunque igual se hizo. No era necesaria porque es poco creíble una trama como la descripta. A pesar de eso, muchos han creído en lo asegurado por el mail arriba descripto y hasta lo han publicado en diversos blogs.

En estos momentos, en la mañana de este miércoles, han llegado unas 25 consultas a través de la cuenta de Twitter y Facebook de TDP. Todos siguen preguntando por la veracidad de esta leyenda urbana.

Esa actitud de credulidad extrema a lo mejor sirva para explicar cómo y por qué la sociedad argentina sigue siendo tan pasible a las estafas de todo tipo, especialmente las que llevan adelante los políticos, no solo del kirchnerismo, sino de otros partidos también.

Diego Golberg
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