Sería inminente la llegada de Cristian Ritondo al Ministerio de Seguridad porteño. El alcalde Mauricio Macri no le tiene mucha confianza en la Legislatura, desconfía de los “armados” barriales de Ritondo y de su condición de peronista, además, en la disputa del sector, ya se decidió hace tiempo por el tándem Diego Santilli y Rogelio Frigerio (n) dos personajes con mejor cámara de televisión, más amenos para las tertulias de la tarde en una futura TV que se espera mucho menos “contestataria” y cada día más dependiente de la propaganda y recursos cristinistas.

El actual mandamás, el fiscal Guillermo Montenegro, tiene la orden de ir a "pelear" la intendencia de San Isidro, un distrito bastante difícil. El discurso para adentro y para abajo, es imitar el ejemplo de Néstor Grindetti, con buena performance en Lanús. No lo convence, pero es lo que le toca, el juego que tendrá que jugar.

Otro que empieza a sonar es Daniel Angellici, por manejar el Club Boca y la "pesada" de la "12", es un radical movedizo, que viene del sector del “Coty” Nosiglia, y tiene roce con todos, también con los K, demasiadas condiciones que a Macri no le gustan, pero se lo tiene que aguantar por el contrario con peso específico propio, es muy probable que lo ponga bien al lado, para poder controlarlo mejor.

Desde las filas "Proístas" saben que si no hacen una buena elección en 2013 en el 1er. cordón del GBA, no tienen chance electoral, o, en su caso, arreglo con sectores del PJ disidente en condiciones de negociación decentes, ello, para el cierre de quien llegue con chances al 2015. Es que en eso se convirtió la vía de la oposición, una virtual espera y un “juego de la silla”. La expectativa de hecatombe económica está más cerca, muchos la visualizan posible, pero no está tan claro si los beneficiarios serán los opositores o algún grupo de filo kirchneristas que logren dar la estocada al resto: por ejemplo Sergio Massa, con quien ninguno dejó de reunirse, en público o en privado.

Volviendo a Ritondo, su crecimiento preocupaba tanto a Larreta como a los otros "popes": lo mandaron a Militar a La Matanza, que es lo mismo que mandarte en la sonda Mars sin oxigeno...

Políticas “hacia adentro”

Por otra parte, la orden de Mauricio Macri, un intendente cada vez más solo en las decisiones (no confía en nada ni en nadie) es que no quiere "grupos" descentrados del núcleo duro original del PRO (Léase Larreta, Grindetti, etc.) y está cansado de la falta de imaginación y crecimiento de los tantos que fueron beneficiados con cargos en la Legislatura.

Otra alternativa que avanza fuerte es PROA (radicales del PRO) agrupación interna de no competencia, con la cual se neutraliza a los radicales. La idea de PROA es sumar a la militancia (trasvasarla desde la UCR hacia el PRO, con "paraguas") Uno de los que aparece casi pasando es Andrés Delich, hay una serie de radicales que estan "fuera" de la torta desde hace mucho, que no les cabe ser K (así como buena parte de los cristinistas ya son radicales) Esta táctica también es para neutralizar a Michetti, una radical no militante en los sectores tradicionales de la UCR alfonsinista, que siempre amenaza con romper, pero que en realidad no tiene conqué romper, y tampoco logra un crecimiento

La relación amor-odio entre Macri y Michetti proviene de su peso electoral específico: mide bien. Ello la hunde en una constante candidatura a “lo que sea”, todos la quieren en todos lados, eso sí, sola, que nunca se corte sola o forme algún tipo de agrupamiento: organización o articulación —esta última más "progre"— es la palabra "prohibida" tanto en el PRO como en el discurso de cierto ex presidente fallecido que padecía de estrabismo…

Es muy probable que Mauricio Macri termine inclinándose por un primer apoyo por María Eugenia Vidal, la actual “vice jefa” apoyo que podría costarle la candidatura, dado lo precoz de la misma. Otros opinan que tiene capacidad y diálogo directo con Macri.

Lo que podría ayudar a Vidal y sus amigos del PRO es la desbandada política porteña, anarquizada en un FpV desquiciado, el PJ no existe más en el distrito. el resto del “arco progre” aparece segmentado en 3 o 4 partes, está la gente de Pino Solanas, mide 5%... los de Binner, miden 5%... Ibarra, mide 5%... 4, 5, 6 sectores que aspiran a ser “mayoristas” y en realidad son pequeñísimas bandas de 50 o 60 militantes aburguesados de un distrito dilapidador de recursos como ningún otro… La denominada “militancia porteña llama a asombro a los mismos “progres” de otros lares, que ven como son siempre los mismos 4 o 5 que medran sobre las sobras que el oficialismo PRO deja caer del poder. Un ejemplo de ello fueron los últimos acuerdos interpartidarios en los cuales se regaló la denominada “Isla Demarchi” al consorcio inmobiliario manejado por IRSA, del rabino Eduardo Elzstain, un aliado K de la primera hora.

Buenos Aires “La Provincia”, los PRO y las “Alianzas”

Respecto de las "Alianzas" a considerar, el que figura primero es Francisco De Narváez, un aliado potencial, aún sin chances, pero necesario al no tener los PRO aliados actuales, que sirvan a fin de emprender una campaña y una política de alianzas súper estructurales en la Provincia de Buenos Aires, un distrito enorme trazado de una diversidad política que muy pocos conocen y menos aún, manejan.

Por otra parte, es una realidad innegable que hay que poner mucho dinero para la campaña en La Provincia, cosa que a los oficialismos sciolista y el kirchnerismo no los tiene si sueño, pero que a las otras fuerzas políticas no les resulta indiferentes, saben que será muy difícil un triunfo, aún una buena chance, sin alguna frustración económica grave, o algún hecho que vuelque la suerte en contra del ex motonauta.

Por lo antedicho el kirchnerismo tampoco lo apura a scioli, el que se apuró a decir que el "50%" de los cargos legislativos, sabe que sin esos cargos no solo le resultará imposible gobernar otros 2 años, sino, se quebraría definitivamente sus chances, son los votos que deciden la "no-reforma" constitucional para luego de diciembre de 2013, un dato no menor... 

Le preocupa mucho a Macri la inmovilidad del partido, un partido que quedó enfrascado en una gestión que viene desde 2007 y a la que le costó llegar al punto de tener que buscar aliados impensados, y en la cual tardaron en hacer pié.

Ya se empiezan a repartir los boletos “2013” y de seguir vigente la ley de internas abiertas, estimamos que no habrá más de 4 o 5 gateras. La gran pregunta es si de las 5 fuerzas más importantes (kirchnerismo, sciolismo, peronismo federal, PRO y FAP) todas tendrán sus candidatos o irán por “afuera” Queda el radicalismo y el Proyecto Sur sin definiciones, pero es probable que asistan a los comicios con alianzas, no sea cosa que se quedan fuera del piso electoral.

José Terenzio