Poco a poco, las noticias y/o comentarios sobre el vuelo MH370 de Malaysia Airlines van dejando de ocupar espacio en los medios de noticias.
Sin embargo, nada se sabe aún sobre qué es lo que ocurrió con el Boeing 777 que misteriosamente desapareció del aire.
Obviamente, existen dos hipótesis, fue un accidente o un atentado.
Por más que las autoridades malayas como de los EE UU afirman que no fue un atentado, pero todo indica lo contrario.
Si bien los comités de inteligencia de
Si hubiese sido un accidente, ¿cómo se explica que el avión siguió emitiendo señales después de desaparecer del los radares? Más aún, si fue un accidente, ¿dónde cayó? Y por último, ¿cómo se explica que si el avión partió desde Malasia con destino a China cambie su rumbo deliberadamente hacia el Sud Oeste?
Todo demuestra que, no solo no fue un accidente, sino que es más que evidente que el aparato fue desviado.
Todos sabemos que los terroristas, lo primero que hacen es, precisamente, adjudicarse el atentado.
Por lo tanto, aunque todavía no se haya concretado, no caben dudas de que es un acto terrorista. En realidad, es el primer paso, o la primera parte del acto en sí, ya que de otra manera, por más que haya caído al océano, como acto terrorista, algún rastro se debería haber encontrado; y es la primera parte de un acto terrorista por que quien lo hizo ya se lo debería haber adjudicado.
Ahora bien, ¿por qué las autoridades están empeñadas en decir que fue un accidente y tratar de no hablar más del tema cuando no existe ninguna prueba de esto? Porque saben que la desaparición del Boeing 777 es solo la primera parte del plan, y el gobierno norteamericano está muy preocupado, y no pueden decirlo para no causar pánico. De hecho, están convencidos de que el avión fue robado.
Esta es la hipótesis que manejan tanto la central de inteligencia norteamericana como la israelí.
El avión está escondido en algún lugar de alguna pequeña isla deshabitada del Océano Índico y los pasajeros asesinados.
Por lo tanto, creen que la segunda parte de plan, tratando de utilizar el sentido común (si es que le podemos llamar sentido común a lo que piensa un terrorista) es que en algún momento lo van a tirar en alguna ciudad, supuestamente, en Israel.
Es más, imaginan que le van a sacar las butacas y van a llenar, además de la bodega, el habitáculo del avión con barriles con combustible.
No nos olvidemos de que el atentado a las Torres Gemelas y al Pentágono, no solo marcaron un punto de inflexión, sino también una nueva forma de hacer terrorismo, y esto encaja en la teoría de una nueva táctica terrorista. De ser así, podríamos ver una variable de terrorismo.
Es cuestión de tiempo, o de que los norteamericanos encuentren el avión antes de que se lleve a cabo la segunda parte del atentado.
Pablo Dócimo
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