Dos días después de que Jorge Lanata desnudara parte de la corrupción en la provincia de Formosa, Cristina Kirchner viajó al mismo lugar para hacer una encendida defensa de su gobernador, Gildo Insfrán.
"Es el gobernador elegido por todos ustedes", enfatizó la primera mandataria durante el discurso que ofreció en un microestadio de la ciudad capital, donde anunció obras hídricas y entrega de netbooks.
Luego, en un mensaje que pareció dirigido a Lanata, la presidenta dijo que los dirigentes del Frente para la Victoria pueden "hablar más de media hora o una hora contando las cosas que hicimos y no criticando a los demás", mientras que pidió a los formoseños que "no presten atención a las pálidas o a las malas vibraciones".
Cristina insistió después en defender las obras que se realizaron en esa provincia desde 2003, aunque advirtió que "eso tampoco lo puede hacer un solo presidente" sino que, aclaró, "también hubo una gestión provincial que se hizo cargo de ese proyecto y puso todo lo que había que poner para incorporar a Formosa al proyecto nacional".
En el mismo sentido, la jefa de Estado avaló una y otra vez a Insfran: " Podría comenzar a enumerar cifras, acá tengo mis anteojos, mis papeles, pero las cifras de Gildo ya alcanzan y sobran, no los pienso volver locos. Además, las tiene que decir él, que para eso es el gobernador elegido por todos ustedes".
Finalmente, Cristina apuntó contra los legisladores nacionales que se opusieron al proyecto de ley que impulsó la Casa Rosada para modificar la jurisdicción de pago de los bonistas reestructurados, ante el fallo del juez de Nueva York, Thomas Griesa, a favor de los denominados "fondos buitre".