“Nosotros queremos saber si Raúl Fernández es su socio o testaferro”, le preguntó la explosiva diputada Elisa “Lilita” Carrió al jefe de Gabinete Jorge Capitanich. La polémica fue durante la presentación del último informe de gestión que hizo el chaqueño ante la Cámara baja el pasado 3 de septiembre.

Pero Carrió no llegó sola a esa conclusión. Tuvo una fuente con información muy detallada: Sandra Mendoza, la ex esposa del jefe de Gabinete. Las dos están acostumbradas a que se critique su exacerbado histrionismo.

Carrió y Mendoza se conocen de muy jóvenes. Guillermo Mendoza, el padre de Sandra, llevó a Lilita a trabajar al Superior Tribunal de Justicia de Chaco. Además, en Diputados se sientan muy cerca. Esa cercanía llevó a Mendoza a contarle a Carrió detalles del patrimonio y socios de su ex marido. La diputada de UNEN no tardó en entusiasmarse y empezar una in- vestigación por su cuenta. Mendoza solo aportó los nombres y algunos detalles, Carrió hizo el resto.

La investigación se centra en tres personas. Uno es Raúl Fernández, socio de Capitanich en algunas empresas y heredero de sus acciones en sociedades que “Coqui” tuvo que abandonar cuando ingresó a la administración pública. El otro es Martín Cortés, presidente del Banco de Formosa y ex compañero de directorio de Capitanich en la consultora M-Unit SRL. La tercera persona es Omar Judis, secretario de Medio  Ambiente de la Nación, histórico alfil de Capitanich y señalado en la pro vincia como supuesto testaferro del  jefe de Gabinete.

Raúl Fernández registra domicilio en los mismos lugares que Capitanich, no solo en temas laborales, sino también personales. Por ejemplo: en Carlos Pellegrini 125, donde funcionaba la histórica oficina de “Coqui” en Buenos Aires, y en las torres Catalinas, en Ingeniero Enrique Butty 220. El vínculo entre Capitanich y Fernández es tan cercano que este último compró un departamento en el mismo complejo que “Coqui”, en las torres Quartier Demaria, en Palermo.

El tiempo y el desamor llevó a Capitanich a abandonar ese edificio: hoy vive solo Sandra Mendoza, tras la separación. Fernández conserva su propiedad allí.

Fernández creó junto con el jefe de Gabinete por lo menos tres sociedades dedicadas a la consultoría económica, pools de siembra y publicidad.  Además administra una empresa dedicada a la construcción de aviones no tripulados para uso agrícola y de seguridad.

Los hombres que conocen a “Coqui” desde los años que era jefe de Gabinete de Eduardo Duhalde hablan de Raúl Fernández como el guardián de los negocios de Capitanich. Juntos crearon la consultora M-Unit SRL, donde además participó Martín Cortes, el presidente del Banco de Formosa.

Cortés está involucrado en el caso Ciccone, por tener llamados con José María Núñez Carmona, el alter ego del vice Amado Boudou. Además, Cortés cobró una comisión de 2,2 millones de pesos que salieron de los 7,6 millones que facturó Alejandro Vandenbroele por reestructurar la deuda de Formosa.

Hay que agregar otro dato a la comisión que cobró Cortés: la transferencia se hizo a la firma Estrategias de Imagen y Comunicación, que fundó Capitanich con Raúl Fernández.

Cuando le respondió a Lilita sobre Cortés, Capitanich afirmó conocerlo, pero negó tener un vínculo de otra naturaleza. Extraña manera de negar a un ex compañero de trabajo.

Según el Boletín Oficial, Capitanich  y Cortés renunciaron el mismo día al directorio de la consultora M-Unit. Al frente quedó el otro investigado, Raúl Fernández, quien la administra hasta hoy. Pero Fernández no quiso quedar-se solo con ese rubro y decidió ampliar sus horizontes. En el 2007 y 2008 registró dos marcas a su nombre: RSH Macroeconómica y Aerodreams.

Las dos empresas funcionan en el mismo domicilio y además tienen el mismo número de teléfono. Si se llama y se pregunta por cualquiera de estas empresas, el mismo operador resuelve la consulta.

Aerodreams es una empresa que se dedica a la fabricación de aviones no tripulados para uso agrícola y de seguridad. Según su página web, los aviones se pueden usar para análisis de cultivos, aplicación de agroquímicos, alerta temprana y con-trol de incendios, monitoreo de gasoductos, oleoductos y líneas de alta tensión. Los usos de los aviones también pueden ser: lucha contra la inmigración ilegal, contrabando, narcotráfico, monitoreo del tránsito vehicular en rutas, ataques terroristas, apoyo en búsqueda, rescate y servicios de reconocimiento y escolta de tropa en tierra, siempre según la página web.

Esta empresa es controlada por la sociedad Parmax SA, que dirigen Raúl Fernández y Guillermo Terraf. Esta última persona figura en la nómina de personal contratado de la Jefatura de Gabinete y además fue asesor de Capitanich cuando el chaqueño era senador. El 12 de mayo del 2004 “Coqui” pidió que le renovaran el contrato. Terraf además es parte del staff de RSH Macroeconómica. Todo queda entre amigos.

Pero hay más: Parmax, la controlante de Aerodreams, es proveedora del Estado. Según los registros oficiales, fue dada de alta el 13 de mayo del 2013. ¿Puede una persona contratada por la Jefatura de Gabinete tener una empresa proveedora del Estado? Es, por lo menos, poco ético. La sabueso Carrió está en búsqueda de la figura penal que englobe estos polémicos negociados.

Hay algo más, e igual de llamativo, en la declaración jurada que tuvo que presentar Parmax para ser aprobada como proveedora: entre sus principales clientes están el Ministerio de Economía de Formosa y el Fondo Fiduciario Provincial de Formosa (FonFiPro).

Un extraño gasto en aviones no tripulados para dos instituciones que se encargan de las finanzas de una provincia.

El presen-te de “Coqui” no es todo lo que imaginó el chaqueño cuando desembarcó en Buenos Aires. Atrás quedó el sueño de ser presidente y, lo que es peor, por estos días se volvió a instalar el fantasma de una salida anticipada de la Jefatura de Gabinete. Aunque Capitanich administra y coordina a los ministerios y defiende al Gobierno todos los días a las 8.05 de la mañana, en sus habituales conferencias de prensa, su figura está desgastada. En la Casa Rosada corre con fuerza la versión de que podría dejar su cargo para reasumir la gobernación de Chaco por la situación de su provincia.

Una de las excusas sería la decisión del gobernador interino, Juan Carlos Bacileff Ivanoff, de convocar a elecciones primarias anticipadas para el 8 de marzo del 2015 y adelantar todo el cronograma provincial. En Balcarce 50 afirman que eso le quitaría a Capitanich la posibilidad de elegir a los candidatos.

Los postulantes más firmes para reemplazar al jefe de Gabinete son el presidente de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el ministro de Economía Axel Kicillof.

Carrió está al tanto de estos rumores y apura su estrategia para llevarlo a los tribunales antes de que se vuelva a su provincia. 

Rodis Recalt
Revista Noticias