El cotillón K es ilimitado: remeras, vinchas, gorros, ceniceros, lapiceras, portalápices, llaveros, buzos, bufandas y hasta medias. Suele presentarse la discusión sobre su valor político y su efecto real sobre la decisión de los votantes, pero es necesario analizar otra cuestión no menos importante: saber cómo se sostiene económicamente la industria del cotillón partidario del kirchnerismo.
¿Quiénes fabricaban el cotillón K que suele acompañar a los funcionaros en sus viajes? ¿Cómo se financia la producción de la enorme variedad de remeras, gorros, banderas y demás elementos pro-gobierno que suelen verse en los actos del oficialismo?
Y lo más importante: ¿Es posible probar que se está usando el dinero público para facilitar la provisión de los objetos que promueven el personalismo y a los dirigentes del partido de gobierno?
Según pudo saber el sitio Eliminando Variables, es posible hallar alguna pista en las cooperativas textiles que reciben fondos millonarios del ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a cargo de Alicia Kirchner.
Y es que desde algunas de esas cooperativas salen grandes partidas de objetos de propaganda que son fabricadas en paralelo con otros productos contratados por la Cartera de la cuñada presidencial. Estas cooperativas son al mismo tiempo unidades de producción y centros de reclutamiento de militantes o sedes de actos partidarios a favor del gobierno, lo cual eleva la suspicacia sobre el criterio que se aplica para destinar contratos de producción.
Quien controla, promueve y autoriza el desempeño de las cooperativas y mutuales es el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), a cargo de Patricio Griffin. Ese organismo inició el año con unos $800 millones de presupuesto y 263 empleados en su haber. Además, según datos del mismo ente, hasta fines de septiembre del 2014 existían 522 contratados.
Hoy, las cooperativas se transformaron en un negocio muy rentable, en el que se garantizan ingresos muchas veces millonarios. El riesgo prácticamente es mínimo, ya que por su carácter de empresas promocionadas reciben beneficios impositivos y un régimen de contratación de personal que permite bajar costos y eludir muchas veces los controles de inspectores del Ministerio de Trabajo o de la AFIP usuales en las compañías privadas.
Desde hace muchos años, el ministerio de Desarrollo Social adquiere mediante licitaciones públicas miles de diferentes tipos de máquinas de coser para, luego, entregárselas a las cooperativas. A la vez, el ministerio a cargo de Alicia presidencial compra miles de toneladas de diferentes tipos telas al por mayor, con gastos millonarios, que también luego provee a las cooperativas.
La prestación a cambio –en teoría- es la fabricación y terminación de guardapolvos escolares, sábanas hospitalarias y juguetes para niños carenciados, entre algunas de las tareas más comunes encargadas por Desarrollo Social. Incluso, algunas de estas entidades realizan trabajos para empresas o particulares, como parte del plan de desarrollo de economía social.
Por ejemplo, en lo que va del 2014 –según un relevamiento que realizó Eliminando Variables del Boletín Oficial-, se efectuaron tres licitaciones públicas (24/2014; 88/2014 y 113/2014) en donde se solicitaban un total de 6.400 máquinas de coser (2.200 overlock, 2.800 rectas y 1.400 collareta 5 hilos) y 650 cortadoras de telas. Hasta el momento, sólo fueron adquiridas un total de 2.400 máquinas (800 overlock, 1000 rectas y 600 collareta 5 hilos) por un valor $16.485.800. Es decir, a un costo promedio de $6.869 cada máquina.
Nuevamente, el reparto de máquinas de coser no suele seguir patrones igualitarios y las cooperativas vinculadas al gobierno, según las fuentes consultadas, son las que reciben las mayores cantidades de equipos enviados por los funcionarios de Alicia Kirchner. Ese criterio tiene que ver con frecuencia con el tipo de trabajos que estén dispuestos a hacer para devolver el aporte que el estado hace para su funcionamiento.
En diciembre del 2013, se realizó la 5ta Feria Navideña de Emprendedores y Artesanos Argentinos dentro de las instalaciones de Canal 7 (TV Pública). (Eliminando Variables) adquirió en esa ocasión y en ese lugar un portallaves de madera con la imagen del “Nestornauta”, a un costo de 19 pesos.
La TV Pública afirmaba que habrían más de 400 emprendedores de todas las provincias del país que expondrían y comercializarían “frutas y verduras frescas, artesanías, productos para el hogar, alimentos bebidas, indumentarias, accesorios, instrumentos musicales y juguetes, entre otros productos”.
Aparentemente se olvidaron de informar que se venderían -en lugares de privilegio dentro del armado de esa feria en Canal 7-, elementos relacionados con imágenes o el folclore de los actuales gobernantes. Remeras, llaveros, buzos, tazas con las imágenes de Néstor Kirchner, Cristina Fernández, Eva Perón y Juan Domingo Perón podían ser adquiridos en varios de los locales instalados por el mismo Ministerio de Desarrollo Social, a cargo de Alicia Kirchner dentro de las instalaciones de Canal 7.
Seguí leyendo este informe acá.
Si la gilada supiera que la histriónica Bipolar odia a Perón y todos sus preceptos y propuestas e incluso si supieran lo que el "Pocho" opinaba de la masa sudorosa dejarían de ser los zombies que son ..................Pero no hay que avivar giles mas bien hay que tenerlos cautivos.
LAS FAMOSAS COOPERATIVAS DE TRABAJO CREADAS POR ESTE DESGOBIERNO SON LAS QUE CONFECIONAN ESE KOTILLON NOSOTROS (LOS GILES) PAGAMOS IMPUESTOS PARA QUE ELLOS USUFRUCTEN GRATAROLA TODO LO QUE HACEN SON UNOS LADRONES CONSETUDINARIOS NACIERON ROBANDO VIVEN ROBANDO MORIRAN ROBANDO ESO SON LOS K
Lo bueno de esas remeras es que no te las pide prestadas nadie ni te las van a afanar.
Acaso el PRO no tiene cotillon? Ustedes ven una sola parte, pero no el conjunto completo. Macri tiene lo mismo y más. Y ahora más show berreta habiéndole otorgado un premio a la "Cultura" al grasa de Tinelli... eso sí que es paupérrimo.