Cristina Kirchner lleva totalizados más de cien días de reposo a raíz de los diferentes problemas de salud e intervenciones quirúrgicas que debió atravesar desde que asumió la Jefatura de Estado en diciembre de 2007.
La acumulación de jornadas de descanso forzado por las distintas complicaciones en su salud continuará creciendo, ya que actualmente cumple en El Calafate otro período de reposo por la fractura de tobillo que sufrió tras la reciente Navidad y aún no se sabe cuándo retomará su agenda de actividades.
Un hematoma intracraneal, un nódulo benigno en la glándula tiroides, una inflamación del colon, la fractura de tobillo actual, varias lipotimias y bajas de presión arterial, además de algunos cuadros de anginas y faringitis fueron las afecciones que sufrió la mandataria a lo largo de estos siete años, que la obligaron a suspender distintas actividades.
El primer problema de salud que afrontó Cristina Kirchner fue el 9 de enero de 2009, cuando le diagnosticaron una "lipotimia con deshidratación leve" por la cual cumplió dos días de reposo, teniendo que posponer un viaje oficial a Cuba, aunque finalmente tardó cinco jornadas en retomar sus actividades.
Durante el transcurso de este año sufrió una faringolaringitis, en julio, por la cual cumplió 48 horas de reposo y suspendió un viaje a Paraguay, mientras que en octubre debió descansar otros dos días por una faringitis.
En noviembre se le detectó "sigmoiditis", una inflamación en el colon, por el cual debió ser internada en el Sanatorio Otamendi y luego guardar reposo por un total de tres semanas.
Y cerró el año con una fractura de tobillo en un accidente doméstico en Río Gallegos por la cual está actualmente cumpliendo un reposo que inició en la quinta de Olivos y que continúa ahora en el Calafate, el cual lleva nueve días y se extenderá unas jornadas más, sin que se sepa aún cuando retomará sus actividades.