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El mayor desafío del próximo gobierno: la política exterior

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QUÉ HACER Y QUÉ NO HACER
QUÉ HACER Y QUÉ NO HACER

Lamentablemente, nuestro país ha resignado protagonismo en este plano en la última década y media. Mientras hace un siglo estábamos llamados a rivalizar con los Estados Unidos, hoy la Argentina parece más insignificante que nunca de cara al mundo globalizado del siglo XXI. Un ejemplo de ello es que en las últimas giras del presidente de la potencia del norte, pasó por alto estas tierras en sus visitas a nuestros vecinos.

 

No hay algo como “lo correcto” en política exterior, por ser ésta volátil y cambiante. Lo único cierto es que una potencia debe estar en los primeros planos internacionales y “codearse” con los actores que imperan en ellos, aunque no necesariamente ser complaciente con éstos. Una cosa es estar y otra es ceder.

La Argentina ha perdido todo vínculo con Estados Unidos e Israel, guste o no, piezas importantes del tablero internacional. Sin relaciones fluidas con potencias como Alemania, Francia, Italia o Inglaterra. Sin vinculación con economías en ascenso, como por ejemplo la India.

Quedó aislada como actor preponderante de Latinoamérica, donde Brasil tomó la delantera. Nos han dejado atrás países como Chile, Colombia o Uruguay, tanto en exportaciones como en sus relaciones bilaterales. No ha sabido utilizar el Mercosur como un instrumento de utilidad. Tampoco ha tenido contacto con la alianza del Pacífico.

En el plano comercial, quedó cooperando con actores de mala reputación como Irán, Venezuela o Angola -sí, Angola-, llevando una misión comercial con Guillermo Moreno a la cabeza y productos de la feria “La Salada” y cosechadoras que nunca se vendieron, y que aún resulta extraña.

En los últimos años hemos tenido acercamiento a potencias como Rusia y China, ¿pero en qué condiciones? El primero, gobernado por un déspota que acumula poder desde hace más de una década y cercena la libertad política y  de prensa (donde opositores aparecen con cuatro tiros en el centro de Moscú). El segundo, permitiéndole instalar una base espacial/militar en la provincia de Neuquén, aún sin muchos detalles oficiales al respecto, sin siquiera venderle materia prima con valor agregado a cambio. La soja sola y los vagones no son suficientes.   

El episodio “Nisman”, el Memorándum con Irán, los “fondos buirte”, Timerman, los casos de corrupción del círculo cercano a CFK, el procesamiento de Amado Boudou –y la lista sigue-, son hechos que no hacen otra cosa que agravar la posición y el (des)prestigio internacional del país, que costará mucho recuperar.

Sin dudas, además de los miles de problemas y desafíos domésticos que deberá enfrentar el próximo gobierno, quedará uno más: restituir una política exterior seria y confiable, como así también volver a poner al país en las primeras planas del mundo globalizado, dejando atrás las confrontaciones y haciendo olvidar actos patéticos como la “contra-cumbre” con Chávez y Maradona a la cabeza, mientras el presidente norteamericano exponía en Mar del Plata, en la Cumbre de las Américas en 2005. Fue la última vez que un mandatario de ese país pisó el suelo argentino.

La “década ganada” es un ejemplo de lo que no hay que hacer en política exterior.

 
 

10 comentarios Dejá tu comentario

  1. Hermoso articulo politicamente correcto, pero erroneo por todos lados. Israel? no existe de EEUU que tiene 30 bases en Argentina no dice nada? eso es correcto? Y la base inglesa en Santa cruz? esa tambien es correcta? Los americanos no vienieron aca, fueron a bajarle los pantalones a vilma. Eso esta bien? Siguen matando negros en su pais. viva el pais de la libertad!!! Alemania? tampoco existe. Esta manejada por el sionismo, y de la mano se llevaron puesta a toda Europa. Son varios paises se queiren ir del euro. Lo dijo Le pen la semana pasada. Los griegos, italianos, Espanoles, etc Charly, Canada? fue ud recientemente? sabe como se terminaron las libertades personales? Esto parece una joda para video match. Saludos

  2. Sr. Kotov: usted se refiere a esta década. Por tanto infiero que considera al menemato como la era de oro de significación internacional. Y sí, así fue si consideramos que el Banco Mundial y el FMI ponían al gobierno argentino de entonces como modelo a imitar por todos los países, excepto los del Primer Mundo, claro. ¿Y por qué era "ejemplo"?. Lo era por desmantelar las empresas del Estado y entregarlas, junto a nuestras riquezas naturales, a las corporaciones multinacionales, cuyo intereses son los que velan los así llamados Organismos de Crédito Internacionales, por haber desnacionalizado la banca dejando así a los argentinos y lo poco que les quedaba a la voracidad de los banqueros y especuladores financieros de ese "Primer Mundo". Esas políticas, que son las que fueron continuadas por los gobiernos sucesivos y profundizadas por el kirchnerismo, pese a los discursos en contrario -el "relato"- son las que nos llevaron al actual estado de postración, con un deterioro generalizado de la situación social, con un 40% por debajo de la línea de pobreza, con una desocupación de dos cifras y una subocupación similar, con el 50% de trabajo precarizado, y el salario promedio de los trabajadores bajo convenio de solo $5000 cuando el salario familiar se estima en más de 15000 pesos. Ya no nos pertenecen ni el gas, ni el petróleo, la minería arrasa con nuestros cerros y el agua a costa de los pobladores de la zona, el monocultivo avanza sobre bosques condenando a las inundaciones y la erosión, contaminando con agroquímicos y expulsando población rural que termina hacinada en las villas miseria. Y tantas, tantas otras "ventajas" que podemos señalar. Y en lo político tuvimos relaciones "carnales" con los EEUU, al extremo de mandar al Golfo las naves de guerra que se negaron en nuestra Batalla de Malvinas, o soldados a sojuzgar al pueblo humilde de Haití porque los "americanos" tenían sus tropas ocupadas en Medio Oriente (qué cosa, pensar que en la época que usted menciona Argentina envió un acorazado a Sto. Domingo para prevenir justamente una invasión norteamericana. Ahora mandamos tropas no para liberar, sino para sojuzgar a cuentas de un tercero). Bueno, aplicando esas políticas éramos "ejemplo". Si eso es lo que quiere, le digo NO, gracias. Claro que quiero cambiar la actual situación internacional de mi país, pero no por esa vía.

  3. Ilya Kotov, comparto la descripcion que ud. hace en un 100%. La pregunta es, si se puede salir en democracia de este pozo ? La politica se convirtio en un fin en si misma, hoy nuestros referentes politicos hablan lo que los encuestadores les dicen, que es lo que la gente quiere escuchar. Consumo, subsidios y precios congelados, dolar bajo para viajar, etc. De sacrificio ni hablemos. Acaso piensan que vamos a salir sin sufrimiento de estos años de desgobierno ? Acaso piensan que hay politicos dispuestos a quemarse para lograr una recuperacion ? Creen que el pueblo acompañara solidariamente un ajuste ? O habra huelgas, levantamientos y marchas de protesta. Mas de uno gritara que vuelva Cristina !! No se lograra la recuperacion del pais en democracia, porque la misma quedo herida de muerte. Se necesitan años de recuperacion y educacion para que funcione tal como fue concebida. Salvo que consideremos democracia a los levantamanos del Congreso y Republica a la sumision del Congreso al Ejecutivo, y el disciplinamiento del Poder Judicial por el gobierno de turno. Sin castigo duro a los actos de corrupcion de los funcionarios, hacer sacrificios, convengamos, es juntar agua con un tenedor.

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