Al transcurrir la segunda semana de paro de los trabajadores municipales de Río Gallegos, la ciudad luce sucia y gris, acompañado el paisaje por un clima bastante hostil, con lloviznas, viento, frío y amenaza de nieve. Tal es la inactividad en la Municipalidad de esa capital, cuna del kirchenrismo y a cuyo intendente apoyó y financió con su intermediación ante Cristina, Máximo Kirchner, que hoy el frente de su propia casa, luce las consecuencias de la mala gestión del intendente Cantín.
Según mostró OPI Santa Cruz, la situación de higiene en Río Gallegos es caótica, luego de finalizar la segunda semana consecutiva de paro de empleados municipales, donde no solo no funciona la administración de la comuna, sino que un servicio tan básico como el de la recolección de residuos brilla por su ausencia desde hace 15 días y la basura se sigue acumulando en contenedores, cestos y hasta tirados en las veredas, pintando a la ciudad de una clara señal de desidia, abandono y mala gestión, que afecta directamente al Intendente Raúl Cantín, un hombre que ni bien asumió, recibió el guiño de Máximo, quien por orden de su madre, apoyó al tío de Lázaro Báez y lo solventó durante bastante tiempo en el poder, con el envío directo de fondos desde Nación, hasta que en las últimas semanas ya no le atiende ni el teléfono.
Resulta llamativo ver que frente a la casa recién remodelada y ampliada de Máximo Kirchner en calle Monte Aymond, cómo se acumulan bolsas con residuos varios y quedando a merced de los perros. Algunas lucen rotas y su contenido desparramado en la vereda.
Paradójicamente, Máximo resulta ser víctima de su propia elección política, cuando, ante la inminencia del triunfo de Cantín en 2011, decidió apoyar al nuevo intendente pensando que éste haría el trabajo necesario para preparar el terreno que permitiera su ingreso como candidato.
Lo cierto es que la mala gestión de Cantín en estos 4 años, le dejó un terreno, pero minado y eso se refleja en las encuestas.
“La ciudad luce sucia, desbordada de basura y ni hablar de los pozos, las calles rotas y hasta las plantas secas. La administración de Cantín ha terminado por sepultar cualquier esperanza que tuviera el hijo de la presidenta, de apoyarse en los logros del FPV, para hacer base en Río Gallegos con el poder de La Cámpora”, dice OPI.