La diputada nacional Graciela Ocaña, encargada de llevar a la Justicia con gran frecuencia acusaciones de corrupción contra dirigentes opositores, fue denunciada por el otrora legislador porteño Gustavo Vera por presunto “enriquecimiento ilícito, negociaciones incompatibles con su condición de funcionaria pública y falsedad maliciosa” en la presentación de su declaración jurada (DDJJ) de 2016.
Vera acusó a Ocaña ante la Justicia sobre la base de 3 tópicos fundamentales: en primer lugar la DDJJ de 2016 y presuntos “incrementos e inconsistencias”, en segundo, la Fundación “confianza pública” (creada con la idea de fortalecer la gobernabilidad democrática para contribuir a la construcción de la convivencia social y al desarrollo humano) y los gastos de las campañas electorales, y por último, pero no menos importante, una empresa constructora de su propiedad e hipotéticos favores de obra pública de intendentes PRO.
En la denuncia hecha por el referente de la ONG Alameda se puede leer: “Graciela Ocaña, según consta en la declaración jurada que presentó en 2016 ante la oficina anticorrupción, tuvo un notable incremento patrimonial respecto a lo manifestado en la planilla del año anterior. Ascendió de $1.523.321,70 a $4.052.874,46 pesos, aclarándose que había adquirido deudas por 629.714,03 pesos”.
Según se desprende de la denuncia, es posible que Ocaña haya incurrido en diversos delitos que, Vera supo mencionar, la justicia debería investigar:
-Un inmueble “adquirido según afirma, mediante el otorgamiento de un crédito en el año 2013, informando una valuación de $630.000,00. Este importe sería inferior al real”.
-Otro inmueble “también comprado mediante un crédito en el año 2000, e informó que su valor era de un centavo de peso, a pesar de que a la fecha original de la adquisición manifestó que el precio correspondiente era de $282.097,00 pesos”.
-“Declaró ser dueña de un automóvil Toyota Corolla XEI PACK 1.8 CVT modelo 2015, comprado ese mismo año –también mediante crédito- en un valor de $290.000,00 pesos. Informa en 2016 la misma valuación, sin modificación alguna”.
-“No declaró si conservaba o había vendido el automóvil Peugeot 408 ALLURE + 2.0N del 2012, adquirido ese mismo año también con crédito, manifestando en aquella oportunidad que valía un centavo”.
-“Declaró la titularidad de una caja de ahorro con fondos por un monto de $ 154.718,71 obtenidos mediante la venta de activos, sin detallar que cosas vendió, y sin explicar de qué manera en ese mismo ejercicio el monto depositado se eleva a 825.000,00”.
-“Declaró ser propietaria de una parcela de 1050 m2 en el Barrio privado ‘Terravista’ Ubicado en Colectora Norte Acceso Oeste, General Rodríguez, Buenos Aires, se encuentra el Barrio Privado ‘Terravista’, valuado en $ 900.000,00. Sin embargo, según comentarios del personal de vigilancia del emprendimiento el lote 236 de la manzana E-1, que pertenece a la denunciada en su carácter de socia número 00764/00 no se encuentra baldío como lo manifestó. En esa parcela existiría una muy lujosa casa valuada en un millón de dólares estadounidenses”.
-“Declara que incorpora ingresos por 1.175.000 pesos como titular de ‘Área Tr3s Constructora SA’ declarando que los mencionados tienen origen en la venta de activos. Llama la atención que uno de los socios de la constructora, Matías Fernández López Osornio, registra su domicilio en el mismo barrio privado ‘Terravista’”.
Por supuesto, y como era de esperarse, al ser consultado por la agencia de noticias Telam, el vocero de Ocaña desmintió los hechos denunciados por Vera y habló de una maniobra vinculada a Hugo Moyano, teniendo en cuenta que la diputada viene denunciando a las “mafias sindicales”.
En declaraciones a Perfil, Pablo Ávila, el encargado de prensa de Ocaña, rechazó las acusaciones y justificó el crecimiento patrimonial: “La suba de su efectivo se debe a que vendió la casa de Haedo y un automóvil Peugeot”.
Ávila, además explicó que esos bienes fueron reportados por un centavo de peso porque “al desprenderse de un bien, la AFIP tarda en registrarlo y no puede poner de valor cero, por eso el valor simbólico del centavo”.
Por último, el vocero mencionó que “la compra del terreno en Terravista se paga con la venta de la casa de Haedo. Ese terreno luego se edificó y es falso que la constructora sea suya, ella la contrato para hacer parte de la casa y pagó por ese servicio”, y agregó que “no hay forma de demostrar que recibió plata de la constructora porque es falso”.
Sin embargo, tras presentar la denuncia penal patrocinado por Daniel Llermanos –el mismo que defiende a Hugo y Pablo Moyano- Vera sostuvo que “es llamativo tan brutal incremento ya que Graciela Ocaña en los últimos 20 años el único trabajo que tuvo es en el Estado”.
¿Qué tiene que ver Hugo Moyano en todo esto?
Si bien la denuncia fue presentada por Gustavo Vera, este último solo bridó apoyo legal como abogado del camionero, siendo Moyano quien la acusó de enriquecimiento ilícito, estirando de manera permanente la batalla que surgió entre él y la legisladora de Cambiemos.
Además, es dable recordar, que Ocaña, junto con su colega Paula Oliveto, quien también es diputada nacional de Cambiemos, hace unos días denunciaron haber recibido amenazas de muerte vinculadas a las denuncias contra Hugo Moyano.
En el mensaje que le llegó vía mail a Ocaña, la llaman “cucaracha”, de la misma manera que Hugo Moyano la había etiquetado días atrás, tras la denuncia por presunto desvío de fondos de la obra social del gremio a favor de sociedades de familiares y allegados.
“Cucaracha de mierda, te seguís metiendo con el jefe y te vamos a tirar mil toneladas de basura en la puerta de tu casa y te la vamos a hacer morfar. No te salva ni la custodia, sos boleta, cucaracha conchuda” es el texto de la amenaza, difundido por el entorno de Ocaña.
El mail fue enviado una hora después de que la diputada se reuniera con el juez federal de Morón, Néstor Barral, que investiga a Moyano. La diputada le había llevado al magistrado los balances de la obra social de Camioneros.
La denuncia completa: